Cuenta corriente se deteriora en el segundo trimestre y déficit equivale al 8,5% del PIB
Los economistas afirman que dentro de las principales implicancias para la economía, la más importante es la debilidad en la cual queda posicionada la economía principalmente para enfrentar shock adversos.
Una mala noticia adicional trajo consigo las Cuentas Nacionales que publicó el Banco Central. Durante el segundo trimestre de 2022, la cuenta corriente registró un déficit de US$6.564 millones, el cual, acumulado en un año equivale a 8,5% del Producto Interno Bruto (PIB), la mayor cifra desde la década de los años 80.
El resultado se explicó por la renta devengada de la inversión extranjera en Chile y el déficit de la balanza comercial de servicios.
Juan San Martín, economista de Bci, explica que “el deterioro refleja una economía que está consumiendo más de lo que es capaz de producir”. Misma visión entrega Tomás Flores, economista de LyD quien acota que “este déficit refleja el exceso de gasto que tiene la economía chilena y que requiere un ajuste ya que es financiable en el mediano plazo”.
¿Qué consencuencia tiene para la economía? Martina Ogaz, economista de Euroamerica sostiene que dentro de las implicancias para la economía, “la más importante es la debilidad en la cual queda posicionada la economía principalmente para enfrentar shock”. Además, la experta destaca que la posición financiera del país “se deteriora de igual manera encareciendo el costo de financiamiento ante la posición más debilitada de la cuenta corriente”.
Esa opinión es complementada por San Martín quien dice que “un mayor déficit en cuenta corriente refleja una economía más frágil y deteriorada lo cual motiva un mayor tipo de cambio real”.
Por su parte, el informe del BC dijo que la cuenta financiera registró entradas netas de capital por US$6.257 millones, explicadas por un aumento de pasivos, asociado, principalmente, a las empresas de inversión extranjera directa. En menor medida, también incidió la disminución en los activos, asociada al retorno de inversiones desde el exterior, principalmente, por parte de los Bancos y Fondos de Pensiones.
La deuda externa se redujo hasta ubicarse en US$233.909 millones (84,0% del PIB), debido a una caída en el valor de los bonos de Gobierno y Empresas, y a la depreciación de las monedas respecto del dólar, en particular del peso chileno.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.