Desempleo sube a 7,4% en noviembre-enero y se aleja posibilidad de alcanzar el 10%

El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) estrenó este viernes la Encuesta de Empleo actualizada con el nuevo marco muestral que recoge la información del Censo 2017, versus el anterior que estaba basado en el Censo de 2002.

Con esta nueva serie, la tasa de desempleo para el trimestre noviembre-enero de 2020 subió a 7,4%, es decir 0,3 punto porcentual en comparación al mismo período del año pasado (7,1%). La cifra equivale a 732 mil desempleados. Asimismo, la tasa de desocupación de los migrantes fue de 6,7%, mientras que para los nacionales de 7,4%.

De acuerdo al INE, el alza del desempleo es consecuencia del incremento de 2,5% de la fuerza de trabajo, mayor a la registrada por los ocupados (2,1%). Por su parte, los desocupados variaron 6,8%, influidos exclusivamente por cesantes (9,6%), dado que quienes buscan trabajo por primera vez se redujeron (-8,0%).

En cuanto a la generación de empleo, el ente estadístico dijo que se crearon 190 mil empleos. De ese total, 185 mil corresponden a dependientes y 4,6 mil a independientes. En el desglose, el empleo asalariado subió 3% totalizando 192 mil. De ese total, el 75% fue asalariado privado (144 mil), mientras que el 25% es asalariado público (48 mil).

El INE informó además que los empleos por cuenta propia avanzaron 0,8% registrando 14 mil. Por sector productivo, el empleo en la industria cayó 0,8%, mientras que construcción subió 4% y comercio 2,4%.

La cifra fue analizada con cautela por los economistas, aunque de manera preliminar hay coincidencia de que la posibilidad de que la cifra de desempleo supere el 10% -como previó el Banco Central- se aleja cada vez más. En este punto, el economista de LyD, Tomás Flores, dijo que “en el trimestre junio-agosto podríamos llegar a 9%. No llegaría a 10% porque una parte de los despedidos se han ido al mercado informal”. Para Alejandro Fernández, economista de Gemines, esa posibilidad también se ve difícil. “Da la impresión que no, considerando la baja elasticidad que parece tener el empleo respecto del crecimiento”, acotó y añadió que “puede significar que se produzca un deterioro en el mercado del trabajo, en términos de la calidad de los empleos, el número de horas trabajadas y las condiciones de trabajo, sin que ello se refleje a cabalidad en la tasa de desocupación”.

Martina Ogaz, economista de EuroAmerica subrayó que “es poco probable, porque se debe considerar el empleo por cuenta propia”.

La directora (i) del INE, Sandra Quijada, recalcó que la actualización de la proyección de población hizo que los ocupados aumentaran en promedio 287 mil y en los últimos tres años 385 mil. La fuerza de trabajo subió 370 mil y 440 en los últimos tres años.

El estreno de la nueva encuesta fue recibida con cautela por los economistas quienes esperan contar con mayor información antes de emitir un juicio más categórico. En este punto, el director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales UC, David Bravo, afirmó que “es difícil poder comentar sobre lo entregado por el INE, porque hay información que regularmente el INE entregaba en su boletín y que ahora no está presente”. Pese a ello, Bravo dijo que más allá de que la diferencia entre ambas serie es de 0,2 pp, los cambios son positivos. “El cambio muestra que la encuesta de empleo tenía importantes sesgos que llevaron a subrepresentar la ocupación y su dinamismo en los últimos años”. Fernández añadió que “es raro que la tasa de desempleo haya subido tan poco luego de iniciada la crisis de octubre, especialmente cuando se la compara con la de la Universidad de Chile de diciembre”.