El aumento de los robos con violencia, las cifras históricas de homicidios y la mayor violencia con la que se perpetran los delitos son algunas de las causas que han llevado a una mayor percepción por parte de la ciudadanía de que Chile es un país inseguro.

Así lo concluye un informe de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), el cual arroja que más del 70% de los encuestados percibe actualmente al país como inseguro, mientras que apenas un 8% evalúa a Chile como un país seguro o muy seguro. La medición se hizo a través de una encuesta realizada a consumidores mensualmente entre agosto y noviembre del 2022 y consideró a poco más de 1.200 personas.

Así también, de acuerdo a datos oficiales recopilados por la CCS, los delitos han aumentado fuertemente en 2022. Los robos con violencia, por ejemplo, aumentaron en un 64% en relación al 2021 de acuerdo al Sistema Táctico de Operación Policial, en tanto los robos con fuerza y los hurtos lo hicieron en torno a un 47%.

En tanto, el número de homicidios se encuentra en máximos históricos, muy por sobre los niveles prepandemia: se perpetraron más de 800 en 2022 y menos de 550 hasta el 2019.

Por su parte, María Teresa Vial, presidenta de la CCS aseguró que este ha sido un tema que desde el gremio han venido siguiendo de cerca, dado que el comercio ha sido uno de los sectores más golpeados por el aumento de delitos en locales y establecimientos. “Creemos que es urgente que el gobierno pueda aplicar nuevas y mejores medidas para devolver la sensación de seguridad a la población, que lamentablemente hoy está inclinada por un 70% a la inseguridad”, dijo.

Si bien la menor movilidad y los períodos de cuarentena habían provocado una caída en varios indicadores delictuales, la mayoría de ellos ya se encontraba por sobre los registros previos en los últimos meses del año pasado. Esto, sumado a la mayor visibilidad de las prácticas delictuales, han provocado, de acuerdo al gremio del comercio, un aumento constante en la sensación de inseguridad en la sociedad.

La percepción de inseguridad en el país se incrementa en los grupos de mayor edad, si bien el máximo se da entre los 40 y 55 años, donde supera al 80%, en los mayores de 55 llega al 74%.

En tanto, por grupo socioeconómico, es en los estratos de menores ingresos (D), donde se observa con mayor fuerza la sensación de inseguridad: un 75% versus el 66-67% en el resto de los segmentos.

A nivel de género, en tanto, de acuerdo a la Cámara no se aprecian diferencias significativas, si bien el indicador es levemente más alto en el caso de las mujeres (72%).

Por otro lado, respecto a los distintos tipos de desplazamiento, caminar por las calles de la ciudad aparece como la más peligrosa de acuerdo al informe, siendo considerada insegura por un 63% de los encuestados. Dicho porcentaje, además, ha ido en moderado aumento en los últimos meses.

En una posición muy similar se encuentra el desplazamiento en automóvil, percibido como inseguro por el 62%, pero con un aumento más importante, considerando que en agosto esta proporción se encontraba en el 54%.

Caso contrario ocurre con el transporte urbano. De acuerdo al estudio, ha ido mejorando entre las personas la percepción de seguridad de este, y el porcentaje que lo considera inseguro ha disminuido desde un 56% a un 51% entre agosto y noviembre.

A lo anterior se suma lo informado por Cadem en la encuesta Plaza Pública de la primera semana de diciembre de 2022. Allí se indicaba que un 80% declaró tener mucha o bastante preocupación de ser víctima de un delito y un 85% de que esto le ocurriera en espacios con comercio ambulante.

“Tal como hemos reiterado en diversos informes, la propagación descontrolada del comercio ilegal, tanto en cantidad como en densidad, se ha transformado en una de las principales fuentes de incubación del delito, con prácticas de crimen organizado que lo sostienen y eventos de violencia que ponen en riesgo diariamente a las personas”, explicó la líder gremial.

Ahora, con respecto al comercio establecido, en informes previos la CCS ya había dado cuenta de altos índices de victimización durante 2022 y se estima que el recuento total del año podría alcanzar máximos históricos. Sondeos entre socios de la Cámara arrojan incrementos generalizados en los delitos, que en algunos casos superan en casi un 90% las cifras de 2021.

De acuerdo con el reporte, no solamente ha aumentado el número de incidentes, sino también los métodos de robo, su nivel complejidad y violencia, las estructuras organizativas detrás de los hechos y sus vínculos con el comercio ilegal, entre otros factores que preocupan al gremio.

Frente a esto, la Cámara apuntó a que existe un importante aumento en la inversión para hacer frente al fenómeno por parte de las empresas de mayor tamaño, lo que, dice el informe, ha contribuido a mejorar la prevención, defensa y seguimiento judicial de los incidentes.

“No obstante, en la medida en que las políticas públicas de seguridad no muestran un avance significativo, el pequeño comercio queda en una situación de indefensión cada vez más vulnerable y manifiesta. En tal sentido, las últimas señales desde el ámbito político resultan más que preocupantes y desalentadoras”, asegura el reporte.

Y concluye: “El aumento de crímenes de alta connotación social en los que se ejerce fuerza o violencia en contra de las personas envuelve el peligro de invisibilizar el delito común contra la propiedad que tanto daño hace al comercio. Lo anterior resulta extremadamente grave si no se exige la persecución y condena de toda clase de delitos, el Estado no debe retroceder en su obligación de garantizar a toda la población la seguridad y el respeto de todos sus derechos”.