Ministro Pardow defiende proyecto de transición energética, refuta impacto en cuentas de luz y dice que incluso evitaría alzas por $ 3.500
Desde Londres, donde prepara su participación en un Chile Day enfocado en temas eléctricos, el secretario de Estado aseguró que los análisis que advertían aumentos en las cuentas no son correctos. La cartera propuso someter a una revisión por parte de un externo independiente a los cálculos, que fueron confeccionados con el apoyo del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI).
Las dudas sobre el impacto tarifario del proyecto de transición energética que el Ejecutivo ingresó a tramitación a principios de julio sigue entrampando su discusión. El ministro de Energía, Diego Pardow, realizó una nueva exposición ante la comisión de Minería y Energía del Senado, donde se encuentra radicada la iniciativa y presentó la posición de la cartera sobre el impacto que tendrían en las tarifas eléctricas los cuatro pilares del proyecto: reasignación de ingresos tarifarios, licitación de almacenamiento, obras necesarias y urgentes, y la revisión del valor de inversión.
En primer término, Pardow -quien expuso desde Londres, donde está participando en el Chile Day- remarcó que la propuesta de reasignar los ingresos tarifarios apunta a repartir los fondos que se acumulan a raíz de los desacoples entre los precios de inyección y los valores de retiro de energía que realizan las generadoras, y que se reparten posteriormente a clientes, pero sólo en aquellos períodos donde su acumulación sea extraordinaria. La propuesta contempla establecer un umbral vía reglamento, que permita al Coordinador Eléctrico reasignar dichos ingresos a las generadoras que hayan presentado mayores desbalances.
En esa línea, Pardow presentó un caso de un cliente tipo cuyo consumo promedia los 180 KW/h al mes, ubicado en la comuna de Puente Alto. El ejercicio calcula que en 2020, cuando los ingresos tarifarios fueron normales, la devolución a clientes generó un descuento en su cargo de transmisión de $40. En cambio, al proyectar lo que ocurriría en un año extraordinario, como 2022, el efecto en clientes de no incluir el mecanismo propuesto para reasignar los ingresos tarifarios sería de una devolución en boleta de $560. Al aplicar la propuesta, dicha devolución se reduciría a $160. Es decir, una diferencia de $400 por boleta.
El diseño, sostuvo Pardow, evita dos tipos de efectos que sí tienen efectos permanentes: que los contratos más económicos puedan quedar sin efecto, en caso de quiebras de empresas o similares; y que dichos riesgos sean internalizados en los futuros contratos de licitación de suministro, elevando los precios de la energía.
Al respecto, mencionó el caso de Acciona Energía Chile, dado a conocer por Pulso, que solicitó a la Comisión Nacional de Energía elevar el precio de la energía establecido en la licitación de 2015/01 en casi 40%. “Ese tipo de cosas son lo que se evitan con esto. (...) Obviamente, los contratos más económicos son los más expuestos a terminar, porque están más expuestos al impacto económico del desbalance entre inyección y retiro, a terminar por quiebras”, remarcó.
Los cálculos presentados por Pardow, y que fueron realizados con el apoyo del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI), arrojan que el impacto a clientes del término de los contratos más económicos para los clientes tipo sería cercano a los $5/kWh, lo que se traduce en incremento de $1.000 en la boleta.
“Eso, en una cuenta tipo, es un aumento permanente. No sólo en años extraordinarios, sino siempre, hasta que consiguiéramos reemplazar esos contratos con nuevos contratos económicos”, advirtió Pardow.
Respecto de las nuevas licitaciones, las estimaciones de internalizar los riesgos aumentarían el precio de la energía en $11/kWh, lo que se traduce en un alza de $2.500 en una cuenta tipo.
“Entonces, una disminución del descuento del orden de $400, a cambio genera evitar un aumento en tarifas, producto de quiebras de contratos o empeoramiento de las condiciones de subasta, del orden de $3.500″, enfatizó Pardow.
El cálculo difiere, al menos en parte, con lo presentado por el propio ministro Pardow en la sesión del pasado 12 de julio. Entonces, al menos en la modificación de los ingresos tarifarios se estimaba una menor devolución de $1/kWh en años extraordinarios. El sobreprecio evitado en las futuras licitaciones, en cambio, se mantuvo.
Almacenamiento
En cuanto a la licitación de sistemas de almacenamiento, Pardow reconoció que el texto ingresado explicaba la propuesta “de manera muy genérica”, lo que será corregido en futuras indicaciones. Con todo, dijo que la licitación será dual, replicando la fórmula para las subastas de generación eléctrica, donde se licitan infraestructuras y prestaciones de servicio, y se determinará un umbral mínimo de adjudicación. “La diferencia entre ambas, ese residual, es lo que es financiado por el cliente”, detalló.
Sin embargo, al presentar un ejemplo de licitación, con una inversión de 500 MW en un umbral mínimo de 80%, Pardow aseguró que las estimaciones arrojan que la diferencia para un cliente tipo sería de más menos $11 en total. “Podría ser un abono, un descuento o un cargo de $11. Esos son los órdenes de magnitud que estamos hablando, de nuevo, algo muy pequeño en cuenta tipo para la importancia de este tipo de inversión”, remarcó Pardow.
En tanto, sobre el mecanismo establecido para las obras urgentes, así como para la revisión del Valor de Inversión, aseguró que la propuesta no genera costos adicionales.
El ministro apuntó a la presentación realizada por la Asociación de Clientes Eléctricos No Regulados (Acenor), el 19 de julio en el Senado, donde la entidad advirtió que el proyecto de transición energética incrementaría en $11/kWh la cuenta de los clientes residenciales.
“Estas son obras que propiamente tal no tienen un costo, Y aquí quiero ser bien directo, en que lo que presentó Acenor no es correcto, porque esto son obras que están igual dentro de la planificación de la transmisión, entonces no es correcto decir que al apurarlas, se genere el costo”. dijo sobre las obras urgentes, y agregó respecto a la revisión de los valores de inversión que “pasa un poco lo mismo, ya que son obras que ya están mandatadas, pero que se relicitan, entonces tampoco es correcto considerar que esto tiene un efecto en tarifas, porque simplemente lo que se está haciendo es generar otro mecanismo más rápido”.
Revisión de un tercero independiente
Al término de la sesión, la asesora legislativa de la cartera y exministra de la Secretaría General de Gobierno, Ana Lya Uriarte, propuso a nombre del Ejecutivo que un tercero independiente revise los cálculos realizados por el ISCI.
“Nosotros quisiéramos poner a disposición, en un nombre a concordar, un análisis independiente de sinceramiento de tarifas de lo que significa el proyecto”, dijo, y detalló que esto podría ser acordado en la próxima reunión que sostendrán los equipos del Ministerio con los senadores de la comisión, el lunes 25 de septiembre, y donde esperan conocer la propuesta encargada a la consultora Valgesta para la estabilización de tarifas en el sector eléctrico.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.