Sostenibilidad como eje transversal: el desafío de las empresas en Chile

Sustentabilidad

Según un reciente estudio de la OIT, las organizaciones con operaciones en suelo nacional han impulsado la idea de generar un negocio amigable con el medioambiente, pero todavía existe la deuda de que esta urgencia esté presente en todas las áreas relacionadas a sus operaciones y que cuente con mediciones objetivas e incentivos para lograrlo.


El trabajo de las empresas para avanzar en sostenibilidad ha ido evolucionando, pero todavía no es suficiente. Lograr un equilibrio entre generar un negocio rentable y la sustentabilidad sigue siendo una de las deudas de las compañías en el mundo y también en Chile, según reveló un reciente estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

El documento “El rol de las personas encargadas de sostenibilidad, su relacionamiento con stakeholders e involucramiento de los trabajadores en la gestión de la sostenibilidad”, plantea que hoy las organizaciones con operaciones en Chile están trabajando el tema del cuidado del medioambiente. Esto, en mayor medida, gracias al interés de los CEO, propietarios e inversionistas de las organizaciones, y por los beneficios reputacionales que tiene para la imagen corporativa el mostrarse como un agente en esta área (ver gráfico).

La conclusiones y propuestas que realizó la OIT se basaron en una muestra de 55 empresas con presencia en Chile, entre organizaciones de un tamaño de más de 5.000 empleados hasta menos de 50 personas, y donde el 67% de las participantes tiene su casa matriz en suelo chileno. Los rubros de la muestra son de extracción de recursos naturales, agrícola, transportes, telecomunicaciones, comercio, servicios financieros y consultorías, entre otros, con firmas como Empresas Copec, Metro, Sodimac y PwC.

Otro de los aspectos que destaca el estudio es que los profesionales del área dejaron de estar relacionados exclusivamente al tema técnico y hoy también incluye a quienes cuentan con certificación en manejo de habilidades de relaciones y comunicaciones, para lograr la integración de la sostenibilidad en la gestión de la empresa de un modo transversal. De este grupo de expertos, el 80% cuenta con algún tipo de especialización en la materia de sostenibilidad y casi la mitad posee una maestría o doctorado en el tema en cuestión.

Sin embargo, el mismo informe plantea que aún es relativamente bajo el impacto del área de sostenibilidad en la manera de gestionar la empresa. En esa línea, el trabajo de la OIT junto a la colaboración de Acción Empresas señala que lograr un negocio sustentable se cumplirá en la medida que el tema se instale de forma transversal y con instrumentos que permitan medir cuánto de lo que se dice se está logrando. Un objetivo que dicen entender el 93% de las organizaciones participantes del estudio, pero que se contrapone con la conclusión de que solamente el 55% de las empresas indica estar logrando un alto impacto en el tema del equilibrio de sus operaciones y el cuidado del medioambiente. A esto se suma que solo el 38% de las organizaciones sostiene que ha logrado generar objetivos de sostenibilidad que puedan ser evaluados claramente.

“Debemos lograr el entendimiento de que las metas de sostenibilidad y las metas del negocio, son lo mismo. No hay una variable más relevante que la otra, porque dado el complejo contexto global, hoy la única oportunidad de negocios que asegura a una empresa perdurar, ser rentable, confiable para colaboradores, clientes, inversionistas, opinión pública y, a la vez, crear soluciones comerciales que aseguren desarrollo económico es la sostenibilidad”, dice la gerenta general de Acción Empresas, Marcela Bravo.

La OIT tampoco se mostró positiva al concluir que el trabajo por la sustentabilidad se mueve, principalmente, como factor reputacional. El organismo estima que las empresas deben avanzar por el objetivo de prevención de los riesgos que significa que se intensifiquen los efectos de la crisis climática y ante la posibilidad de aprovechar las oportunidades de negocio a largo plazo, que aparecen en medio de esta emergencia.

Desde la organización, también muestran su preocupación, porque el trabajo de sustentabilidad parece no salir de las oficinas de las altas autoridades. Solo el 38% de las empresas afirman capacitar a su personal en todos los niveles jerárquicos y menos del 30% ha logrado incorporar dinámicas de diálogo que permita incluir la voz de los trabajadores en materia de sostenibilidad.

“Las personas aún no logran ver cómo la sostenibilidad impacta directamente en su calidad de vida. No lo ven como un eje central de sus preocupaciones (…) y le restan protagonismo al avance de estos desafíos que solo podrán ser resueltos entre muchos. La crisis climática nos afecta a todos, y es importante que logremos entender el cómo nos impacta para acelerar las soluciones colectivas”, comenta Bravo.

Sobre los efectos de la pandemia, el sondeo muestra que la crisis sanitaria significó que las empresas aceleraran la puesta en marcha de sus estrategias de sostenibilidad y cumplimiento de metas. Además, la OIT destaca que se fortaleció el diálogo entre clientes, proveedores, comunidades y trabajadores.

“Lograr los objetivos de la agenda OIT centrada en las personas no será posible sin el involucramiento activo de las empresas. Eso es especialmente cierto en el contexto de la crisis del Covid-19. Es importante comprender cómo las organizaciones pueden desarrollar e implementar políticas y prácticas corporativas que aseguren la sostenibilidad empresarial y contribuyan al mismo tiempo a la sostenibilidad social y ambiental a nivel local, nacional, regional y global”, dicen desde el organismo.

El texto concluye argumentando que en Chile están las condiciones sociales, políticas, normativas y económicas para que las empresas no duden en avanzar en lograr un negocio que no siga generando un impacto negativo en el planeta. “¿Qué harán las empresas para abordar los problemas más persistentes y los nuevos desafíos existentes en una senda hacia el desarrollo sostenible? ¿A qué estarán dispuestas a renunciar? ¿Serán capaces de reconocer las oportunidades para lograr un balance entre rentabilidad de sus negocios y su sostenibilidad social y ambiental?”, son las preguntas que deja la OIT al cierre del documento.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.