US$24 mil millones han invertido los bancos verdes en proyectos sustentables

Superar las barreras del mercado y enfocar las inversiones que aceleren sus esfuerzos en alcanzar los objetivos climáticos descritos en el histórico Acuerdo de París, es el aporte que buscan impulsar los bancos verdes, entidades del mercado financiero que ofrecen financiamiento a proyectos que tengan un impacto positivo en la lucha contra el calentamiento global. Entre ellas están las nuevas tecnologías como los techos solares, la electromovilidad y la eficiencia energética, entre otros.

Según un informe del State of Green Banks 2020, publicado por Rocky Mountain Institute, Green Finance Institute y el Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (NRDC por sus siglas en inglés), hasta la fecha los 27 bancos verdes que se encuentran operativos en el mundo han invertido más de US$ 24 mil millones en proyectos a favor del medioambiente. Eso sí, el 67% de estas entidades se encuentra en países de altos ingresos.

Además, este tipo de iniciativas busca ser más ambicioso, dado el contexto poscrisis sanitaria por Covid-19. Ante la necesidad de recuperación económica esto será urgente, al igual que frente a los desafíos del cambio climático. De hecho, la muestra del estudio fue realizada en pleno desarrollo de la pandemia, entre junio y septiembre, con 46 encuestas y 15 entrevistas efectuadas con representantes de 36 países donde se están desarrollando proyectos de este tipo.

Sobre qué otros aspectos los hace atractivos para inversores privados, están la utilización de “una variedad de herramientas financieras, incluida la mitigación del riesgo, y suelen ser los primeros en invertir en nuevas tecnologías y geografías. Como resultado, los bancos verdes han atraído más de US$2 de inversión privada, en promedio, por cada US$1 de capital propio que invirtieron en un proyecto”, destaca el estudio.

El sondeo muestra que existen 25 países que están explorando la creación de un banco verde, con un interés notable en todas las regiones y en países de todos los niveles de ingresos. Entre ellos está Chile, calificado como un lugar de altos ingresos y en la primera etapa de “inicial interés”.

Pese a no tener un banco verde, sí existen algunos que van en esa línea. BancoEstado, con su plataforma de “mundo verde”, ofrece distintos productos de inversión y financiamiento para generar un impacto en el medioambiente como el fomento de la disminución del gasto de energía, uso óptimo de obras de riego, o para impulsar la electromovilidad y el acceso a un crédito hipotecario para viviendas construidas bajo el concepto de eficiencia energética.

Mientras, Santander Chile tiene en su cartera similares instrumentos con enfoque sustentable, como su fondo mutuo verde, que invierte en empresas “comprometidas con el medioambiente” y otras ofertas que buscan compensar la huella de carbono que se genera al comprar con las tarjetas.