Regulador emite norma que permitirá emisión de tarjetas de prepago

SBIF

Tarjetas abiertas a través de internet podrán tener un límite de $500 mil.




Desde ayer el mercado puede postular para la emisión de tarjetas de prepago. Esto, luego de que la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) publicara las normas necesarias para este proceso.

Según el regulador, entre las restricciones establecidas para quienes quieran ser emisores de estas tarjetas, está el "haber incurrido en conductas graves o reiteradas, que puedan poner en riesgo la estabilidad de la entidad que se propone establecer o la seguridad de los depositantes", además de "haber tomado parte en actuaciones, negociaciones o actos jurídicos de cualquier clase, contrarios a las leyes, normas o sanas prácticas financieras".

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Por otra parte, se exige un capital pagado y reservas mínimas de UF25 mil o poco más de US$1 millón por cada giro del negocio que comprenda su objeto social. De esta manera, aquellas instituciones que emitan tarjetas de crédito y de prepago, deberán tener reservas por UF 50 mil.

Cabe destacar que la nueva ley permite que además de los bancos y las cooperativas de ahorro y crédito fiscalizadas por la SBIF, de acuerdo a la Ley de Medios de Pago también pueden ser emisores de tarjetas de prepago las empresas que se constituyan como sociedades anónimas especiales de giro exclusivo. Asimismo, permite a las Cajas de Compensación, al Metro y las cooperativas de ahorro y crédito no fiscalizadas por la SBIF, emitir estas tarjetas, en la medida que constituyan sociedades filiales bajo la normativa del Banco Central.

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En cuanto a los montos que podrán tener cada una de las tarjetas de prepago, la Superintendencia detalló que las tarjetas nominativas cuya apertura sea contratada en forma remota por medios tecnológicos serán las que podrán tener más dinero: $500 mil, seguidas por las innominadas no recargables ($100 mil) y las innominadas recargables ($20 mil). Eso sí, aquellas tarjetas nominativas cuya apertura sea contratada en forma remota por medios tecnológicos en que el emisor sea capaz, según su propia determinación, de verificar en forma fidedigna la identidad del Titular, mediante procedimientos de autentificación seguros, no tendrán un techo de dinero.

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Con todo, según el organismo presidido por Eric Parrado, los beneficios asociados al uso de estas tarjetas radican en una mayor oferta de instrumentos de pago, aumento en la cobertura de comercios asociados y la sustitución del efectivo. En la misma línea, detalla el regulador, las tarjetas de prepago podrán ser usadas en compras presenciales, a través de internet, giros en cajeros automáticos, transferencia de fondos, además del pago de sueldos y beneficios sociales.

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