Tras derrota electoral, Wall St. pierde hombre clave en el Congreso
Los líderes políticos de EEUU comenzaron a escarbar en los escombros que dejó la derrota de Eric Cantor -uno de los republicanos más poderosos en el congreso- en las primarias del partido.
La derrota de Cantor (el segundo republicano más importante en la Cámara de Representantes) el martes en la noche frente a David Brat, un profesor de economía relativamente desconocido, en una elección primaria en su distrito de Virginia, ha abierto una serie de suposiciones en Washington como pocos eventos en los últimos tiempos.
Los republicanos que parecían haber dejado atrás la amenaza del Tea Party, de cara a la elección del congreso en noviembre, ahora están cubriéndose la espalda, ante los temores de un resurgimiento de las raíces conservadoras. La derrota de Cantor solo hace que ahora le sea más difícil para la Casa Blanca, pese a todo lo que no le gustaba Cantor, cerrar acuerdos de cualquier tipo en el congreso, hasta el final del período presidencial de Obama, en más de dos años y medio.
HOMBRE FUERTE DE WALL STREET
Wall Street también perdió un aliado clave, dado que el sector de valores e inversiones era la principal industria contribuyente de la campaña de Cantor, entregándole US$1,2 millones, según el Center for Responsive Politics. Cantor reunió más dinero que Brat (US$5,7 millones frente a US$231 mil).
Entre los contactos de Cantor se pueden encontrar a las celebridades más conocidas de las finanzas. Entre sus donantes está Stephen Schwarzman, CEO de Blackstone, Paul Tudor Jones, el multimillobnario de hedge fund, hasta Hank Paulson, ex CEO de Goldman Sachs y ex secretario del Tesoro, y Ken Chenault, CEO de American Express.
Los ejecutivos financieros lo veían como una influencia moderadora de los republicanos del Tea Party, cuya retórica anti-gobierno y a veces anti-banca los asustaba en ocasiones. Por ejemplo, lo veían como una ayudar para dar fin a las peleas por el techo de deuda.
COPY RIGHT FINANCIAL TIMES
© The Financial Times Ltd, 2011.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.