Huella de carbono y Covid, cuánto dura la inmunidad y cuidados informales: tres de los proyectos financiados por el Ministerio de Ciencia para ayudar a entender y combatir el coronavirus

Con la pandemia de coronavirus aún en pleno desarrollo, la ciencia y la investigación cumplen un rol fundamental. A través de ellos, se busca una cura para el virus y se analizan sus consecuencias y resultados.

Bajo esa consigna, el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (Anid) anunciaron el financiamiento de 63 proyectos nacionales de investigación sobre el Covid-19, en un concurso en el que se presentaron un total de 1.055 postulaciones.

Las iniciativas seleccionadas del llamado Fondo para proyectos de investigación Covid-19, contarán con hasta $90 millones para la investigación y una duración de casi un año. “Cada proyecto fortalece el rol de la investigación para el desarrollo del país”, señaló el ministro de la cartera Andrés Couve.

Es importante destacar que se trata de propuestas adjudicadas, y aún deben pasar por trámites legales que implica el proceso de firma de convenio, donde se revisa que no exista ningún conflicto legal y ningún tema pendiente que pueda retrasar el proceso, para luego validar la postulación.

“La ciencia debe tener una mirada de largo plazo, pero también, jugar un rol activo en la contingencia”, explica Aisén Etcheverry, directora nacional de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo.

Tres investigadores, de algunos de los proyectos seleccionados, detallan a Qué Pasa en qué consisten sus proyectos, cómo van a trabajar y qué esperan conseguir durante la investigación.

Carolina Rojas, geógrafa de la Universidad Católica de Chile presentó el proyecto “Impactos del Covid-19 en la huella de carbono de hogares de Chile”, perteneciente al área ciencias sociales, en conjunto con el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la misma casa de estudios.

“Esta iniciativa surge a partir de un estudio que realicé sobre huella de carbono y huella de movilidad en Concepción en 2019. En ese paper nos dimos cuenta que el consumo de las personas variaba mucho en función del barrio en el que vivían, más que por la distancia que recorría. A veces se dice que las personas que viven en la periferia, tienen un impacto ambiental mayor”, señala Rojas.

“En el proyecto queremos ver el impacto de la huella de carbono, sobre todo en ciudades que sabemos que gran parte de sus emisiones se deben a calefacción. Si antes era solo desde las seis la tarde, ahora es mayor el consumo de energía y la contaminación del aire por el uso de la leña. Todo esto genera un impacto económico y en el consumo doméstico”, añade la profesional de la UC.

Rojas explica que “la evidencia que hay hasta ahora es global, se ha dicho que hay una baja en la huella de carbono en las ciudades. Vemos un efecto positivo en cuarentenas cortas, y quizás un efecto nulo en cuarentenas muy largas”.

Mercedes López, inmunóloga de la Universidad de Chile, que postuló con “Caracterización de la inmunidad protectora en pacientes con Covid-19″, correspondiente a medicina y ciencias de la salud, explica su proyecto, explicando que corresponde a un equipo, más que a una sola persona.

“Queremos estudiar la dinámica de la respuesta inmune en sujetos infectados, tanto en personas asintomáticas como en pacientes sintomáticos, que tengan distintas formas de presentación de la enfermedad. Ésta se presenta más o menos en un 40% de los sujetos de manera asintomática, el resto enferma y de ellos hay una parte que hace una enfermedad leve y pueden permanecer en el domicilio, y hay una parte que presenta una enfermedad severa y requiere oxígeno y hospitalización”, señala López, también Doctora en ciencia biomédica.

“Nosotros vamos a caracterizar a todo este tipo de pacientes. Queremos estudiar cómo funciona la inmunidad en este grupo, y pretendemos seguirlos durante bastante tiempo de manera de poder mirarlos y entregar evidencia de cómo es la inmunidad de largo plazo en ellos”, añade la inmunóloga de la U. de Chile.

“A partir de este proyecto, que tiene colaboración con regiones, queremos establecer una red de inmunólogos que nos permita responder más rápido en el futuro ante nuevas pandemias. Generar una estructura crítica en Chile”, finaliza López.

Nicolás Schongut, sicólogo de la Universidad Alberto Hurtado, trabajará junto a su equipo en la “Encuesta nacional de cuidados informales en casa”.

“Este proyecto tiene como base dos Fondecyt y un fondo interno del Fomento de la Investigación de la Universidad Alberto Hurtado, los que tenían como foco alguna dimensión del cuidado en escuelas, del cuerpo, de la gestión del peso corporal y la violencia de género, entre otros”.

Ahora, “con un equipo mucho más grande que reúne personas de ciencias políticas, sociología y sicología, vamos a evaluar cómo han cambiado todos los cuidados informales, es decir, cuidados dentro de la casa a niños y niñas, adultos mayores, persona no autovalentes y en torno a uno mismo. En comunas con cuarenta obligatoria con colegios cerrados hay muchas cosas que han cambiado”, explica Shongut, también director del Magister en psicología social de la U. Alberto Hurtado.

“Toda la red de cuidados se rompió. Queremos estudiar cómo se está recomponiendo el cuidado con las externalidades positivas y negativas a partir de la crisis sanitaria”, añade el profesional.

“Dividiremos el país en cinco macrozonas y vamos a trabajar con estadísticas representativas, y a partir de eso encuestaremos a personas en distintos formatos, por internet o por teléfono. En casos más urgentes, se puede contratar gente en cada zona. Esto los presentaremos en junio de 2021, podemos tener resultados antes, pero los resultados finales son en un año más”, señala Shongut.