Luis Smok
Este año, el cineasta hizo su debut en la pantalla grande con Swing, una comedia protagonizada por Héctor Morales, Elisa Zulueta, Tiago Correa y Daniela Ramírez, en salas de todo el país.
-Mi lugar de Santiago
El Arrayán
Me reconecta a la naturaleza y me genera nostalgia. Ahí viví gran parte de mi niñez y adolescencia. Recuerdo que mi casa quedaba al lado de la quebrada Huallalolén, al lado de un riachuelo que en invierno se convertía en río, se salía y durante tres días de cada año mi familia y yo no podíamos salir ni siquiera al colegio. Recuerdo que en las mañanas veíamos a los conejos comiendo pasto afuera de la casa. Todo era muy salvaje y entretenido.
-Mi comedia
Forrest Gump
Creo que es la base de toda comedia dramática porque tiene personajes reales, sin estereotipos, que no son ni buenos ni malos. Tanto en Forrest Gump como en mi película ocurre eso de que uno se logra reflejar en todos los personajes y que, más que antagonismos, sólo existen fuerzas antagónicas.
-Mi restaurante
Lusitano
Me encantan las pastas y la pizza, aunque no tenga ni una pizca de sangre italiana. En el Lusitano (Av. Condell 1414, Providencia) suelo comer unos ravioles de zapallo con toques de pesto, salsa nogada y mucho queso parmesano, exquisitos.
-Mi banda
-Soda Stereo
Me declaro un sodadicto. A la banda la descubrí cuando me fui a estudiar Cinematografía y Producción a la Universidad del Cine (FUC) en Argentina. Me recuerda mucho a mi vida en Buenos Aires y a cuando fui a conocer las calles escuchando todas sus canciones.
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