Lo que debes saber al elegir una estufa para el invierno

Las estufas y calefactores se tornan fundamentales para abrigar las casas en épocas de bajas temperaturas. Existen varias opciones en el mercado, por lo que es necesario informarse de sus características, previo a adquirir una de ellas.

Entre las opciones que ofrece el mercado, se encuentran las que funcionan con gas, parafina o eléctricas, con distintas capacidades, dimensiones y potencias de calor.

Conoce a continuación en qué fijarse al momento de elegir una estufa.

En el mercado, es posible encontrar la siguiente variedad de calefacciones:

• Estufas a parafina: requieren mantención y cambio de mecha para limitar la contaminación intradomiciliaria. Se puede utilizar en lugares con buena ventilación y es preferible elegir modelos con emisión de gases al exterior. Por otro lado, puede generar daños a pulmones y enfermedades respiratorias, debido a la emanación de dióxido de azufre y nitrógeno.

• Calefactores eléctricos: son móviles y no producen contaminación intradomiciliaria, sin embargo, su potencia térmica es menor.

• Estufas a gas: poseen una gran potencia térmica, pero pueden producir contaminación intradomiciliaria. Se recomienda usarlas en sitios con buena ventilación. Su contradicción es que puede generar dolor de cabeza, fatiga, vómitos, pérdida de conciencia, e incluso muerte por presencia de monóxido de carbono.

• Estufas a leña: tienen una gran capacidad calórica, requieren una inversión importante de instalación y contaminan el medio ambiente.

Para elegir la estufa adecuada conviene tener en cuenta los siguientes aspectos que detalla el Servicio Nacional del Consumidor:

Costo del combustible: cuánto dinero es necesario para hacer funcionar la calefacción.

• En el caso de las estufas a parafina: tener en cuenta costo del Kerosene.
• Eléctricas: tener en cuenta el gasto de luz.
• Estufas a gas: conocer los valores de los galones.

Capacidad calórica: cuánto calor produce la estufa y el rango de calefacción en metros cuadrados.

• Para espacios pequeños: no se recomienda estufas de gas o parafina, pues necesitan de ventilación.
• Para espacios amplios: son las estufas a gas y parafina las que generan mayor capacidad calórica.

Seguridad del artefacto: es necesario tener en cuenta lo siguiente:

• Preferir estufas con sistemas de seguridad.
• No dejar estufas encendidas a la hora de dormir.
• Al momento de comprar, preguntar si requiere de instalaciones especiales.
• Leer el manual.

Costo de una adecuada y periódica mantención: es necesario revisar los artefactos cada cierto tiempo para prevenir incidentes.

• Todas las calefacciones necesitan mantención en sus respectivas marcas.

El Sernac entrega las siguientes recomendaciones para antes de comprar una estufa:

• Cotizar y comparar las estufas.
• Al comprar a crédito, fijarse en la cuota, más los intereses asociados, ya que ese será el total a pagar.
• Guardar y revisar las boletas, junto a los estados de cuenta para corroborar los cargos.
• No olvidar el derecho a la garantía legal de tres meses, que ante fallas, y con un documento que acredite la compra, les entrega tres opciones: reparación gratuita, cambio del producto o la devolución del dinero.

Según la Achs, al momento de temperar nuestro hogar tenemos que tener presente que la temperatura ideal del ambiente está entre los 18º y los 22º C, para no sobrecalentar nuestra casa, al tiempo que disminuimos las emisiones de contaminantes en nuestros espacios.

Asimismo, es importante recordar que la calefacción en casa debe ser uniforme en todos los espacios, de manera que al pasar de una habitación a otra no se sufra de cambios bruscos de temperatura que resulten perjudiciales para nuestra salud.