Asimilados con la peligrosa banda peruana “Los Pulpos de Trujillo”, que ha sembrado temor en la zona norte de Santiago, los 13 carabineros de la Segunda Comisaría de Santiago tenían un patrón similar, pero abusando de sus cargos: según la Fiscalía, hostigaban y amenazaban a comerciantes chinos a cambio de dinero. Un ambiente de corrupción en el que también había espacio para el contrabando y las drogas.
9 jun 2024 12:00 AM