Alan Rickman: el talento inglés detrás de Severus Snape
<P>El oscuro profesor es una de las claves del éxito del desenlace de la saga de <I>Harry Potter</I>.</P>
Muchos lo imaginaban, pero nadie podía presagiar el tamaño de su éxito. Con más de US$ 168 millones de recaudación sólo en su primer fin de semana, la última película de la saga de Harry Potter, Las reliquias de la muerte, parte 2, se convirtió en la cinta más exitosa en taquilla, superando a Batman: el caballero de la noche y sus 158 millones de dólares. El último filme inspirado en la creación de J.K. Rowling confirmó su arrastre amparado en la popularidad de los libros, su nivel de producción y, en especial, el talento de sus actores, jóvenes y veteranos. Y dentro de estos últimos se destaca la figura de Alan Rickman, quien durante una década soportó una peluca azabache y bebió de los personajes más oscuros del cine y el teatro para dar vida a Severus Snape.
Durante una década, la presencia del profesor de pociones de Howgarts fue una constante y pieza clave en el desarrollo de la historia de Potter. A través de ocho películas, Snape se balanceó en la débil línea entre el bien y el mal, y cuando todo lo confirmaba como uno más de los villanos del repertorio de Rickman, unos pocos minutos y sólo una frase ("tienes los ojos de tu madre") redimieron a un personaje y dejaron patente las muchas caras de su talento. Varios medios ya han iniciado una campaña para que el actor británico, nacido hace 65 años en Londres, sea nominado a un Oscar como Actor Secundario. Entre éstos, el sitio de internet Hitflix, que lo pone en carrera junto a figuras como Jim Broadbent y Kenneth Branagh.
Pero Severus es sólo uno más dentro del amplio registro que Rickman ha entregado a través del teatro, el cine y la televisión. Desde que sus profesores escolares lo impulsaron a seguir en la actuación, que lo llevaría a la Real Academia de Arte Dramático, el también diseñador gráfico comenzó a desplegar una ductilidad incomparable para pasar por distintos escenarios y géneros. Con una carrera consolidada en el teatro y la TV británicos, Rickman dio el salto al cine e inscribió a Hans Gruber, de Duro de matar (1988), entre los mejores villanos fílmicos de todos los tiempos. A éste luego se sumarían malvados como el sheriff de Nottingham, de Robin Hood (1991), y el romántico Coronel Brandon, de Sensatez y sentimientos (1995).
En los próximos meses, su currículo sumará la obra en Broadway Seminar y dos películas con estreno en 2012: el remake de la comedia de los 60 Gambit, donde él interpretará al engañado Lord Shahbandar, y el nuevo proyecto de Kevin Smith, Hit somebody. Sin embargo, para las nuevas generaciones Rickman es y será el oscuro maestro de Harry Potter, como lo demuestra la elección del público MTV de Snape como mejor personaje de la saga. Una tarea de la que quiso despedirse con una carta abierta que publicó en abril en la revista Empire. Aquí remarcó el orgullo de ver crecer a Daniel Radcliffe, Rupert Grint y Emma Watson, y recordó el momento en que Rowling lo persuadió de interpretar un rol donde "había más para Snape que un disfraz".
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