La distancia de Camiroaga con su mentor y la oferta para leer noticias en Chilevisión

<P>Su inexperiencia con el inglés lo sacó de su primer espacio y practicó para conducir las noticias. </P>




Camisa blanca, suspensores y gomina bien reluciente. Esa era la facha que lucía Felipe Camiroaga en 1988, a los 22 años y mientras recorría los pasillos del canal 11 de la Universidad de Chile -hoy Chilevisión-, como asistente de producción en el área de prensa. "Su sola presencia ya llamaba la atención. Era alto, delgado y, con esa pinta, lo percibías desde lejos. Ya era un personaje", completa Soledad Silva, productora histórica de Extra Jóvenes, conocida como "la abuela", en torno a inicios del conductor.

Un despegue casi fulminante, pero que empezó con un reemplazo. En el mismo 1988, el animador del espacio juvenilVideotop, el locutor Justus Liebig cayó enfermo y se debió buscar un rápido relevo. El director del programa, Fernando Lira, pensó en el asistente que había conocido hace un par de meses en la misma señal y lo sacó de detrás de las cámaras para ponerlo al otro lado, en una apuesta absoluta: el ejecutivo, conocido como "Pelado" y que se convirtió en una de las primeras voces en off de la TV local (simbólico antecedente de Patricio Frez), se alzó como el mentor televisivo de Camiroaga y la persona que lo descubrió.

Pero el entusiasmo duró poco. El posterior rostro de TVN tropezó con su inexperiencia en el manejo del inglés y finalmente abandonó el programa. "Había que presentar muchos videos de música anglo, pero Felipe sólo chapoteaba en el tema, por lo que no dio muchos resultados", explica Silva. Claudio Cocio, director histórico de programas de Canal 11, se suma: "Fernando no lo quería perder. Tenía mucho carisma y era muy buen mozo, así que había que buscarle algo".

Por eso, el propio Lira le creó, a fines de 1989, un segmento al interior de Extra Jóvenes, que ya contaba con cinco años y que tenía a Katherine Salosny como único rostro. El bloque fue bautizado como El baúl de los recuerdos y -con la nostalgia como hit ya de esos años- tenía a Camiroaga abriendo una suerte de maleta, donde rescataba objetos y trivia del pasado.

La química con Salosny fue combustión pura. A los meses se convirtió en su pareja de conducción e inauguró a la dupla televisiva más recordada del programa juvenil. Empezó a tomar el protagonismo de las reuniones de pauta, abrió el espacio hacia sketches, parodias de teleseries y aportó en la formación de secciones como 24 holas (un "noticiero" conducido junto a Marcelo Comparini para enviar saludos) y "Helmins" (un pequeño muñeco amarillo con voz de pito manejado por un trabajador externo al canal y contratado sólo para esa función).

En 1991, su nombre asomaba como revelación juvenil y la estación empezó a barajar otros proyectos: le ofreció la opción de conducir noticias, posibilidad que Camiroaga pensó durante días. Christian Norero, conductor del noticiero de la señal en esos años y voz insigne de la antigua radio Concierto, detalla: "Estuvo mucho tiempo pensando si dedicarse más a lo magazinesco o si derechamente leer noticias. El partió como asistente en el área de prensa, por lo que le gustaba mucho el tema. Tenía esa inquietud. Estuvimos un día completo haciendo pruebas en el set y leyendo un teleprompter que era con cartones, muy básicos. Finalmente, todos sabemos cuál fue su opción".

En su vida personal, su opción apuntó a Salosny como pareja y a una privacidad que cercó hasta hoy. Soledad Silva apunta: "Nunca se dieron un beso en reunión de pauta o dentro del canal frente a sus colegas. Siempre marcaron la distancia".

Tras la partida de Salosny a TVN, en 1991, los directivos de Extra Jóvenes le ofertaron el puesto a Claudia Conserva durante un día jueves, para que partiera el lunes siguiente. La Miss 17 dio el sí. "Estaba muy nerviosa. No tenía ninguna experiencia en televisión y Felipe era el tipo que la llevaba en la juventud. Los primeros capítulos fueron muy complejos. Por eso, en la reunión de pauta previa al tercer episodio, él habló y dijo que tenía que ponerme las pilas y aportar más dinamismo al programa. Fue súper impactante y fue una franqueza que la agradezco hasta hoy", relata la hoy conductora de Pollo en conserva, de La Red.

Con ella a su lado, Camiroaga empezó las negociaciones con Televisión Nacional, a las que se trasladaba oculto en la parte trasera del auto de Soledad Silva, para evitar el acoso de las fans y las sospechas de la prensa. Con el tiempo, todos -partiendo por el propio rostro- se encaminaron en rutas disímiles. El caso más particular es el del director de Extra jóvenes, Fernando Lira: tras su salida de Canal 11, se hundió en una serie de problemas personales que lo alejaron de las comunicaciones y lo llevaron a vender seguros y cursos de inglés, aparte de refugiarse en su familia.

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