No habrá cambios en nuevo montaje de El Toro por las Astas

La semana pasada se desató la discusión sobre los límites de la adaptación, después de que Juan Radrigán abandonara la sala Antonio Varas durante el estreno de El toro por las astas, obra escrita por él en 1982. El dramaturgo no estuvo de acuerdo con la visión del director Alejandro Goic porque, a su parecer, contenía demasiadas "groserías".

Después de varias reuniones en las oficinas de Morandé 25, la decisión es no innovar. "Goic adoptó una posición al respecto (de la obra) y eso hay que respetarlo. Personalmente, estimo que ese punto de discrepancia debió haberse hablado antes del estreno. Entiendo que Juan asistió a los ensayos, y creo que ahí se perdió la oportunidad de ponerse de acuerdo", dice Raúl Osorio, director del Teatro Nacional. Todas las funciones serán iguales a la del estreno, hasta que la obra salga de cartelera. Según Osorio, no se harán cambios, porque no hay argumentos para hacerlos: "No son argumentos, sino detalles y gustos, opiniones divergentes que no dan para hacer modificaciones, menos suspender las funciones. Radrigán y Goic tienen que conversarlo como dos personas de teatro, no como enemigos. Pero eso es algo más personal, no tiene que ver con la vida pública del teatro".