Ñuñoa: evacúan cuatro edificios tras alerta de derrumbe en Irarrázaval
<P>La torre de Irarrázaval 2931, en la tarde de ayer fue decretada en alerta de derrumbe y obligó a cerca de mil personas a dejar los inmuebles colindantes. El procedimiento causó conmoción en la principal arteria de Ñuñoa, donde debió intervenir Carabineros. Tras sostener una reunión con ingenieros, la constructora y presidentes de las comunidades afectadas, el alcalde Pedro Sabat señaló que "si hay que demoler, se demuele".</P>
Pleno Irarrázaval, siete de la tarde. El comercio ya estaba a horas de cerrar y los transeúntes comenzaron impacientes a preguntar por qué Bomberos tenía acordonadas tres cuadras hacia el oriente y poniente desde Exequiel Fernández. La respuesta: se desalojaban más de 1.000 personas de cuatro edificios colindantes tras una alerta de derrumbe de la torre de Irarrázaval 2931.
Partió como un procedimiento ordenado: los voluntarios ingresaron al edificio en cuestión y posteriormente, se dio aviso a las comunidades de Irarrázaval 2942, y tres construcciones aledañas por la calle de atrás. Dublé Almeyda.
Como se trataba de la evacuación de más de un millar de residentes en una cuadra a la redonda, la diligencia causó conmoción en la zona, la que terminó con la intervención de sirenas, patrullas de Carabineros y personal policial acordonando la principal arteria de Ñuñoa.
Durante la tarde, el alcalde de la comuna, Pedro Sabat, se reunió con ingenieros, personeros de la constructora, la jefatura de Bomberos y los presidentes de las comunidades comprometidas. En la reunión se concluyó que el edificio de Irarrázaval 2931, se encontraba en riesgo de derrumbe y que su caída involucraría 45 metros a la redonda. Por ello es que determinó que los residentes de las construcciones colindantes debían abandonar sus hogares.
Se había inclinado. Según expertos, los pilares de la torre de Irarrázaval 2931 habían perdido su consistencia, provocando el entierro de las bases del primer subterráneo.
El comandante del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa, Gonzalo Morales, junto con confirmar el estado de la estructura, sostuvo que "por ahora se está haciendo una instalación de alza prima (soportes para nivelar el edificio) para que el edificio se mantenga más seguro.
Sin embargo, Sabat señaló que, pese a la evacuación y a los arreglos temporales para contener la torre, "la inclinación se encuentra midiendo permanentemente. La idea es disminuir los riesgos y si es necesario demoler. Si hay que demoler se demuele''. El edil añadió que el municipio prestará asesoría legal para quienes no estén de acuerdo con las nuevas propuestas tras el problema.
Por su parte, la constructora envió a los afectados momentáneamente a apart-hoteles.
23 edificios afectados
El de Irarrázaval es uno de los 23 edificios de la Región Metropolitana con menos de 10 años, que sufrieron problemas tras el terremoto del pasado sábado. Desprendimiento de muros, fisuras y filtraciones son algunos de los daños que presentaron.
En el caso de Maipú, por ejemplo, con cuatro edificios afectados, ha acaparado la atención por los graves daños estructurales. La construcción ya fue declarada inhabilitable por el municipio y se está a la espera del decreto que ordena su demolición.
Santiago, Independencia y Macul también concentran casos de este tipo, donde sus edificaciones más nuevas cedieron ante los sismos. Expertos y abogados de las municipipalidades evalúan en terreno los daños para hacer un catastro e informar las medidas que se tomarán.
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