El Presidente Gabriel Boric partió la semana increpando a la UDI por exigir el descabezamiento del equipo del Ministerio del Interior, al que acusan de un deficiente manejo de la crisis de seguridad. Pero ante la necesidad de avanzar en los proyectos de ley comprometidos, La Moneda debió abrir un canal de diálogo con la oposición.
La Secom envió una minuta a los jefes de partido del oficialismo, que pide apoyo para la agenda legislativa de seguridad que anunció el Presidente Gabriel Boric. La ministra Tohá, en tanto, se reunirá con el PS este viernes, Crispi con presidentes de partido, y Monsalve, con la oposición.
Una imagen posiciona al personaje principal, Homelander, en el país. Revisa acá el llamativo aviso de la serie, la cual se encuentra disponible en el streaming.
Será coordinada por el delegado presidencial y se reunirá tres veces por semana.
La instancia fue instruida por el Presidente Gabriel Boric, quien se encuentra en Paraguay, en el marco de su segunda visita oficial a ese país.
El encuentro reunirá a distintas autoridades en materia de seguridad y tendrá como objetivo "reforzar todo lo que ya se está llevando a cabo para enfrentar al crimen organizado".
El presidente de la colectividad reaccionó a las declaraciones del senador, quien echó en falta el liderazgo del fallecido dirigente en la tienda de Vicuña Mackenna 31.
La irrupción del ministro de la Segpres implicó un brusco cambio de mano en la conducción del proyecto, que hasta el martes en la mañana había sido tramitado por la subsecretaria Lobos. En el oficialismo admiten que en el rechazo a las multas hubo una consideración electoral por el efecto del voto de los extranjeros, pero alegan que la derecha, por lo general crítica de la migración, también tenía un interés político detrás.
En medio de las tratativas de los partidos de gobierno, las ministras Carolina Tohá (PPD) y Antonia Orellana (Mujer) han transmitido a las directivas la preocupación del Ejecutivo para que se llegue a acuerdos que promuevan las apuestas más competitivas.
Senadores oficialistas le quitaron repentinamente el piso a la fórmula que se había trabajado para destrabar la iniciativa. Esta semana el gobierno levantó una sorpresiva alerta respecto de los efectos que tendría aplicar multas a los extranjeros avecindados en Chile que no concurran a las urnas, ya que según la Constitución pueden sufragar en elecciones generales desde 1980.
La tensión entre el PC y La Moneda -a la que se han sumado los partidos del Socialismo Democrático y algunos sectores del Frente Amplio- solo ha crecido en los últimos días. Ahora, a raíz del allanamiento a la Villa Francia que el Ministerio del Interior ha defendido.
La comisión mixta de senadores y diputados aprobó por amplia mayoría una propuesta para reponer multas a quienes no voten, bajar el financiamiento fiscal a campañas electorales y establecer regulaciones de propaganda para medios regionales y redes sociales, pero inesperadamente surgió otro problema en el texto.
La titular del Interior, Carolina Tohá, elevó el tono y respondió a los cuestionamientos del presidente de los comunistas, Lautaro Carmona, quien criticó operativo policial en Villa Francia. "Han sido varias diferencias complejas el último tiempo", reconoció la jefa de gabinete respecto a la relación del Ejecutivo con esa colectividad.
El subsecretario del Interior profundiza en la salida del asesor comunista Juan Andrés Lagos y asegura que fue bastante explícito en su despido, desmintiendo lo que acusaron en el PC. Además, a pesar de las especulaciones de una posible renuncia para postular al Senado, plantea que no ha recibido ofrecimientos. Es más, reconoce entusiasmo por encabezar el futuro Ministerio de Seguridad.
En La Moneda están preocupados por los plazos para votar la idea de legislar la reforma previsional ante lo cerca que está la elección municipal. Para ello, pidieron a los ministros, directivas y alcaldes oficialistas desplegarse la próxima semana. La titular del Trabajo, quien está bajo la mira por su rol en el manejo de la tramitación del proyecto, ha tenido una semana de varios enfrentamientos con la derecha.
