Hace casi un mes un grupo de diputados de la UDI presentó un requerimiento en contra de la legisladora de Revolución Democrática, Maite Orsini, por “eventual tráfico de influencias” a raíz del llamado telefónico que realizó a la general de Carabineros Karina Soza en el marco de un procedimiento que involucró al exfutbolista Jorge Valdivia.
La diputada aseguró no haber sido notificada del fallo de la instancia. "Me parece improcedente que se filtre a la prensa antes de que yo pueda conocer su contenido”, dijo. RN, en tanto, informó a la corporación que no continuará en la instancia pues consideraron insuficiente el castigo otorgado a la militante RD.
La decisión se la comunicaron en una carta al presidente de la Cámara de Diputados, Vlado Mirosevic. Desde la bancada consideraron baja la multa de $270 mil que se le asignó a la militante RD y criticaron que los parlamentarios sean "juez y parte" a la vez en las sanciones a sus colegas.
La diputada aseguró no haber sido notificada del fallo de la instancia. "Me parece improcedente que se filtre a la prensa antes de que yo pueda conocer su contenido, contraviniendo abiertamente lo que señala el reglamento de la Cámara sobre los procedimientos de la Comisión de Ética”, dijo.
Si bien entre los integrantes de la instancia disciplinaria existía el compromiso de guardar silencio, trascendió que la mayoría estuvo por acoger el requerimiento de la UDI contra la diputada RD, a quien se le aplicó la medida de “amonestación” con un multa del 5% de su dieta, es decir, un monto del orden de 270 mil pesos.
Legislador hizo uso de una atribución reglamentaria para exponer sus descargos ante sus pares por cinco minutos.
El investigador Patricio Cooper solicitó a la Fiscalía Oriente saber si hubo comunicaciones de esa jurisdicción con la policía uniformada el día de la detención del exfutbolista en Vitacura, además, de saber si hubo o no contactos con la diputada de RD. También, el persecutor tomó declaración al subdirector de Carabineros, el general Marcelo Araya.
El mensaje que la diputada de RD envió a la máxima autoridad de Carabineros en favor del exfutbolista Jorge Valdivia vino a recordar que no era la primera vez que la parlamentaria se había visto envuelta en episodios polémicos. Estén o no estos ligados al mundo del espectáculo, las acciones de Orsini suelen incomodar a su partido. Sin embargo, nadie se atreve a cuestionarla a viva voz.
La titular de la Segegob indicó que la ministra del Interior, Carolina Tohá, efectuó el contacto con la policía uniformada para hablar sobre el recibimiento al exfutbolista en sede policial.
El exseleccionado nacional de fútbol acusa, en entrevista con TVN, que fue agredido por funcionario policial. Además, afirmó que no pidió a la parlamentaria RD intervenir en la situación y que ella "tampoco ofreció llamar a alguien para solucionar este tema".
La primera gestión de la diputada no fue ni el "telefonazo" a la general Karina Soza ni al subdirector Marcelo Araya. Al primero que contactó, según información a la que accedió La Tercera PM, fue al máximo jefe de la institución, el general director Ricardo Yáñez, a quien le relató lo ocurrido en un control preventivo al exfutbolista. El alto oficial estaba de vacaciones, así que sólo se limitó a compartirle el teléfono de quien, en ese momento, lo subrogaba al mando de Carabineros. El caso ya dejó de ser una mera anécdota en la policía uniformada y sus esquirlas hoy alcanzan a la institución y complican el escenario de la parlamentaria.
El general Marcelo Araya, quien al momento del procedimiento que involucró al exseleccionado nacional fungía como general director (S) de Carabineros, afirmó además que tuvo contacto telefónico con la diputada RD Maite Orsini para explicarle el procedimiento en el cual se había visto involucrado el exfutbolista.
Este lunes, la diputada del Frente Amplio explicó que su llamada a la generala de Carabineros, tras el control de identidad del exfutbolista Jorge Valdivia, fue para realizar un acto en beneficio de la policía y evitar así una querella contra los uniformados por presuntos apremios. Los dichos de la diputada marcan un hito respecto de opiniones del pasado acerca de la institución, a la cual, incluso, calificó como "policía incapaz", siendo también una de las parlamentarias que encabezaron la idea de "refundación".
El jefe de bancada de los diputados gremialistas, Jorge Alessandri, indicó que “lo importante es que se dilucide si en esa llamada hubo una presión directa, indirecta que facilitó o cambió un procedimiento”.
La legisladora descartó haber intervenido en favor de un tercero y aseguró que contactó a la directora de Derechos Humanos de la policía uniformada porque "la persona involucrada era de alto conocimiento público y podía generar un conflicto para la institución".
