La arriesgada apuesta de los asesores de Biden en la recta final de la campaña
El mandatario y sus principales estrategas consideran que las preocupaciones de los votantes sobre la democracia les asegurarán el triunfo en noviembre, si bien los sondeos muestran a la economía y la inflación como las prioridades de los estadounidenses. El debate presidencial del próximo jueves será clave.
Demócratas de alto rango, incluidos algunos de los asesores del Presidente Joe Biden, tienen cada vez más dudas sobre su teoría de la victoria en las elecciones de noviembre, que se basa en las preocupaciones de los votantes sobre la violencia política manifestada en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, la democracia y el carácter de Donald Trump, el rival republicano del demócrata en las urnas.
Así lo manifestaron personas familiarizadas con el asunto consultadas por el portal Axios esta semana, justo cuando una serie de lapsus protagonizados por Biden han aumentado la preocupación en las filas demócratas, al punto de que ya se especule con un eventual plan B en la carrera por la Casa Blanca.
Un estratega demócrata en contacto con la campaña le dijo a Axios: “Para muchos de los que observamos desde afuera no está claro si el presidente y su equipo central se dan cuenta de cuán grave es la situación en este momento, y si siquiera tienen un plan para solucionarla. Eso da miedo”.
“Incluso aquellos cercanos al centro dudan en plantear escepticismo o dudas sobre el camino actual, por temor a ser vistos como desleales”, comentó al mismo medio una persona en la órbita de Biden, hablando bajo condición de anonimato debido a esa dinámica. “No hay discusión sobre la necesidad de un cambio de rumbo”, agregó.
Sin embargo, apunta Axios, el círculo íntimo de Biden no ha perdido la fe en ese enfoque, producto de Biden y su antiguo asistente Mike Donilon. Si bien varias encuestas han indicado que los votantes están profundamente preocupados por la democracia, lo que más les inquieta es la inflación y la economía. También han mostrado que el apoyo al mandatario está disminuyendo entre los principales grupos de votantes demócratas: afroamericanos, latinos, adultos jóvenes y miembros de sindicatos, aunque el mensaje de la democracia está resonando entre los votantes de mayor edad.
Una encuesta de ABC News/Ipsos publicada a comienzos de mayo confirma ese análisis. Si bien un gran número de los estadounidenses (76%) dijo que la protección de la democracia es la cuestión que determinará su voto en las próximas elecciones, para la mayoría de los votantes son la economía (88%) y la inflación (85%) los temas que más les preocupan.
Pero, otro sondeo conocido esta semana trajo buenas noticias para Biden. Y nada menos uno elaborado para Fox News, la cadena de televisión conservadora que se puso al servicio de Trump y acabó enfrentada a él, luego de que su dueño, el magnate Rupert Murdoch, reconociera que varios comentaristas e invitados de la estación habían respaldado las acusaciones infundadas de Trump de fraude electoral en los comicios de 2020.
El sondeo muestra que una escasa mayoría, el 50%, de los encuestados refirió que votaría por Biden en noviembre, mientras el 48% dijo que respaldaría a Trump. Se trata de una mejora de tres puntos para el demócrata con respecto a la encuesta del propio medio del mes pasado, donde el republicano lideraba por un punto. Asimismo, la pesquisa del miércoles marca la primera vez que Biden logra el 50% de apoyo en este ciclo electoral, y que supera a Trump en un sondeo de Fox desde octubre de 2023.
Entre uno de los grupos demográficos más críticos de la carrera, los independientes favorecen a Biden por nueve puntos, un cambio respecto a mayo, cuando preferían a Trump por dos puntos.
“Las tendencias demográficas subyacentes que han definido la carrera siguen vigentes”, dijo el encuestador republicano Daron Shaw, que realiza encuestas de Fox News con el demócrata Chris Anderson. “Biden ha mejorado ligeramente entre las mujeres y las personas mayores, lo que lo mantiene a flote, a pesar de reducciones significativas desde 2020 en el apoyo de los votantes más jóvenes y afroamericanos”, explicó.
Al respecto, Axios destacó que Biden parece estar logrando importantes avances entre los votantes de mayor edad, y podría convertirse en el primer demócrata en ganar ese grupo demográfico en más de dos décadas.
“Confío en Mike”
Así las cosas, el exjefe de gabinete de Biden, Ron Klain, que conoce a Donilon desde hace décadas, dijo a Axios que su opinión es: “Confío en Mike”.
Donilon, el principal asesor político de Biden, ha asegurado en privado a su equipo que los votantes “harán lo correcto” en noviembre al abrazar la democracia y rechazar a Trump, según un asistente del mandatario que escuchó al asesor decirlo. “Joe Biden es un gran presidente, y los grandes presidentes son reelegidos”, es otro estribillo común de Donilon, asegura Axios.
A fines de enero pasado, el diario The New York Times informó que Donilon, quien redactó los discursos del presidente durante mucho tiempo, y Jennifer O’Malley Dillon, quien dirigió la campaña de Biden en 2020, dejarían sus altos cargos en la Casa Blanca a partir de febrero para dedicar su atención a tiempo completo a la campaña de reelección.
Donilon, que hasta entonces se desempeñaba como asesor principal de Biden, pasó a ser estratega jefe de campaña, mientras que O’Malley Dillon, que era la vicejefa del gabinete, se convirtió en presidenta de campaña, según informó entonces The Washington Post. Los cambios se produjeron después de que varios demócratas, incluido el expresidente Barack Obama, alentaron a Biden a reforzar su aparato de campaña y empoderar a más tomadores de decisiones de alto nivel en su sede de campaña en Wilmington, Delaware.
Biden señaló entonces que nadie ha sido su asesor de confianza por más tiempo que Donilon, quien comenzó a trabajar para él en 1981. Agregó que O’Malley Dillon había desempeñado un papel clave en todas las victorias presidenciales demócratas en las últimas dos décadas.
“Estoy agradecido a Mike y Jen por su servicio en la Casa Blanca estos últimos tres años, y estoy agradecido de que al reincorporarse a la campaña estén dando un paso adelante una vez más para garantizar que terminemos el trabajo para el pueblo estadounidense”, afirmó el mandatario.
En esa oportunidad, el equipo de campaña de Biden dijo que esperaba que Donilon “desempeñe un papel central en los mensajes de campaña y la estrategia de medios pagados”, mientras que O’Malley Dillon se concentrará en “organizar y ejecutar el camino de la campaña hacia 270 votos electorales, todo bajo el liderazgo de la directora de campaña Julie Chávez Rodríguez”.
Según Ben LaBolt, un colega durante la campaña de Obama, “Jen es una estratega brillante que conoce los estados ‘batalla’ como la palma de sus manos, y que conoce los mecanismos e infraestructura del Partido Demócrata, por un lado, y el tipo de infraestructura de datos que se necesita construir para llegar a votantes persuadibles”. En entrevista con Vanity Fair, LaBolt aseguró: “Es una maestra tanto en los detalles prácticos de las campañas tradicionales como en las formas modernas y digitales de hacer campaña”.
Corroborando esos comentarios, demócratas cercanos a la campaña dijeron a Axios que la moral y la gestión han mejorado en gran medida desde que Jen O’Malley Dillon dejó la Casa Blanca y se unió a la campaña a principios de este año.
En tanto, en relación a Donilon, los asesores de Biden comentaron a Axios: “Esta es la estrategia de Joe Biden, y Mike Donilon y sus principales asesores están de acuerdo con el presidente. Las encuestas muestran que la democracia terminó siendo un tema de principal preocupación para los votantes en 2022, y lo será en 2024″. Donilon cree que “la atención se centrará abrumadoramente en la democracia” y que “las imágenes más importantes en la mente de la gente serán las del 6 de enero”.
Debate clave
Con Biden, de 81 años, y el expresidente Trump, de 78, virtualmente empatados en las encuestas de opinión nacionales, y con una porción considerable del electorado aún indecisa cinco meses antes de la votación del 5 de noviembre, el debate televisivo que los enfrentará este 27 de junio no solo será histórico, sino que tiene el potencial de remodelar la carrera presidencial.
“El debate de CNN estará lleno de novedades (...). Nunca antes en la era moderna dos presuntos nominados se habían reunido en el escenario del debate tan temprano en la temporada de elecciones generales. Nunca antes dos candidatos a la Casa Blanca se habían enfrentado a edades tan avanzadas, con dudas generalizadas sobre su preparación”, destacó The Associated Press.
“Y nunca antes un participante en un debate electoral general había sido condenado por un delito grave. El debate se produce apenas dos semanas antes de que Trump sea sentenciado por 34 cargos de delitos graves en su juicio por dinero en secreto en Nueva York”, agregó la agencia de noticias. En efecto, la audiencia para conocer la sentencia por el caso Stormy Daniels fue programada para el 11 de julio, cuatro días antes de que comience la convención del Partido Republicano, donde Trump sería nominado como el candidato de la colectividad para las elecciones de noviembre. La convención del Partido Demócrata, en tanto, está convocada para el 19 de agosto.
“Se puede argumentar que este será el debate más importante, al menos en mi vida”, dijo el estratega demócrata Jim Messina, de 54 años, quien dirigió la campaña del expresidente Barack Obama en 2012. El próximo debate no será hasta septiembre. Así, cualquier tropiezo el 27 de junio será difícil de borrar o reemplazar rápidamente.
Según el gurú de la campaña de Obama, David Axelrod, el equipo de Biden programó uno de los primeros debates presidenciales de la historia para demostrar a los detractores que “Joe no irá a ninguna parte”. “Pero la táctica conlleva un riesgo tremendo”, sostiene el Daily Mail. “Si bien una actuación eficiente en el debate por parte de Biden podría ayudar a reunir a los demócratas detrás de él, un paso en falso significativo sólo avivaría más conversaciones sobre reemplazo”, agrega el medio británico.
De hecho, el exasesor de Hillary Clinton en la campaña presidencial de 2008 y experto en encuestas Mark Penn sugirió que el debate de CNN será la última oportunidad de Biden para asegurar a los votantes que está capacitado para el puesto. “Han lanzado deliberadamente el guante para un debate temprano”, dijo Penn, “y creo que ese será el punto en el que los estadounidenses juzgarán: si está listo para otro mandato o no”.
En este escenario, el Daily Mail deslizó que si Biden tropieza en ese primer enfrentamiento con Trump (...) “será necesario un frente unido de los grandes liberales para hacer que Joe tire la toalla”. “Las únicas personas que podrían forzarlo a salir serían Barack Obama, Bill Clinton, Nancy Pelosi y Chuck Schumer”, dijo un estratega demócrata al Daily Mail. “Tendrían que ser ellos cuatro colectivamente”, añadió.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.