Pasadas las diez de la noche en el hotel Marina del Rey (Viña del Mar) en medio de una comisión política de RN, el senador y presidente de ese partido, Francisco Chahuán, sorprendió con una noticia: anunció que no irá a la reelección como timonel de la tienda en las elecciones internas del 19 de agosto.

La habitación -repleta de parlamentarios y dirigentes políticos- se quedó en completo silencio. Luego Chahuán agregó: “Pero todo puede cambiar”, lo que provocó que la sala estallara en risas.

Minutos antes, el presidente de RN había tenido que sufrir las críticas del jefe de bancada de los diputados, Frank Sauerbaum, por la dura derrota de RN en las elecciones del Consejo Constitucional frente al Partido Republicano. El diputado recriminaba que en la tienda no había conducción política y que la directiva a cargo de Chahuán -y del secretario general, Diego Schalper- no podía buscar la reelección en esas condiciones.

Así fue parte de la catarsis que se dio anoche en Chile Vamos cuando tanto RN como la UDI -liderada por el senador Javier Macaya y la secretaria general María José Hoffmann- dieron largas explicaciones ante sus comisiones políticas sobre los malos resultados.

Chile Vamos fue ampliamente derrotado por el Partido Republicano en los comicios del pasado domingo. La coalición de la UDI, RN y Evópoli logró solo 11 escaños, mientras que la tienda de José Antonio Kast obtuvo un total de 23.

Ningún partido quedó conforme pues la UDI obtuvo 6, RN 4 y Evópoli 1 consejero, lo que representa una baja respecto de la cantidad actual de senadores que cada partido posee, donde dichas colectividades tienen 9, 11 y 3, respectivamente.

“El primero en hacer una autocrítica soy yo”, partió diciendo en su intervención ayer Chahuán. En RN el diagnóstico fue demoledor. La tienda fue superada por la UDI en cantidad de escaños, lo que representó un duro golpe ya que los dos partidos históricamente han competido por el electorado de derecha. Antes de los comicios, esperaban sacar entre 8 y 10 consejeros, y varios dirigentes resienten que el análisis que imperaba antes de las elecciones era que la arremetida de los republicanos afectaría más a la UDI.

Por ello es que en sus explicaciones Chahuán -quien según algunos se dedicó más a escuchar que a hablar- comentó que había sido un proceso “agotador”, que el golpe había afectado a Chile Vamos en su conjunto y que había habido algunos errores en la estrategia de campaña.

Sin embargo el senador recibió duras críticas a su gestión como presidente y lo que algunos calificaron como errores, o “chahuanadas”, como se dice en la jerga de RN.

Así por ejemplo se le criticó haber llevado una guitarra a La Moneda, haber dicho que Chile Vamos se abría a que un órgano estatal que administrara los fondos de pensiones, y haber afirmado que las elecciones de consejeros eran un “plebiscito” al gobierno de Boric.

Una de las intervenciones más duras fue la de la diputada Camila Flores -quien habló de cómo RN debía endurecerse- y del exdiputado Alberto Cardemil, quien dijo que tras un resultado como ese lo normal era que las personas a cargo dejaran sus puestos. También tuvieron fuertes críticas los comisionados políticos Víctor Blanco y Marcelo Brunet.

Schalper, por su parte, no habló durante la comisión política y se esperaba que expusiera diapositivas y un análisis más detallado esta jornada durante el almuerzo de bancada de los diputados RN en el Congreso Nacional.

“La mayoría reconoce que fue un fracaso. Si las elecciones son en agosto, Francisco Chahuán ha señalado que estará en el cargo en el mes de agosto, que en lo personal él sí se siente muy agotado, y es lógico, ha sido un proceso muy desgastador para él. Reitero, en lo personal, en lo familiar. Que está pensando muy seriamente no continuar como presidente del partido, y que por el momento no iría a la reelección. Pero bueno, es una decisión que está meditando”, dijo el diputado Andrés Celis, quien fue uno de los asistentes a la cita.

En la UDI, la comisión política telemática duró hasta cerca de las diez de la noche. Una de las reflexiones que marcó la intervención de Macaya fue que si el proceso termina bien, se redacta una nueva Constitución y se cierra ese asunto pendiente, la historia valorará la labor de la UDI.

Esto en referencia a que ese partido se la jugó por darle continuidad al proceso constituyente, después del rechazo en el plebiscito de salida. En la comisión política Macaya hizo una autocrítica, argumentando que había zonas en las que no supieron ver el poderío que tenía republicanos.

Y es que en la instancia reconocieron que si bien se esperaba un resultado bueno de los republicanos, un error fue no haber pronosticado el gran porcentaje de votación que tuvieron. También se comentó que en esta elección se pagaron los costos por haber seguido promoviendo una nueva Constitución, a diferencia de los republicanos que se restaron del “Acuerdo por Chile” del 12 de diciembre.

En esa línea, Macaya retrucó que el plazo que tienen que mirar es el próximo 17 de diciembre, cuando en un nuevo referéndum se medirá si Chile acepta o no la nueva propuesta de borrador. Es ahí donde si el proceso tiene éxito, la UDI será valorada y podría obtener beneficios de ello.

Además, en la UDI hicieron el análisis de que si el proceso fracasa, se endosará la responsabilidad a los republicanos, ya que ellos tienen el “sartén por el mango”, en el sentido de que al ser la mayoría con 23 de escaños son los principales responsables en la búsqueda de acuerdos.

En la comisión política también hubo críticas a la derrota electoral, pero no se pidieron cabezas. Al revés, se respaldó la gestión de Macaya y Hoffmann y analizaron como positivo haber sido el segundo partido mejor votado, y que RN haya resultado más afectado, a diferencia de lo que se pensaba.

Otro tema que se debatió fue si acercarse o no al Partido Republicano. El senador Iván Moreira sostuvo que hay que seguir diferenciándose de ellos como Chile Vamos, y que cualquier aproximación requiere que sea el propio Kast quien se acerque a la coalición y no al revés.

En esa instancia además participó el exconvencional Rodrigo Álvarez -cercano a Kast- quien profundizó en su idea de generar acercamientos con republicanos, o una posible coalición con ellos.

De todas maneras, en la directiva sostenían que cualquier tipo de acercamiento -por ejemplo de cara a las municipales del 2024- debía verse después de diciembre, con los resultados del plebiscito de salida en mano.