Cómo la polémica de Escalona con Cataldo volvió a agitar al PS y PC

En el Partido Comunista no compartieron los dichos que entregó la alcaldesa socialista de Quinta Normal, Karina Delfino, en entrevista con La Tercera, en la que abordó la contingencia en materia educacional. “El fin de la selección jugó una mala pasada a los liceos emblemáticos. Duele verlos sin poder brillar”, planteó el domingo la jefa comunal y otrora líder de la “Revolución Pingüina”.

Eso provocó una rápida reacción de los comunistas. “Espero que ella tenga una argumentación para indicar lo que está sosteniendo. Yo me doy a la idea de buscar la mejor argumentación para buscar la razón que tiene la reforma al sistema educacional, de terminar con una implementación que, tengo seguridad absoluta, no era el espacio más eficiente en la formación y la calidad de la educación para los estudiantes”, planteó el lunes a La Tercera el presidente del PC, Lautaro Carmona.

“Vamos a tener pronunciamiento de eso, recogiendo la argumentación que hace la alcaldesa pero también lo que nos pueda entregar el gobierno”, agregó Carmona tras el comité político de La Moneda.

Pero las declaraciones de la jefa comunal no quedaron ahí, sino que provocaron un coletazo adicional. El lunes en la tarde el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, planteó en un encuentro con los representantes de los partidos que el oficialismo debía tener un relato ordenado, momento en el que puso varios ejemplos en los que el sector no ha actuado en dichos términos.

Una de las alusiones del secretario de Estado fue la entrevista de Karina Delfino, momento en el que Camilo Escalona, secretario general del Partido Socialista, se molestó, defendió a la alcaldesa -de quien es cercano en su tendencia interna, la Nueva Izquierda- y se marchó anticipadamente de la reunión.

El intercambio entre ambos volvió a reactivar una pugna que arrastran hace tiempo el PS y el PC, y que, en los últimos días, se ha ido agudizando por varias razones: las elecciones de octubre de este año, el mea culpa del Presidente Gabriel Boric sobre Sebastián Piñera y también, creen algunos en el sector, diferencias programáticas más de fondo.

Si bien lo sucedido en la cita del lunes no ha sido debatido entre timoneles de partido o en la mesa directiva del PS, lo cierto es que sí se ha podido conversar al respecto en otros grupos socialistas, en donde incluso la propia Delfino pudo ahondar en sus dichos.

Allí, la alcaldesa de Quinta Normal especificó que ella se refiere a algo que es un “hecho” sobre el impacto de la selección educacional en los liceos emblemáticos, y apuntó también al fortalecimiento de la educación pública.

Sus dichos fueron ampliamente respaldados por los socialistas, quienes al mismo tiempo evadieron apoyar la forma en la que actuó Camilo Escalona en una reunión de coordinación oficial con el Mineduc. De hecho, en la mesa también concordaron que el histórico dirigente “sobrerreaccionó” en la cita con Cataldo.

Respecto del tema, el presidente de las Juventudes Socialistas, Allan Álvarez, dijo a La Tercera que “reponer la selección en los emblemáticos no resuelve el problema estructural de la educación pública; sin embargo, tampoco empeora la situación y permitiría mostrar resultados en el corto plazo”.

Además, sobre la polémica entre Escalona y Cataldo, agregó que “con o sin entrevista de la alcaldesa Delfino, el problema del SLEP de Atacama sigue ahí”.

Daniela Serrano, presidenta de las Juventudes Comunistas (JJ.CC.), indicó que “antes de hablar solo del producto, o cuáles son los índices actuales en los que se encuentran los colegios emblemáticos, veamos también cómo fue el proceso. Yo soy defensora del fin de la selección, pero creo que también tendría que haber estado acompañado de un proceso de fortalecer a las comunidades educativas”.

Y añadió: “Toda política pública se puede perfeccionar, pero de ahí a desechar la idea de que la selección no era un incentivo perverso o que no producía una desigualdad en nuestro país es retroceder dentro de todos los debates democráticos que hemos dado en educación pública”.

Una opinión fuera del PS-PC la entregó la diputada de Convergencia Social -partido del Presidente Gabriel Boric- Emilia Schneider, quien comentó que “con el fin de la selección, la discriminación y segregación escolar han disminuido, y eso es algo muy importante. Reponer la selección no resuelve nada”.

Y agregó: “El problema es que hace décadas tenemos un sistema que abandonó la educación pública, con una crisis municipal que no da para más, y lo que tenemos que hacer es fortalecerla, en todos sus establecimientos, no solo en los emblemáticos (...). Creer que la calidad del sistema se mide por cuánto filtran sus establecimientos en el acceso es un error y eso perpetúa la desigualdad”.

La distancia que se marcó entre el PS y el PC tras los dichos de Karina Delfino es solo una de las diferencias que se han plasmado entre ambas colectividades durante este año. En 2024 el gobierno del Presidente Gabriel Boric apostará por relucir las concreciones que se han conseguido, pero también por sacar adelante dos de los proyectos estructurales de la administración: pensiones y pacto fiscal.

Pero el Ejecutivo hoy no cuenta con mayorías parlamentarias en el Congreso, razón por la cual tendrá que ceder en aspectos claves de sus iniciativas. En eso, advierten desde el oficialismo, se vaticinan discrepancias internas entre el PS, el PC y el Frente Amplio respecto de cuáles serán las líneas rojas.

Sin ir más lejos, en la agenda educacional del gobierno ya se proyecta una discusión entre Socialismo Democrático y lo que antes era llamado Apruebo Dignidad. En particular, respecto de la condonación del CAE, materia que los socialistas, respaldando al ministro de Hacienda, Mario Marcel, han descartado como parte de las prioridades de esta administración.

Esto a contrapelo de lo que manifiestan en el PC y el FA, en donde se toman de que dicha medida es un compromiso adquirido por el hoy Mandatario Boric durante su campaña presidencial.

La agenda de seguridad que conduce la ministra del Interior, Carolina Tohá, es otra de las áreas programáticas en la que ya se han vislumbrado diferencias entre el PC y el PS. De hecho, uno de los casos más emblemáticos en donde ambas colectividades se han dividido en sus votaciones en el Congreso fue durante la discusión del proyecto catalogado como “Nain-Retamal”, cuya idea central era el legítimo uso de la fuerza privilegiada por parte de las policías.

Más allá de lo programático, hoy las diferencias más contingentes entre las dos tiendas oficialistas están en lo electoral. Todo comenzó cuando un grupo de históricos dirigentes socialistas salieron a visibilizar su respaldo a la pretensión de Ismael Calderón de competir en una primaria contra la edil de Santiago, Irací Hassler (PC).

En estos términos, en el PS también contemplan como candidato en Pudahuel al exedil de dicha comuna Johnny Carrasco, quien buscará competir contra el alcalde Ítalo Bravo, a quien la comisión política de los comunistas respaldó de forma pública.

Pero el hambre electoral del PS también preocupa en su militancia, ya que el PC -que este año apuesta por la conquista de más de 80 municipios- tendría la capacidad territorial para también levantar competencia en comunas en las que hay alcaldes socialistas.

Por ejemplo, en San Bernardo, en donde el jefe comunal es Christopher White (PS), no ven con malos ojos competir, mientras que en Copiapó -comuna de la diputada Daniella Cicardini y en donde el alcalde es Marcos López (PS)- algunos apuntan como posible carta para las municipales a la concejala Rosa Ahumada.

Por otro lado, otras zonas en donde ambas colectividades se verán las caras son La Florida (Nicolás Hurtado, del PC, y Agustín Espinoza, del PS) y Conchalí (Grace Arcos, del PC, y Allan Álvarez, del PS).