Con Boric, Tohá, Marcel y Cordero: la reservada cita de desagravio a Patricio Fernández
El Mandatario y tres ministros ligados al Socialismo Democrático llegaron hasta la casa del escritor el mismo día de su renuncia, con el objetivo de valorar su paso -de siete meses- como asesor presidencial a cargo de la conmemoración de los 50 años desde el Golpe de Estado.
Esta última semana quedará marcada en la carrera del escritor Patricio Fernández. Luego de recibir múltiples críticas por parte del Partido Comunista (PC), tres diputados socialistas y 160 asociaciones ligadas a los derechos humanos, este miércoles el exconvencional tomó la decisión de dar un paso al costado como asesor presidencial a cargo de la conmemoración de los 50 años desde el Golpe de Estado. En consideración de la tormenta por la que atravesaba, el mismo día de su renuncia recibió un consuelo que logró apaciguar un poco el agrio momento.
La noche del miércoles, fueron varios los personeros de gobierno los que llegaron hasta su domicilio, en Providencia, como una forma de valorar su trabajo efectuado durante los siete meses que desempeñó su cargo. Entre ellos, estuvo el Presidente Gabriel Boric -personalmente cercano a él-, quien, según algunos de los que estuvieron presentes, se hizo un tiempo para hablar con Fernández “con mucho afecto” y posteriormente se retiró.
Además del Mandatario, hasta la casa del escritor llegaron los ministros Carolina Tohá (Interior), Luis Cordero (Justicia) y Mario Marcel (Hacienda). A ellos se sumaron, además, la pareja de Fernández, la periodista Carola Delpiano, y algunos de sus amigos personales, como el periodista Felipe Bianchi, el exministro Ricardo Solari y la gestora cultural Morgana Rodríguez.
Entre quienes estuvieron al tanto de la cita, aseguraron que fue algo espontáneo, que se hizo en consideración a lo duro que fue para el exconvencional el tener que dar un paso al costado en medio de críticas provenientes desde familiares de víctimas de la dictadura. Las mismas fuentes señalaron que lo vieron “golpeado”, pero tranquilo pese a todo, consciente de que no había otra alternativa para permitir el desarrollo de las actividades ligadas a los 50 años.
Cabe recordar que el propio Fernández transparentó a Boric en su carta de renuncia que “mi persona se ha vuelto un escollo para el buen desarrollo de esta conmemoración. El reto es tan grande e importante, que quisiera pedirle entender mi decisión indeclinable de hacerme a un lado”.
En el escrito, el exconvencional hizo referencia a las duras críticas que recibió desde la semana pasada por parte del PC y las asociaciones ligadas a los derechos humanos. Estas últimas incluso se organizaron para ir a La Moneda el pasado lunes y exigir la renuncia del escritor, la que se concretó dos días después.
A través de una carta que se le entregó a Carlos Durán, jefe de gabinete del Presidente Boric, las asociaciones -respaldadas por el PC- acusaron que Fernández “de manera muy liviana ha eludido condenar el Golpe de Estado sedicioso realizado por los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y el Director General de Carabineros y que puso fin a la institucionalidad democrática del país″.
En concreto, las agrupaciones aludieron a los dichos emitidos por Fernández en una entrevista que se le hizo el 22 de junio en un programa conducido por el premio nacional de Humanidades y Ciencias Sociales Manuel Antonio Garretón y emitido por Radio Universidad de Chile. En esa instancia, Garretón consultó si “es posible encontrar mínimos comunes (en el marco de la conmemoración) cuando tienes un porcentaje no menor de la población que te dice: ‘Eso (el Golpe) fue necesario (...)’”.
Ante eso, Fernández respondió: “O sea, ¿cuál creo que es el empeño central al que estamos retados a estas alturas? Tú, la historia podrá seguir discutiendo por qué sucedió o cuáles fueron las razones o motivaciones para el Golpe de Estado. Eso lo vemos y lo vamos a seguir viendo. Lo que uno podría empujar, con todo el ímpetu y con toda la voluntad, es decir: ‘Okey, tú, los historiadores y los politólogos podrán discutir por qué y cómo se llegó a eso, pero lo que podríamos intentar acordar es qué sucesos posteriores a ese Golpe son inaceptables en cualquier pacto civilizatorio’”.
Previo a la muestra de apoyo de Boric y los ministros, en todo caso, el periodista ya había recibido un ‘abrazo’ por parte del Socialismo Democrático, coalición que agrupa al Partido Socialista, al PPD, a los radicales y a los liberales. La arremetida en su contra fue tema para ellos e incluso -antes de la renuncia- habían pensando en pronunciarse al respecto. “Me parece que lo expresado por Patricio Fernández no es constitutivo de ninguna afrenta al respeto, promoción y defensa de los derechos humanos. Sus comentarios pueden dar origen a una discusión política, pero no son negacionistas. Como PS, en ningún caso apoyaríamos aquello. Por el contrario, convertirnos en censores y atentar contra la libertad de expresión no es parte de nuestro accionar político”, dijo a La Tercera la senadora Paulina Vodanovic (PS).
En esa misma línea, desde el Partido Liberal -colectividad por la que postuló a la Convención Constitucional- adelantaron que también buscarán reunirse con él en los próximos días.
Por lo demás, el Presidente Boric no solo tuvo un gesto para Fernández. El jueves por la mañana, recibió a las agrupaciones ligadas a los derechos humanos que forzaron la salida del exconvencional. “No estamos pidiendo que el gobierno conmemore los 50 años con la visión de las agrupaciones (de derechos humanos). Lo que estamos pidiendo, con las propuestas de las agrupaciones en términos de verdad, justicia, es decir que en estos 50 años aún hay un millar de familiares que esperan encontrar los restos de sus detenidos desaparecidos y ejecutados políticos sepultados”, dijo Alicia Lira, presidenta de la AFEP, tras el encuentro con el Mandatario.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.