¿Condonar totalmente a algunos? La decisión que aún debe tomar el gobierno para su proyecto que deja atrás el CAE

Todo indica que así quedará establecido en el proyecto de ley para modernizar el sistema de financiamiento de la educación superior que el próximo mes presentará el gobierno. O, al menos, esa es la intención del Ejecutivo: a un grupo -acotado, muy distinto a la promesa de campaña inicial- se le condonará totalmente su deuda por concepto de Crédito con Aval del Estado (CAE).

Ocurre que los ministerios de Educación y Hacienda junto a Presidencia trabajan contra reloj para afinar el texto que ingresarán al Congreso antes de que acabe septiembre. Hasta aquí ya hay algunos puntos zanjados, como que no sólo se presentará un proyecto que modernice el financiamiento del sector, sino que aparejado a él vendrá la propuesta de condonación -’solución’ es el concepto por el que ahora ha optado el gobierno- para los deudores del CAE. Asimismo, que la proposición tendrá características similares al mecanismo actual de la gratuidad; que se aparta a los bancos totalmente de la operación; que el nuevo sistema tendrá un componente de solidaridad; o que una vez puesto en marcha, acorde a las proyecciones gubernamentales, se autofinanciará.

El gobierno, además, definió que el proyecto se ingresará después de la semana de celebración de Fiestas Patrias, es decir, a partir del lunes 23 de septiembre. “Esto va a ocurrir post 18 de septiembre, post esa semana de receso legislativo, antes de fin de mes. No podría decir exactamente el día porque va a depender mucho de las interacciones que tengamos con el Ministerio de Hacienda”, dijo la noche de este jueves el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, en CNN.

Justamente, dentro de esos intercambios que se aceleran a toda máquina entre Hacienda y Educación aún queda terminar de definir si es que algunas personas verán condonado el 100% de su deuda. “No está descartado y es muy probable que aquellos que están más apretados, que están en peores condiciones, sí tengan una medida significativa en términos de resolución de sus deudas, de condonación”, aseveró el secretario de Estado en la misma entrevista, donde le insistieron en que si esto implica un perdonazo total para un grupo acotado. “Esperamos que sí, todo eso depende de cómo estemos en la perspectiva del aporte fiscal que va a implicar esto en una primera etapa, no en régimen”.

La idea es analizar caso a caso la condición de cada deudor para entregarle a cada uno de ellos una respuesta, pero finalmente todos -unos más que otros- van a ser beneficiados de alguna forma, en función de su realidad.

Pero eso no es lo único que está sobre la mesa del Ejecutivo. Hoy por hoy, además, se ajustan los incentivos que se incluirán en el proyecto de ley para que los deudores a los que no se les condonará totalmente se puedan poner al día. “Ese es un elemento dentro del diseño. Tienen que haber incentivos para cierta regularización”, señaló al respecto Cataldo.

La lógica con que el gobierno ha operado aquí, acorde a conocedores de las conversaciones, es que la evidencia dice que ante facilidades para pagar, al menos un porcentaje de personas efectivamente tienden a regularizar su situación. Y que esos son dineros que podrían entrar a las arcas fiscales que, sin un proyecto así, serían más difíciles de conseguir. “Es mejor lograr cobrarles un poco a esos deudores, a nada”, comenta una fuente.

Por eso, dicen en la interna de La Moneda, las variadas ideas han apuntado desde que las personas puedan pagar grandes ‘cuotones’ a cambio de una reducción de deuda total, descuentos por ponerse al día con las cuotas atrasadas, o algún tipo de beneficio tributario.

Lo que el gobierno ya zanjó y que se anuncia como uno de los nudos dentro de la conversación legislativa, es que al menos en su proyecto no se incluirá un gesto hacia quienes ya saldaron totalmente su deuda. “No es parte de lo que hoy tenemos considerado en el diseño inicial”, aseveró el ministro Cataldo, estableciendo distancia de algo que desde hace rato vienen pidiendo los partidos políticos, incluso desde el propio oficialismo.

“La bancada socialista espera que la propuesta que presente el gobierno en relación a la deuda educativa incluya algún tipo de beneficio tributario o compensación hacia aquellos estudiantes que han cumplido y pagado la deuda del CAE. Confiamos en una propuesta integral, tanto para deudores como para quienes se han esforzado y están al día en sus cuotas”, planteó hace algunas semanas en La Tercera el diputado Daniel Melo, cuestión que también se ha conversado en las tiendas opositoras. “Me gustaría saber qué pasará con aquellas familias que han pagado su deuda del CAE, es decir, están al día o terminaron de pagarlo”, aseguraba, por ejemplo, el senador Gustavo Sanhueza (UDI) la semana pasada.

Y, justamente, en pos de intentar empezar a conversar algunos de estos puntos que han planteado las colectividades en el trabajo prelegislativo, el Mineduc, que ya se ha reunido con siete partidos, tiene programados para la semana que viene dos encuentros pendientes: Republicanos y la Unión Demócrata Independiente (UDI), con quienes esperan reunirse entre lunes y martes.