Creedence y su acontecida despedida en Chile: "Es hora de poner este proyecto a dormir y seguir con otras cosas"

El sitio web oficial de Creedence Clearwater Revisited exhibe, como ya es habitual hace un cuarto de siglo, un extenso listado con todas las próximas fechas del grupo, un proyecto que nació en 1995 precisamente para tocar en vivo y llevar el legado de la leyenda del rock sureño a un público de todos los rincones del mundo.

Pero ahora la página ofrece un par de singularidades: en medio de una amplia lista de ciudades, teatros y arenas del planeta, los tres conciertos programados para octubre pasado en Santiago y Viña del Mar aparecen acompañados de un mensaje aclaratorio de la banda, excusándose por la suspensión de los recitales -a causa de "una inesperada agitación social", se lee-, los que finalmente se harán en marzo en la capital (Movistar Arena), el Gran Arena Monticello y el Gimansio UFRO de Temuco.

Tres presentaciones que cierran la lista para Creedence Clearwater Revisited y que, al menos por ahora, aparecen como los últimos conciertos de la historia del conjunto antes de un retiro de los escenarios que sus integrantes, aseguran, es definitivo e irrevocable.

"Es una sensación agridulce, porque es algo feliz y triste al mismo tiempo. Vamos a echar de menos tocar pero no vamos a echar de menos viajar", comenta a La Tercera PM el bajista Stu Cook, parte del cuarteto original que dio forma a Creedence Clearwater Revival entre 1967 y 1972, e impulsor -junto al baterista Doug "Cosmo" Clifford- de este segundo capítulo del grupo con el apellido Revisited, que se despide el próximo mes frente a uno de sus públicos más fieles.

"El concierto que más recuerdo es el Viña del Mar", dice el músico sobre su paso por el Festival en 1999. "Fue hace muchos años y recibimos la 'gaviota plata'. Recuerdo ese show muy bien y tengo el video, de hecho. Pero también recuerdo haber tocado en muchos otro lugares, como este casino fuera de la ciudad, en 'San Francisco Moscatal' (sic), agrega, con improvisado español y buena memoria.

¿Ha sido extraño salir a tocar sabiendo que es el último concierto en cada ciudad que visitan?

No, cada noche salimos a hacer nuestro trabajo lo mejor posible así que no hemos pensando en nuestro último concierto. Siempre tenemos que preocuparnos de la noche que sigue y cada día es un nuevo día.

¿Es definitivamente la última gira? ¿No se van a arrepentir?

Sí, totalmente, por eso le pusimos The Final Revival Tour. Es triste que tengamos que decir adiós, pero han sido unos 25 años increíbles así que cada show tiene que ser saboreado, disfrutado y un aprendizaje. Y ahora tenemos que aprender a retirarnos. Tocamos en enero en Nueva Zelanda, después viene México y listo, se acabó. Hasta donde sé ya no hay más giras para nosotros, más allá de alguna fecha que pueda aparecer por ahí algún día. Pero no hay planes de volver a las giras.

¿Cuándo tomaron la decisión?

La tomamos en diciembre pasado (de 2018). Sabíamos en 2018 que 2019 sería nuestro último año. Pero no hay una razón concreta. Hemos estado haciendo esto por 25 años, y nunca esperamos que duraría tanto tiempo, no teníamos idea de cuán popular se volvería esto finalmente, así que nunca tuvimos un plan. Pero después de 25 años ya conocemos cómo es el sabor de esto y ahora la idea es buscar otros sabores. Este ha sido un proyecto increíble y ahora es momento de ponerlo a dormir y seguir con otras cosas en la vida.

Nos volvimos populares y no había forma de parar. Esto tomó vida propia. Así que simplemente seguimos con la corriente, lo pasamos bien, los fans también, viajamos cada vez a más países y siempre hubo una gran recepción. Y es muy difícil detenerse cuando las cosas están saliendo bien. Con Doug ambos tenemos 74 años y tenemos otras cosas que queremos hacer en nuestras vidas, además de estar constantemente de gira. Es hora de cerrar la puerta y abrir otras.

Doug Clifford, con quien en abril cumplirán 75 años con sólo un día de diferencia, ha sido el fiel socio de Cook en las dos encarnaciones de Creedence: en la original, con la que se volvieron un fenómeno mundial, llegaron a Woodstock y musicalizaron la Guerra de Vietnam. Y también con Revisited, conjunto que formaron en 1995 sin la aprobación de John Fogerty, el cerebro y la (inconfundible) voz del cuarteto, que sigue tocando en vivo aunque de manera más esporádica.

Cuando la conversación se desvía hacia el pasado y se centra en Fogerty -su hermano, el guitarrista Tom Fogerty, murió en 1990-, el tono de voz de Cook se vuelve más serio y sus respuestas más breves.

El año pasado por fin pudimos escuchar por primera vez el audio completo de la presentación de Creedence en Woodstock. ¿Por qué tuvieron que pasar 50 años para esto?

Hubo muchas conversaciones detrás de escena. Yo no tuve mucho que ver ahí, fue la compañía discográfica la que se encargó de que esto saliera. Salió 50 años tarde, pero salió.

Esto se entendió también como un acercamiento entre ustedes y John Fogerty. ¿Fue así?

No fue tan así. No estamos involucrados, John Fogerty no podía bloquearlo tampoco. Esto fue entre Warner Brothers y Fanstasy Records, ellos negociaron los derechos y John Fogerty no podía bloquearlo.

¿No han vuelto a hablar con él?

No. Sólo porque haya salido el disco de Woodstock y nosotros nos retiremos no significa que estemos acercándonos a John Fogerty.

¿Van a lanzar más material de la bóveda de Creedence?

Sí, hay otro lanzamiento, del Royal Albert Hall. Probablemente sea un DVD.

¿Qué es lo que más va extrañar con el retiro?

A los fans.

** Las entradas para los tres conciertos que hará Creedence Clearwater Revisited en el país siguen a la venta: 13 de Marzo en Monticello (Topticket), 14 de Marzo en Movistar Arena (Puntoticket) y 15 de Marzo en el Gimnasio Olímpico UFRO de Temuco (Ticketek).