Del álbum familiar a su proceso artístico: el archivo fotográfico de Nemesio Antúnez

A Nemesio Antúnez siempre le gustó la fotografía. Desde antes de dedicarse completamente a la pintura hasta principios de los años 90, poco antes de morir. “Me acuerdo de chica, recorriendo pueblitos en España e Italia que le sacaba fotos a los matrimonios. Cuando iban saliendo de la iglesia posaban la familia, novios y amigos y varios fotógrafos registraban el evento. Nemesio iba corriendo y como uno más sacaba fotos”, recuerda su hija Guillermina Antúnez.

Esa faceta, menos conocida pero igualmente importante dentro de su producción, es la que mañana presentará la Fundación Nemesio Antúnez junto al Ministerio de las Culturas en el programa Ojo con el Arte, a través de Youtube a las 16.00 h. En esta nueva edición del programa, Guillermina Antúnez junto a Olivia Guasch (nieta del artista) conversarán con la fotógrafa Paz Errázuriz y presentarán el archivo fotográfico de Nemesio Antúnez (1918-1993).

Son alrededor de 6.000 fotografías a color y escala de grises las que componen el acervo fotográfico del artista. Imágenes que muestran la vida social y familiar del pintor, otras de carácter artístico y experimental, y algunas que dan cuenta de sus procesos creativos. Los formatos también son variados, hay positivos en papel, negativos y diapositivas.

“Este registro cubre casi un siglo: las fotografías familiares coleccionadas por Nemesio, que incluyen ambrotipos y cianotipos, datan de finales del siglo XIX, aunque son las menos, y el grueso de las fotografías tomadas por él cubre de fines de los años 1930 hasta principios de los 1990”, detalla Guillermina Antúnez.

Las fotografías son parte importante del archivo que administra la Fundación Nemesio Antúnez y que está compuesto por aproximadamente 15.000 documentos. Entre ellos hay muchas imágenes que eran parte de la colección personal del artista e incluso algunos retratos que le hicieron amigos. Las fotografías tomadas por Nemesio fueron encontradas en álbumes que estaban guardados en su casa. “Con mi madre, Patricia Velasco, las rescatamos y llevamos a la fundación. Aún ahora dentro de nuestras fotos van apareciendo imágenes interesantes para el archivo”, añade su hija.

Una de las personas que Nemesio Antúnez retrató frecuentemente fue su hermana Laura, quien aparece en el balcón de su casa en Las Lilas y también en capturas más experimentales a doble exposición en blanco y negro. Los viajes también son parte significativa del archivo del artista: su paso por la costa del norte y sur de Chile, sus viajes en barco a Estados Unidos y las paradas por toda Latinoamérica son algunas de las escenas retratadas.

“Lo más impresionante ha sido encontrarse con fotografías que luego utiliza como referentes para su obra, eso ha sido un verdadero hallazgo. Por ejemplo, existen vistas aéreas de Nueva York, fotos tomadas desde su balcón o desde la azotea de edificios, luego reconocemos el mismo encuadre en las pinturas de la serie multitudes. También hay fotos de cuerpos bajo el agua, que luego vemos trabajados en la serie los bañistas”, comenta Guillermina Antúnez.

Si bien algunas de esas imágenes serán presentadas en el episodio de Ojo con el Arte, también durante el mes de agosto serán difundidas a través de las redes sociales de la Fundación Nemesio Antúnez. A futuro existe la intención de exhibirlas al público, mientras tanto el equipo trabaja en la organización e investigación para incorporar el material a su catálogo online.

Desde el Ministerio de las Culturas también se han comprometido con la visibilización de el archivo fotográfico del pintor y ex director del Museo Nacional de Bellas Artes . “Es un registro único. Es por ello que hemos sostenido interesantes conversaciones al respecto, con el propósito de dar continuidad a la puesta en valor del material y compartirlo con el público a futuro, cuando las condiciones sanitarias lo permitan”, señala la ministra Consuelo Valdés.