Ejercito recontrató a 72 generales en retiro durante los últimos nueve años

Fue hace pocos meses. Exactamente, entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre de 2018. Durante ese lapso, el excomandante en jefe del Ejército, general Humberto Oviedo, quien dejó el cargo en marzo del año pasado, realizando su último salto en paracaídas tras permanecer 43 años en las filas castrenses, fue recontratado por la misma institución. Aquella despedida, entonces, solo duró seis meses.

Oviedo es el único excomandante en jefe recontratado por el Ejército en el período entre 2010 y 2018, pero no el único general.

Según antecedentes requeridos por la Comisión de Defensa del Senado, y que el propio Ejército remitió a esa instancia en abril pasado, un total de 72 generales en retiro fueron recontratados por esta rama de las FF.AA. para desempeñarse en diferentes funciones o en organismos dependientes de ella en el mencionado lapso.

La solicitud de esta información fue efectuada por el senador Alfonso De Urresti (PS) y tuvo respuesta el 8 de abril pasado. En el documento, emitido por el Estado Mayor del Ejército y firmado por el general de división Schafik Nazal, fue dirigido al Ministerio de Defensa y al Congreso.

En este archivo de respuesta, al cual accedió La Tercera, están los nombres de dichos oficiales, el tipo de relación contractual que mantuvieron con el Ejército después de su retiro y los periodos  en que se ejercieron sus funciones. Se trata de 360 vínculos contractuales, es decir trabajos que el Ejército le asignó a estos 72 generales en retiro, siendo el general (R) de división Jorge Fuenzalida quien más contratos tuvo: 12, entre 2010 y 2017.

El documento, además del general Humberto Oviedo, da cuenta de otros nombres conocidos del Alto Mando, algunos de ellos vinculados con las irregularidades que la ministra Romy Rutherford   investiga en el Ejército. Entre ellos, por ejemplo, aparece el general (R)  Guillermo Porcile Arellano, quien fue procesado en diciembre pasado en la arista "viajes", por la supuesta defraudación al Fisco de $ 44 millones.

Respecto de las recontrataciones, el senador De Urresti señaló que "el Ejército, salpicado por una serie de irregularidades que se están investigando en la justicia, debiera entender que su mayor activo ante la ciudadanía no es solo que sean sancionados los responsables de esos delitos, ni su defensa judicial, sino la transparencia sobre el uso de los recursos públicos, que son financiados por todos los chilenos".

Añadió que ya presentó una nueva solicitud para conocer el monto de estas recontrataciones de los exgenerales. "Estamos a la espera de esa respuesta, porque nos interesa saber cuánto le ha costado al país esta suerte de 'política institucional' del Ejército. Ojalá no tengamos que esperar tanto. No queremos que quede la impresión de que hay rapidez para recontratar, pero no para responder qué se hace con la plata de todos los chilenos", agregó.

Para el diputado RD Jorge Brito, presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara, "es preocupante que pueda existir un abuso en cuanto a las recontrataciones y eso lo presumimos, porque nos fue informado que el Estado de Chile gasta al año $ 29 mil millones en recontrataciones. No solo es necesario extender la edad de jubilación de los uniformados. También hay que decidir si el Estado paga sueldo o pensiones a uniformados, pero no se puede andar pagando sueldos dobles".

La cifra a la cual hace referencia el diputado se conoció el pasado 9 de abril. Fue en medio de la Comisión de Defensa de la Cámara, donde el subsecretario para las Fuerzas Armadas, Juan Francisco Galli, entregó un dato hasta la fecha desconocido: el gasto de $29 mil millones anuales para el pago de remuneraciones de personal recontratado en las FF.AA..

"Del total del presupuesto del subtítulo 21 destinado a personal recontratado, esos son $ 29 mil millones (…) Y eso no incorpora todo aquello del gasto del subtítulo 21 que no sea personal que haya sido o fue militar o haya sido llamado al servicio", dijo Galli en dicha instancia.

Tras esa presentación, a través de una solicitud de Transparencia a las tres ramas de la Defensa, La Tercera consultó a fines de abril pasado respecto de los pagos realizados por cada institución a los excomandantes en jefe por concepto de profesor militar, personal a contrata o asesor, abarcando el periodo desde 1990 a la fecha.

De acuerdo a lo informado, desde el 2006 a la fecha se pagaron en total $ 574.540.305 a once de los exmáximos generales y almirantes de las tres ramas de las FF.AA. por estos ítems.

Aquella vez, desde el Ejército se informó que dos excomandantes en jefe recibieron pagos por recontrataciones durante el periodo solicitado. Uno de ellos fue Óscar Izurieta Ferrer, quien, según esa información, se desempeñó desde 2010 a 2013 como "profesor civil, Juegos de Guerra (historia militar y estrategia)" en la Academia de Guerra del Ejército, trabajo por el cual recibió $ 26.104.949 brutos durante esos cuatro años. Su caso, sin embargo, no aparece en el listado entregado al senador De Urresti.

El otro general recontratado fue Humberto Oviedo (2014-2018), quien recibió el 2018 de parte del Ejército $ 3.900.000 como "honorarios por asesoría en el CACEIM (Consejo Académico Consultivo de Estudios e Investigaciones Militares)". En total -según lo informado por la rama castrense- desde 2010 al 2018 se pagaron $47.281.574 a los excomandantes en jefe.

Respecto de los 72 generales recontratados, el diputado UDI Ignacio Urrutia manifestó que "una persona que alcanza el grado de general es una persona que tiene altos niveles de conocimiento sobre la defensa nacional. Ha sido formado por el Estado e hizo una carrera de 35 años con el objeto de prepararse para la Defensa. Tiene gran experiencia y eso hace comprensible el tema, pero el problema es que lamentablemente se retiran muy jóvenes y esa experiencia se pierde. Yo creo que es perfectamente recuperable. Esa es la razón por la cual el gobierno ha presentado un proyecto, que está en discusión en la Comisión de Defensa, para alargar la carrera militar, con el objeto de que no se vayan jubilados a los 55 años y sus destrezas puedan seguir siendo utilizadas".