El cine chileno se vuelca a internet: las nuevas películas de Alberdi, Agüero y Sepúlveda llegan a plataformas

La sensación es la de un gran torrente a punto de salirse de sus cauces. Cinco meses desde que los cines cerraron el 20 de marzo han dejado a los directores y productores chilenos con hambre de pantalla y de espectadores. Pero, para ellos, hay un elefante en la habitación que cuenta con todas las comodidades, eficacia y encanto de un electrodoméstico: la pequeña pantalla doméstica. La de los computadores, tablets, celulares y smart tvs. Es en aquel prosaico y sanitizado medio sin la espectacularidad de la sala de cine que las películas de todo el mundo están encontrando su destino. Ahora le llegó el momento al cine chileno.

Esta semana hay nada menos que un pre-estreno y dos estrenos. Dos de ellos son de cineastas bastante conocidos y han gozado de críticas y reconocimiento en festivales de prestigio. El otro es una película que ya despierta curiosidad y atención al saber la identidad de su protagonista. Los tres son parte de una suerte de ola de filmes nacionales desperdigados en diferentes plataformas de streaming y que irán desfilando durante lo que queda de agosto y hasta al menos la segunda semana de septiembre.

El más esperado tal vez, aunque el que tendrá menos tiempo de exposición, es El agente topo (2020), documental de Maite Alberdi exhibido a inicios de año en el Festival de Sundance, con una vibrante respuesta de parte del público y de los críticos. La película se dará este viernes 21 a través de la plataforma de Cinépolis Klic (pertenecientes a los cines Cinépolis-Hoyts) y habrá acceso solo por ese día. Es una suerte de precalentamiento de motores antes del eventual ingreso a salas de cine en una fecha próxima si es que las condiciones sanitarias lo permiten.

El cuarto documental de la realizadora de La once (2014) cuenta, a grandes rasgos, la historia de Sergio, un improvisado detective de 83 años que ingresa a una casa de reposo con la misión de observar las condiciones de vida del lugar. Lleva a cuestas aquel mandato desde el momento que Rómulo, un auténtico investigador privado, requiere su ayuda para poder saber cómo tratan a la madre anciana de una de sus clientas. La obra, definida por la crítica del portal Indiewire como “la película de espías más emotiva que se ha hecho”, fue mencionada por este mismo medio como una de las eventuales candidatas a ser nominada al Oscar al Mejor Documental 2021.

Sobre la decisión de este pre-estreno online, Maite Alberdi ha dicho: “Nos tomamos el tiempo para encontrar el espacio y la forma para mostrar la película en Chile. La crisis mundial nos desafió a encontrar otras vitrinas para nuestro público, cuyas reacciones siempre han sido vitales para retroalimentar mi trabajo”.

Un día antes que el largometraje de la directora de Los niños (2016), entrará a plataformas Nunca subí el provincia, el nuevo documental de Ignaco Agüero, realizador de Cien niños esperando un tren (1988) y El diario de Agustín (1988). Agüero es uno de los documentalistas más importantes del país y su obra ha sido reconocida históricamente en diferentes festivales del mundo. Sin ir más lejos, Nunca subí el provincia (2019) ganó el año pasado el Festival de Cine de Marsella, uno de los más importantes de Europa en la no ficción.

Siendo fiel a su tradicional método de trabajo, Ignacio Agüero parte la ruta de exploración desde lo que tiene a mano, desde su propia circunstancia. En este caso, desde su casa, una vieja construcción con fachada a la calle en un barrio de Providencia. Acá el avance inmobiliario ha minado la anatomía del vecindario, cambiando almacenes por torres y casonas por edificios de inexpresivo concreto.

El Provincia al que alude el título de la película es el cerro Provincia, al que el cineasta siempre tuvo vista privilegiada desde su casa hasta que un edificio se interpuso en la esquina de su cuadra, en el territorio de panadería. La cinta, como antes lo fue su trabajo Aquí se construye (2000), es una reflexión sobre el cambio de la fisonomía urbana y la relación del hombre con su barrio, con sus recuerdos y con el espacio.

El propio Ignacio Agüero da su punto de vista: “La película delimita el espacio y calcula los metros desde la casa a la esquina, a la virgen del cerro San Cristóbal, a la plaza, al cerro Provincia, a la casa donde viví de chico. Mide la distancia entre el yo y el mundo, estableciendo un modelo de la realidad de cada cual”. El documental estará presente desde este jueves 20 en distintas plataformas, pero a través de un acceso único en la plataforma Miradoc.

También entra este jueves al territorio del omnipresente streaming el documental El negro, de Sergio Castro. La película es un registro reciente de las experiencias de Ricardo Palma Salamanca, el ex militante del FPMR condenado como autor material del asesinato del senador Jaime Guzmán, que escapó de la Cárcel de Alta Seguridad en el año 1996. La película de Castro (La jauría, La mujer de barro) entrará a la plataforma Red de Salas por $ 2.000 y a Cinépolis Klic por $ 2.900.

Todas las cintas mencionadas llegan al streaming previo pago. Será la manera en que también se exhiba sólo por el día 12 de septiembre la película Tengo miedo torero, el largometraje de Rodrigo Sepúlveda basado en la novela de Pedro Lemebel que estará en Punto Ticket. Luego debería venir, si es que hay condiciones sanitarias, un estreno en salas.