Las gestiones del antecesor de Bachelet en la ONU ante la crisis de Venezuela

"No creo que nadie en este cargo, aunque pensara diferente, pueda trabajar de una manera radicalmente distinta a la manera en que mis predecesores y yo hemos trabajado. Creo que, si tratas de apartarte, aun así, te van a llamar la atención y será muy desagradable porque vendrá de las mismas personas que están sufriendo. No puede haber nada que pueda desgarrar más tu conciencia que si los abandonas".

La declaración anterior es de Zeid Ra'ad al-Hussein, en el canal de la ONU a días de dejar su cargo de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Entonces ya estaba claro que su sucesora sería la expresidenta Michelle Bachelet, quien hoy es cuestionada por el oficialismo en Chile y por la oposición a Maduro por no presentarse en Venezuela.

El diplomático jornado Ra'ad al-Hussein, estuvo a cabeza de la oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU entre 2014 y 2018. Pudo haber optado a un periodo más pero desechó esa idea. Según comentan extraoficialmente en Chile, no continuó debido a las controversias que debió enfrentar para ejercer su misión.

Durante su gestión se enfrentó tanto a Maduro por las violaciones a los derechos humanos como con el presidente de Estados Unidos Donald Trump por su política inmigratoria.

Uno de los primeros disparos del jordano al gobierno venezolano fue en febrero de 2016, cuando  denunció ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU la situación de violencia y de violación de los derechos fundamentales en 38 países, entre ellos México y Venezuela.

Según publicó entonces el diario venezolano El Universal, Zeid presentó ante el Consejo el informe anual de su Oficina, en el que detalló todas las situaciones de violaciones a los derechos humanos existentes en el mundo. En ese contexto se detuvo en Venezuela: "sigo muy preocupado por el deterioro de la situación de los derechos humanos en Venezuela, particularmente las duras respuestas del Gobierno a las críticas y a expresiones pacíficas de discrepancia"

Más adelante declaró: "estoy especialmente preocupado por la continua detención de líderes de la oposición y de manifestantes, a menudo por largos periodos". Aludía a los opositores, Antonio Ledezma, alcalde de Caracas, y Leopoldo López.

Por sus críticas, el diplomático se ganó la enemistad de la prensa oficialista de Venezuela.  En junio de 2015,  el canal Telesur le dedicó un perfil donde se refiere a él señalando que "Su Alteza Real el Príncipe Zeid Ra'ad Zeid Al-Hussein no pertenece a una rama cualquiera de esta dinastía medieval. Es es el hijo del Príncipe Zeid de la Casa Hachemita y de la princesa turca Fahrelnissa Zeid, y es heredero de las Casas Reales de Irak y Siria. En materia de represión, el Principe Zeid sabe mucho, muchísimo".

En agosto de 2017  la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos presentó otro informe preliminar sobre la situación en Venezuela. La información habría sido recabada mediante 135 entrevistas a testigos realizadas desde Ginebra y Panamá, dada  la negativa del gobierno a darles acceso al país.

"Varios miles de personas fueron detenidas arbitrariamente, muchas de ellas han sido víctimas de malos tratos e incluso de torturas. Y no hay indicios de que esa actuación vaya a cesar", denunció entonces en un comunicado Zeid Ra'ad Al Hussein. Venezuela entonces lo acusó de transgredir la verdad.