Los detalles del macabro crimen de la exbailarina de “Música Libre” María Angélica Ascui

María Angélica Ascui Silva (69), la “Chichi” como le decían sus amigos, se fue a vivir al sur de Chile buscando paz. La exbailarina del programa de televisión setentero Música Libre salió de Santiago hace más de una década, agotada del mundano ajetreo capitalino. Primero se fue a vivir a Laguna Verde, en la Región de Valparaíso, donde adquirió un terreno, para luego venderlo y llegar a la isla de Chiloé motivada por la belleza de sus paisajes.

“Termino unos negocios buenos en Laguna y me voy a mi lindo proyecto, sin fecha de regreso. A seguir abriéndome camino en la Isla de Chiloé”, escribió en sus redes sociales en septiembre de 2014. Por esos años, Ascui preparaba sus maletas para radicarse en el sur, donde la exbailarina, separada y con cuatro hijos, viajó sola. Una vez que se estableció y compró una casa, levantó un emprendimiento: el arriendo de cabañas.

Pero la paz que buscaba en la Región de los Lagos, un “lugar paradisíaco” como ella misma describía la zona a sus amigos, se vio violentamente quebrada la semana pasada. Fue asesinada a manos de un sujeto que hoy se encuentra detenido y a la espera de su formalización. El hombre fue identificado como Andrés Mauricio Hernández Toro, de 46 años y de nacionalidad colombiana. Se trata del arrendatario de una de las cabañas de Ascui. El sujeto, quien no tiene carnet chileno y se encontraba con pasaporte, arrendaba ese espacio hacía seis meses.

La “Chichi” fue hallada muerta por Carabineros en medio del masivo apagón que se registró en el país el martes pasado. Estaba envuelta en una frazada, con partes de su cuerpo amarradas, debajo del puente San Pedro, en el sector de Laguna Pastahué. Pero el crimen había ocurrido al menos cinco días antes.

En la audiencia de control de detención, el fiscal jefe de Castro, Enrique Canales, solicitó ampliar el plazo de detención a la espera de recabar mayores antecedentes para imputar delitos contra el sujeto. En específico, está a la espera de informes policiales y del Servicio Médico Legal. De momento, se imputaría un delito de homicidio calificado.

Hernández, quien en Castro trabajaba como barman en un night club, se entregó un día después de que fuera hallado el cuerpo. Llegó hasta la Segunda Comisaría de Carabineros de Castro y confesó ser el autor del crimen. Frente a los policías, entregó los detalles del hecho.

En su declaración, Hernández dijo que la víctima solía tomar alcohol con él, lo cual es rechazado por los familiares ya que, dicen, ella no bebía ni consumía drogas. Según dijo el imputado, ella estaba “drogada” cuando la asesinó. Respecto al crimen en sí, según su propio relato, le propinó puñaladas en reiteradas ocasiones. Luego de dos horas, la degolló con una espátula. Posteriormente, con otra herramienta de construcción, la descuartizó.

Tras cometer el crimen, tomó el vehículo de la mujer y la llevó hasta el puente donde arrojó sus restos amarrados con alambre de púas. Tras sustraerle un dinero que ella mantenía entre sus pertenencias, el sujeto, en días posteriores, fue a comprar ropa a un centro comercial.

“Yo creo que hay premeditación, absolutamente”, dice el abogado Andrés Belart, quien está representando a la familia de la víctima. “Es un crimen bien macabro”, agrega. Entre los móviles que investiga la fiscalía está un posible conflicto “por dinero”. Sobre esto, el abogado de la familia dice: “El móvil pudo haber sido que quería plata o no quería que le cobraran más el arriendo, o quería quedarse con la propiedad”.

Belart se encuentra afinando una querella contra el sujeto en que, además de homicidio calificado, también se le imputaría el delito de robo. La formalización se realizará este domingo.

En la audiencia de control de detención, el abogado privado del sujeto, Juan Manuel Castro Aburto, pidió que, en el intertanto, el sujeto permaneciera con arresto domiciliario en la cabaña donde residía. Misma propiedad que pertenece a Ascui.

Sin embargo, la petición fue rechazada por el tribunal. “Imagínate el victimario va a estar viviendo en la casa de ella. Aparte que están los hijos y familiares allá”, comentó el abogado de la familia. El sujeto se encuentra detenido en la cárcel de Castro. No se descarta que haya actuado con otras personas para cometer el macabro crimen que conmocionó a la tranquila ciudad de Chiloé.