“¡Parecemos centro de alumnos!”: las duras recriminaciones de ministros del TC al no llegar a acuerdo por la presidencia

TC Tribunal Constitucional
Frontis del Tribunal Constitucional (TC).

El jueves 7 de julio, el Tribunal Constitucional no logró un nombre de consenso para dirigir el organismo por los próximos cuatro años. Durante la discusión, fueron varios los flancos que se abrieron y profundizaron las rencillas eternas de esa institución en la que arribaron nuevas ministras hace dos meses. Por una parte, Miguel Ángel Fernández y José Ignacio Vásquez apostaron a que se mantuviera el interino Cristián Letelier en el cargo, mientras que otros cuatro votaron a favor de María Pía Silva, jueza que al no ser elegida acusó que se debía a temas de género.


“Doy inicio a la sesión oficial de este pleno, a fin único objeto de elegir al nuevo presidente de este Tribunal Constitucional por los próximos dos años”. Estas fueron las palabras que usó Cristian Letelier, pasadas las 16 horas del jueves 7 de julio, para dar inicio a la audiencia en la que se iba a elegir al presidente del organismo, cargo que quedó vacante con el cumplimiento del periodo de Juan José Romero. En su calidad de autoridad interina, el abogado “abrió los fuegos”, pero pese a las altas expectativas que tenía la ministra María Pía Silva de ser electa durante la jornada no salió humo blanco, ya que no hubo consenso respecto a su nombre y -como ya es costumbre- se generaron duras recriminaciones entre los integrantes del “guardián de la Constitución” .

La primera en tomar la palabra fue la ministra Nancy Yáñez, quien fue designada por el Presidente Gabriel Boric a fines de abril. En general las discusiones en el TC y los debates se inician desde el más nuevo hasta el más antiguo y respetando esta tradición fue la abogada y académica de la Universidad de Chile quien intervino para dar su apoyo a Silva. A ella le siguió la otra “debutante” en el organismo, la ministra Daniela Marzi, quien también respaldó la aspiración de la profesora de la Universidad Católica. A ellas se sumó el ministro Nelson Pozo -hoy por hoy el más antiguo- y también el voto de la propia Silva. Sí, la exdemocratacristiana votó por ella misma.

Los apoyos que no llegaron fueron los del resto del pleno. El primero en restarse fue el ministro Rodrigo Pica. Al inicio de su intervención cuestionó las filtraciones a la prensa: “después de mucho meditar, habíamos llegado a varios acuerdos previos, uno de ellos era no terciar la elección por la prensa y transformarlo en un asunto de opinión pública (...) no quiero pensar que salió de esta mesa. Ahora, si salió de esta mesa, lo considero vil, por decir lo menos”. Esto en alusión a notas periodísticas y conversaciones en la radio que daban cuenta del clima interno del TC previo a esta elección.

“Yo hago muy mío lo que escuché en el pleno de la mañana, que es para mí una ley de vida: no manifestar voluntad bajo recados de presión o pistola arriba de la mesa. Por lo mismo, yo no manifestaré preferencia y me voy a abstener”, expuso.

Luego, fue el turno del ministro Miguel Ángel Fernández, quien aseguró que por distintas razones no se debería elegir presidencia. Primero, manifestó su apoyo a Letelier, ya que a su juicio desde que el exdiputado está como presidente interino el TC “ha venido funcionando y de manera muy bien, particularmente desde el mes de marzo (...) usted ha desarrollado una gestión y ha asumido un liderazgo complejo, pero me parece que muy satisfactorio”. Además de eso, agregó, que no se puede votar siendo que existen discusiones en el Congreso y en la Convención Constitucional respecto al futuro del organismo. Razones por las que finalmente se abstuvo.

A esta postura, se sumó también el ministro José Ignacio Vásquez, quien acusó un “show” en las últimas semanas y calificó como “lamentable que se realizaran o formaran bandos, divisiones”. En duros términos, y fiel a su estilo, el juez sostuvo: “los que estamos acá hace un tiempo, vimos nefasto ese trajín de debates traídos del festival de dimes y diretes de bandos sectarios, yo sé que no todos compartían mucho de lo que ocurrió en ese periodo, pero la verdad es que nos hizo un daño super profundo. Esto último en alusión a la crisis vivida durante la presidencia de la ministra María Luisa Brahm, quien incluso llegó a acusar corrupción al interior del TC.

“Nuevamente, y lo hemos venido viendo, me parece muy poco decoroso cuando veo grupos que se forman y conversan, lo encuentro un poco infantil, y perdón por decir esos términos. Me parece que más bien parecemos centros de alumnos en vez de una elección de presidentes del TC”, agregó.

Junto con eso, Vásquez hizo suyo otro de los argumentos que se manejan al interior del tribunal, que es esperar a contar con la designación de todos los ministros, al que actualmente le faltan dos designaciones de parte del Congreso, y que una vez concretado eso se proceda a elegir una nueva presidencia. Ante eso, señaló que “esto de estar apurando candidaturas, lanzándolas anticipadamente a todas partes a vox populi, me parece, insisto, que no es lo propio, yo habría esperado de este tribunal una actitud un poco más seria, más recatada, más republicana y no tan asambleísta y de divisiones cuasi partidistas”.

En el caso del ministro Nelson Pozo, uno de los nombres que también sonaba para presidir el TC debido a su antigüedad, descartó estar disponible debido a -sostuvo- tiene otros planes fuera del tribunal. Además, quienes pudieron escuchar los argumentos, habría amenazado con no integrar ningún otro pleno hasta que hubiera una presidenta o presidente electo.

La pelea por “tema de género”

Más adelante durante el pleno, la ministra Silva volvió a pedir la palabra. Junto con agradecer sus votos a favor, aseguró que algunos tenían “prejuicios que se mantienen en este tribunal”. A eso, sumó: “las circunstancias de ser mujer a veces influyen, a veces se piensan que uno es liviana, que uno está de pasada aquí porque bueno, hay prejuicios”.

En esa línea argumentativa agregó que: “pareciera que la última presidencia marcó un cierto temor a que las mujeres no estamos capacitadas para el cargo, y que algo se dijo por acá, como que fuera liviano y no es así (...) y no quisiera que esto se convirtiera en una discusión de ese nivel, o sea estamos en otra época, estamos en una sociedad distinta donde las mujeres tenemos los mismos derechos que los hombres, espero que eso se respete”.

Al concluir, fue el ministro Pica quien replicó las críticas de Silva: “felizmente puedo decir en voz alta que no es mi caso, para mí fue un honor ser jefe de servicio bajo la presidencia de las dos mujeres que estuvieron en este tribunal, fui secretario subrogante con la ministra Marisol Peña y de la ministra María Luisa Brahm”.

El ministro Vásquez, también entró al debate y replicó lo planteado por la académica de la UC. Lo primero, dijo, él no busca ser candidato a la presidencia. Ante eso, sostuvo que “me da la impresión de que está referido a mí, yo tengo prácticamente 40 años de ejercicio profesional, desde procurador hacia adelante, he pasado por muchos tipos de instituciones, he tenido siempre el mayor respeto hacia las mujeres, he tenido jefas y he tenido mucho respeto hacia ellas, de manera que aquí no se me venga a excusar, en un intento de victimizarse de acusar de que yo estaría de alguna manera tratando de liviandad”. Luego, cuando sostuvo queveo hacia dónde va esa suerte de acusación”, fue cuestionado por la ministra Yáñez, a quien le señaló “sí ministra Yáñez, sé para donde va”.

“Yo le recuerdo a la ministra Silva, tanto es así que tengo que recordarle a la ministra Silva, que hice también esfuerzos para que usted llegara a este tribunal y usted lo sabe (...) entonces no se me puede venir a decir que yo estoy tratando, porque ya veo hacia dónde va esa suerte de acusación (...) me parece muy propio de hoy día, el tratar de victimizarse por algún motivo”, expuso Vásquez.

Junto con eso aseguró que “no soy machista, para nada, tengo muchas amigas mujeres y he tenido muchos colegas y jefas con las que he trabajado sin ningún problema, no tengo problemas con las mujeres, las respeto absolutamente, para mí son absolutamente iguales. Así que eso por favor que se salga de la mesa porque es un argumento que me parece que no viene al caso”.

La pasada de cuentas a Letelier

“Me va a disculpar señor ministro”, dijo la ministra Yáñez para expresar su desacuerdo con el resto del TC que no estuvo por elegir presidencia. La abogada cuestionó que Letelier no asistiera al acto final de la Convención Constitucional y enviara al ministro Pica en representación del organismo.

“Lo que ocurrió el día lunes fue muy complejo. Ese era un acto republicano, y como yo se lo señalé en esa oportunidad el Tribunal Constitucional estaba convocado en calidad de institución de la República, y quien ejerce la presidencia es convocado en esa calidad, usted me señaló que estaba convocado personalmente, entiendo que una invitación personal y que por lo tanto era su prerrogativa resolver quién representaba a este tribunal, y la verdad es que yo no estoy de acuerdo con eso, a mí me parece efectivamente que la invitación a usted no se la cursan por ser Cristian Letelier, se la cursan por ser el presidente del TC”, cuestionó.

Ante el emplazamiento, Letelier descartó algún tipo de falta de diálogo, ya que aseguró que “yo tengo las mejores relaciones con las personas que piensen muy distinto a mí también, el Presidente Gabriel Boric, tengo las mejores relaciones con él, excelentes relaciones. Muy buenas relaciones con el ministro Mario Marcel, bueno con todos los ministros que están actualmente, con el subsecretario de Justicia. O sea, me he relacionado mucho más con las personas que se pudiera pensar que piensan distinto a mí, porque no me meto con nadie”. La razón para mandatar a Pica, explicó, fue que le pareció que el ministro en cuestión “es quien tenía que representarnos, mirando hacia el futuro, se lo merecía por su historia en el tribunal y porque es el más antiguo de los ministros”.

Tras el duro debate, finalmente, se decidió citar a un nuevo pleno para el martes a las 16:00 horas en que se volverá a discutir sobre el tema. La sensación que quedó en el ambiente es que Silva y sus aliados no defendieron bien su posición, porque hay quienes sostienen que pese a no lograr mayoría, las abstenciones podrían haberse sumado a sus votos a favor, pero ya era tarde, los jueces estaban cansados y todos pensaban en las armas que ocuparán la próxima semana en una nueva batalla en la sede de discusión constitucional.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.