Encuestadores locales y pruebas por adelantado: la estrategia del Censo 2024 para entrar a los campamentos

La complejidad del Estado para ingresar a ciertos sectores del país no es algo nuevo ni de este año, pero ha tomado especial relevancia ahora que se está desarrollando el Censo 2024. Catastrar los cerca de 1.500 asentamientos precarios se ha transformado en un verdadero desafío para el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que ya vivió dificultades para la consulta de 2017 y que esta vez, en conjunto con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), Techo Chile y Déficit Cero, de forma inédita emplearon una estrategia que viene ejecutándose desde finales de 2021 para concretar el Censo de este año.

“Conocer la realidad de los campamentos, tener los contactos y vínculos con las comunidades, es lo que sentimos que es nuestra estrategia principal de trabajo”, indica a La Tercera la jefa de proyecto del Censo 2024, Macarena Alvarado, quien dice que ese trabajo conjunto nunca había sido desarrollado en la historia de los 15 censos realizados en Chile.

Desde el 9 de marzo comenzó el catastro y el INE comenzó a liberar ciertos datos respecto del avance de ejecución, cifrando en un 27,2% el territorio nacional que ya ha sido visitado.

Pero uno de los mayores desafíos ha estado en ingresar a los asentamientos precarios que el ministro Carlos Montes cifró exactamente en 1.472 a lo largo de todo el país. En razón de aquello, los primeros acercamientos del INE para llevar a cabo la vinculación con las comunidades fue gracias a la gestión que realizaron los voluntarios de Techo.

“Principalmente nos han ayudado a difundir el Censo a través de operativos al interior de los campamentos, en sectores como San Antonio y Cerrillos”, señala de modo general Alvarado.

El detalle de esta labor lo entrega la supervisora de investigación en Techo-Chile, Javiera Moncada: “Se hizo un traspaso de información para desarrollar maestros de calles y así poder identificar las viviendas que tendrían que censar, o dónde pueden acceder los censistas al campamento, ya que en muchos casos están en zonas de riesgos que dificultan el ingreso”, afirma.

En cuanto a los operativos empleados, la jefa del Censo explica que se realizaron cuestionarios, pero en una escala menor. Junto a eso, añade, se instalaron locales censales donde los coordinadores de la institución probaron el uso de dispositivos electrónicos, conectividad a internet y protocolos de acceso y salida de los asentamientos. Desde la institución se refieren a esta etapa como un “proceso previo”, que apuntó a la revisión de la cadena logística.

Eso sí, desde el INE aseveran que el operativo es muy parecido al que se realiza a lo largo de todo el territorio nacional. Y que lo que lo hace distinto es el trabajo de vinculación con las comunidades de los asentamientos.

Respecto a la cantidad de censistas que asisten a esos territorios, Alvarado indica que todo depende de la magnitud del campamentos. “Va uno, dos o tres censistas. Por lo general cuando es un campamento más grande va un grupo de dirigentes”, asevera.

Desde Techo detallan que el operativo consta de distintos roles, como el gestor territorial, el facilitador y el censista. Los facilitadores serían las personas que buscan ayudar a los censistas en la vinculación con los campamentos, donde es esencial que sean los mismos dirigentes de los asentamientos.

En esa línea, desde Censo cuentan que uno de los métodos más efectivos ha sido apuntar como censistas a los mismos pobladores de los campamentos.

“Incluso en el proceso de reclutamiento y selección de los censistas se elige a aquellas personas que forman parte de los campamentos para que tengan algún vínculo con el territorio, porque se hace más fácil en algunos casos. En otros son personas que tienen mayor experiencia en el proceso de Censo, lo que ha resultado con mayor efectividad”, dice Alvarado.

Pero, asimismo, se ha puesto ojo al tema de la seguridad. De hecho, el fiscal Marcos Pasten deslizó esta nueva realidad en estos espacios precarizados: “Las organizaciones criminales aprovechan para instalarse ahí con el afán de tomar un control de carácter territorial”.

A raíz de esto y casos como el del sujeto detenido tras ser denunciado por amenazar con un arma y abusar sexualmente de una censista en Dollinco (La Araucanía), el Censo ha extremado la seguridad de los censistas con la coordinación regional en los territorios en conjunto con Carabineros, a través de reuniones semanales. Asimismo, se le han ido entregando al Ministerio de Interior -por adelantado- los sectores que serán encuestados, incluidos los campamentos.

“Hemos estado avanzando correctamente en todo el territorio. Cuando tenemos dificultades con los campamentos tenemos gestores de apertura territorial que van a las comunidades para despejar las dudas, que entendemos que puedan existir en torno al proceso”, explican desde Censo.

Con todo, según indican se han censado campamentos en distintas comunas del territorio nacional como San Antonio, Talagante y Coronel.