Tensión puertas adentro en Vitacura: la “revuelta” funcionaria que se activó tras el caso Torrealba y los paños fríos de Merino

Municipalidad de Vitacura
Fachada Municipalidad de Vitacura.

El martes el municipio de Vitacura se llenó de globos negros y pancartas por parte de los funcionarios, quienes protestaron en contra de la alcaldesa, Camila Merino (Evópoli), luego de que la semana pasada se filtrara una lista con los nombres de trabajadores que enfrentan un sumario por parte de la Contraloría. La edil ha mantenido reuniones para aplacar la molestia en un momento que define como "doloroso".


Los nuevos antecedentes que se han conocido de la investigación que involucra al exalcalde de Vitacura, Raúl Torrealba, terminaron por salpicar el ambiente interno de la Municipalidad de Vitacura.

El punto de quiebre fueron los resultados del sumario que hace una semana dio a conocer la Contraloría, en los cuales acusó una “grave vulneración a la probidad” y apuntó al exedil, pero también a otros 16 funcionarios que aún siguen activos en el municipio.

A partir de ahí, el ambiente al interior de Vitacura se tensó. Y así quedó en evidencia ayer miércoles por la mañana, cuando un centenar de funcionarios interrumpió a gritos la reunión del concejo municipal que en ese momento presidía la alcaldesa, Camila Merino (Evópoli), con el fin de manifestar su descontento ante la filtración de la lista de personeros que hoy enfrentan un sumario administrativo para indagar posibles responsabilidades durante la administración de Torrealba (RN), quien será formalizado el próximo 6 de junio por asociación ilícita y fraude al Fisco.

Lo que el martes había comenzado como una manifestación con carteles y globos negros en las dependencias de la sede municipal, el miércoles derivó en un cara a cara entre la edil, parte de los 10 concejales del municipio y cerca de 100 funcionarios, quienes con pancartas, globos y cantos se instalaron en las escaleras de la sede comunal para hacer notar su descontento.

“Somos funcionarios, no delincuentes”, “nos exponen como chivos expiatorios”. Esa fue parte de la consigna que esgrimieron el miércoles alrededor de las 11.00 horas, justo cuando la alcaldesa sesionaba el concejo municipal una vez a la semana, como de costumbre. Debido a los gritos que se escuchaban con fuerza desde el otro lado de la sala, Merino decidió detener la reunión para escuchar a los manifestantes y sus descargos.

En conversación con La Tercera PM, el presidente de la Asociación de Funcionarios Municipales de Vitacura, Víctor Cartes, relata que las manifestaciones se desataron por una serie de problemas que se arrastran hace meses -donde el pago de sueldos era uno de los más recurrentes-, pero que la gota que rebalsó el vaso se produjo cuando Contraloría notificó a 16 funcionarios actualmente en ejercicio en el municipio de Vitacura, los cuales tienen la calidad de “inculpados” en la serie de irregularidades que el órgano acreditó por parte de Torrealba.

Vitacura
Parte de los carteles que funcionarios de la Municipalidad de Vitacura colgaron dentro de la sede comunal.

“Nosotros no desconocemos que hubo malos manejos en la administración anterior. Lo que nos molestó, y por lo cual nos estamos movilizando hoy, es que esa lista de funcionarios se filtró a la prensa y al ojo público. En ella se expusieron los datos personales de los trabajadores, quienes hoy están siendo objeto de discriminaciones y malos tratos por vecinos e incluso cercanos. Es más, se les trata casi como culpables cuando no es así. Eso nos dolió”, recalca Cartes.

Según el funcionario, tales hechos habrían comenzado el pasado jueves cuando Canal 13 emitió un reportaje en horario prime donde se informaba sobre el sumario administrativo hacia los trabajadores, proceso que se confundió con la investigación penal que lleva adelante el Ministerio Público respecto de un fraude en el uso de recursos públicos.

El trato mediático del caso Torrealba ha traído malestar y una sensación de impotencia, e incluso de injusticia, porque se nos cataloga a nosotros (funcionarios) como delincuentes o no probos. Mientras que se realiza una investigación en forma paralela donde todos sabemos que hay involucrados (...) Esto nos ha llegado a afectar de manera psicológica, donde hay desmotivación y pocas ganas de venir a trabajar, porque se nos menosprecia y se nos mira mal. No se debería meter a todos en un mismo saco”, argumenta el presidente de la asociación.

En medio de este malestar, la alcaldesa Merino salió al paso por medio de un comunicado público donde lamentó que este proceso -que debiese haber sido reservado- se hiciera público en los medios antes del cumplimiento íntegro de sus etapas. “Todo sumario administrativo entrega a las personas el derecho a presentar sus descargos por las irregularidades que se les imputan y, es solo a partir de aquello que la CGR debe ponderar los antecedentes y proponer sanciones. El que los antecedentes se hicieran públicos expone innecesariamente a personas que no han tenido la oportunidad de defenderse”, recalcó.

Camila Merino
Alcaldesa Camila Merino. Foto Carlos Quezada

Una declaración que, según miembros del municipio, es todo lo que se puede entregar, puesto que la alcaldesa está impedida de referirse a este tema, puesto que sigue siendo objeto de investigación.

Pero a un día de lo que fue una de las manifestaciones más duras para la administración de Merino, este jueves la Municipalidad de Vitacura ha comenzado a volver a la calma: los globos de a poco han ido desapareciendo y las pancartas ya no revisten la fachada del edificio comunal.

En conversación con La Tercera PM, Merino comentó que como administración han mantenido reuniones con las asociaciones de funcionarios de manera de aclarar todo el proceso que se está llevando, desde una arista por el Ministerio Público, y por otra, desde la Contraloría General de la República. “Tenemos que trabajar juntos de manera de ir avanzando y, al final de todo este proceso, que es muy doloroso, salir fortalecidos”.

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