“Hoy se hace realidad el sueño. Comienza el verdadero desafío. Feliz de pertenecer a este proyecto que busca trabajar por Chile”. Era el 15 de febrero de 2016 y en un tuit la actual secretaria general del Partido Republicano y extimonel de la tienda, Ruth Hurtado, celebraba la inscripción de Evópoli como partido político. “Felicitaciones a todos quienes trabajamos para lograr este sueño”, escribió en esa ocasión.

Y es que pese a que Evópoli y el Partido Republicano se encuentran en ambos extremos de la derecha -los primeros apuestan a ser más liberales, mientras los segundos son considerados más conservadores-, Hurtado pasó de una tienda a otra, luego de que la colectividad fundada por José Antonio Kast fuera inscrita formalmente en el 2019.

Así como Hurtado, una decena de militantes de republicanos provienen de los partidos de Chile Vamos. Un desangre que se ha dado de a poco, pues la tienda de Kast no solamente ha golpeado a la UDI, RN y Evópoli quitándoles cupos en el Parlamento y en el Consejo Constitucional, sino que también ha atraído a una serie de dirigentes a formar parte de la primera línea de republicanos.

Su propio fundador, Kast, viene de la UDI. Ahí militó por 20 años y renunció en 2016. Unos días después, más de 30 militantes se fueron con él.

Además, el propio presidente del Partido Republicano, Arturo Squella, fue militante UDI y diputado dos veces por esa tienda.

Y el brazo derecho de Kast e ideólogo de republicanos, el abogado Cristián Valenzuela, también fue gremialista.

Al menos tres integrantes de la directiva provienen de la UDI. En la bancada de diputados, en tanto, de los 12 parlamentarios hay cuatro que vienen de la UDI, tres de RN y uno de Evópoli, mientras que otros cuatro fueron independientes, mientras que de los 22 consejeros electos, cinco tienen origen en la UDI.

En el Senado, sus dos representantes tienen origen en tiendas de Chile Vamos. De esta forma, de los 14 parlamentarios republicanos, 10 vienen de otros partidos, es decir, el 71%.

En la pasada elección parlamentaria Chile Vamos vio cómo los republicanos arremetieron logrando 14 diputados y un senador.

Una dispersión de votos que dividió a la derecha y que tiene a Chile Vamos debilitado luego de solo obtener 11 escaños en la elección de constituyentes, en contra de los 23 de los republicanos.

Dentro de los diputados republicanos hay transversalidad respecto de las antiguas militancias. De la UDI provienen Cristián Araya, quien era concejal en Vitacura; Juan Irarrázaval, quien trabajaba con Kast cuando era diputado, y Luis Sánchez. Este último incluso apareció en el emblemático video de 2013 de “42 razones para votar por Pablo Longueira” como Presidente de la República. “Porque él prefiere el producto nacional”, decía en el registro audiovisual mientras tomaba un vaso de piscola.

También estuvo en la UDI el diputado José Carlos Meza, quien entonces trabajaba con la hoy secretaria general gremialista, María José Hoffmann.

Desde RN provinieron los diputados Cristóbal Urruticoechea y Harry Jürgensen, quienes tomaron distancia de la bancada en la legislatura pasada. Incluso, desde ese mismo comité se fue el periodista independiente Francisco Águila a republicanos.

Agustín Romero también fue RN y trabajó en la Municipalidad de Santiago junto a Felipe Alessandri (RN).

Más llamativo es el caso de Mauricio Ojeda, quien es hoy independiente, pero en el comité republicano. En el pasado fue militante de Evópoli, tienda de la cual fue fundador en La Araucanía. Incluso tiene fotos con Felipe Kast, senador por la zona.

Otros tienen origen independiente, como Chiara Barchiesi, Johannes Kaiser, Stephan Schubert y Benjamín Moreno.

En el Senado, Rojo Edwards fue militante de RN, partido del cual se distanció luego de que no lo apoyaran en su primera candidatura senatorial por La Araucanía.

En ese mismo comité hoy está Carmen Gloria Aravena, quien fue electa por La Araucanía por cupo de Evópoli, para luego irse a RN y después llegar a republicanos.

Dentro de los 22 consejeros republicanos hay varios que también provienen de la UDI. De ahí, por ejemplo, salió electo uno de los fundadores de la colectividad, Antonio Barchiesi, quien fue el secretario general de la tienda de Kast en sus inicios.

También fue UDI el electo por la Región de O’Higgins Sebastián Figueroa, y el de la Región Metropolitana Jorge Ossandón. Otra que fue simpatizante gremialista es la consejera de Los Lagos, Beatriz Hevia.

En el Maule, el excomandante en jefe de la Fuerza Aérea Ricardo Ortega, si bien no proviene de Chile Vamos, sí fue uno de los dirigentes que trabajaron en la formación del Partido Nacional Ciudadano, que buscaba ser una alternativa de derecha.

La mayoría de los consejeros, en todo caso, viene del mundo ciudadano e independiente. En esa gama, por ejemplo, hay un doctor, un kinesiólogo, una profesora, abogados e ingenieros, entre otros.

A nivel de orgánica interna, también hay dirigentes de otras colectividades. El tesorero Claudio Osorio fue gremialista, en el comité electoral está el exdiputado y uno de los fundadores de republicanos Ignacio Urrutia, quien fue uno de los rostros emblemáticos de la UDI en el Parlamento. Asimismo, está la integrante del cabildo general, Marie Claude Mayo, quien fue gremialista, al igual que Francisco Leturia, que participa del comité electoral de los republicanos.

En 2016, cuando Kast renunció a la UDI, también se desvincularon del partido otros militantes, como el consejero Francisco Castellón y el propio Leturia.