Esta semana, el jefe de bancada de los diputados de RN, Frank Sauerbaum, compartía sopaipillas con ají con un grupo de personas de la Región de Ñuble cuando un comentario captó su atención.

Uno de los presentes se quejaba abiertamente de que le molestaba pagar impuestos para que “se derrochara” en irregularidades como los millonarios traspasos de dineros a las fundaciones.

Sauerbaum tomó nota de que la crisis de lío de platas desatada por los convenios firmados entre el Ministerio de Vivienda y la Fundación Democracia Viva, vinculada a militantes de Revolución Democrática, ya era tema de comentarios populares.

En los últimos días, Chile Vamos inició una ofensiva de fiscalización que terminó en la apertura de varias investigaciones judiciales y que ya costó el cargo a la entonces subsecretaria de Vivienda, Tatiana Rojas. Por eso, en las próximas semanas la idea de la oposición es capitalizar al máximo la crisis que enfrenta La Moneda.

El tema es el foco de conversación de los parlamentarios que este lunes retoman sus actividades tras una semana distrital, por lo que se espera que se acentúe la ofensiva.

Dos son las opciones con las que Chile Vamos espera mantener las supuestas irregularidades sobre la mesa: ya se ingresaron las firmas para conformar una comisión investigadora en la Cámara de Diputadas yDiputados que incluso cuenta con votos de representantes de la izquierda, como Pamela Jiles y Karen Medina (PDG), y de centro, como Miguel Ángel Calisto (ex DC) y Felipe Caamaño.

La otra vía será definir la posibilidad de presentar una interpelación al ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, idea que ha ido fortaleciéndose.

Por el lado de republicanos, en tanto, este viernes se anunció la presentación de la censura a la mesa que preside Vlado Mirosevic y de la que ya debió alejarse la diputada Catalina Pérez (RD), epicentro del escándalo de las platas.

“El despilfarro de recursos públicos hace mucho más fácil negarse hoy día a una subida de impuestos. No hay disposición ni de la ciudadanía ni de la oposición para llegar a una reforma tributaria que aumente los impuestos”, dice Sauerbaum.

La derecha ya había logrado dar fuertes embestidas a las reformas estructurales del gobierno tras las derrotas consecutivas del plebiscito del 4 de septiembre y las elecciones del 7 de mayo, donde se definió la conformación del nuevo Consejo Constitucional. El golpe de gracia había sido el rechazo a la idea de legislar la reforma tributaria producido el 8 de marzo.

La crisis por el lío de platas -sostienen en Chile Vamos- fortalece aún más la postura opositora, debido a que el análisis que se hace internamente es que la debilidad del gobierno ya comienza a manifestarse nuevamente en la opinión pública.

En las próximas semanas las negociaciones deberían endurecerse. Una prueba de ello es que este viernes 30 de junio los diputados RNintegrantes de la Comisión de Trabajo se juntaron con los ministros de Hacienda, Mario Marcel, y del Trabajo, Jeannette Jara, para negociar la reforma tributaria.

Antes de iniciar la reunión los diputados trasmitieron a la secretaria de Estado que le estaban haciendo “un favor” al sentarse a la mesa con ellos.

El mismo impulso plantea tomar Chile Vamos respecto de la agenda de seguridad. En la oposición resienten lo que denominan un congelamiento de las conversaciones y -por lo mismo- buscarán que La Moneda cumpla los proyectos comprometidos.

La idea es negociar con el gobierno que se saquen adelante algunas iniciativas sobre este ámbito, dando a entender que es el Ejecutivo el que debe ceder al estar en una posición más debilitada por la crisis. “Vamos a ir condicionando las relaciones con el gobierno”, dice un diputado en privado.

Desde la UDI, RN, Evópoli y el Partido Republicano ya se encuentran trabajando en las elecciones municipales del 2024. De acuerdo a los cálculos iniciales, el cuadro oficialista está duramente resentido por las sucesivas crisis de gestión que ha enfrentado el gobierno de Boric, la que se ha acentuado en los últimos días con el lío de las platas. El esfuerzo -entonces- se concentra en intentar recuperar las comunas emblemáticas que perdieron en 2021, como Santiago, Maipú, Ñuñoa y Viña del Mar. en manos del PC y el Frente Amplio.

En la derecha buscarán arremeter particularmente contra la marca del Frente Amplio, buscando recalcar que esa coalición se jactaba de no tener malas prácticas como la vieja clase política, pero hoy está vinculada en un caso que los mismos dirigentes oficialistas califican de “corrupción”.

Además, desde los partidos recalcan que es más fácil buscar candidatos en las condiciones actuales, pues los dirigentes de derecha sostienen que se fortalece la posibilidad de elegibilidad.