Econciencia: Certificaciones simples
Sábado 26 de enero de 2019, N°820
En un artículo anterior se comentó sobre la simplicidad como pauta para ser eficiente y sustentable: complicarse menos es la meta. En este orden también podrían orientarse las casas energéticamente eficientes. Actualmente las certificaciones energéticas son tan complejas, se piden tantas variables haciéndolas difíciles y costosas de categorizar (estudios, certificador, documentos, pago de la entidad que otorga el certificado y algunos años después, actualización del trámite).
Esto puede ser mucho más simple, es cosa de cumplir con lo indicado en la Reglamentación Térmica (existe y esto lo visa la municipalidad): contar con equipos de climatización eficientes (esto existe, en Europa tienen que ser calderas de condensación, no hay opción, todas son de bajo CO₂); tener artefactos sanitarios eficientes con el agua (ya casi no existen los otros); tener iluminación led (ya no hay ampolletas de filamento); materiales tipo ecológicos o de fácil mantención (ya existen, ya hay conciencia, de hecho las pinturas no tienen plomo, ya no se usa el asbesto); los escombros se deben botar en vertederos autorizados (los camioneros oficiales ya lo hacen); entre otras muy fáciles de subsanar con un arquitecto responsable.
Luego, hay otras que se refieren a variables más subjetivas, como la temperatura interior, no es necesario estar entre 18 y 22 ºC al interior (¿qué pasa si el dueño usa chaleco adentro? ¿o toma agua con hielo en verano?); el acceso solar también debe ser voluntario (hay gente que le encanta la penumbra, a otros por el contrario buscan mucha luz); controles de temperatura (mejor sea astuto, apague o prenda según su necesidad y recursos); la reducción de ruidos internos (dé las instrucciones adecuadas a su familia, no contrate a nadie para que se lo diga); ventilación (lo mismo, ventile cuando lo estime y no que un asesor o una tabla se lo diga); forma del edificio (es obvio que mientras más compacto, mejor, pero si el terreno no lo permite, o por temas de vistas, estilo u otro usted no lo quiere, no lo haga); si quiere ponerle techos verdes es cosa suya; si quiere tener colectores solares para agua caliente o fotovoltaicos, también (es cosa suya si quiere bajar el consumo de ese modo o reducirlo en forma directa: duchas cortas, menos TV y acuéstese temprano); recuerde que los seres humanos somos todos distintos, no somos una media en un programa de certificación.
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