Costa Rica vota dividida y sin mayor entusiasmo

La segunda vuelta presidencial de Costa Rica, en la que los votantes elegían entre un candidato de centroizquierda y un evangélico conservador, transcurría hoy con normalidad, sin incidentes significativos y con poco ambiente en las calles.

Las juntas receptoras de votos abrieron a las 06.00 y cerraban a las 18.00 (21.00 hora de Chile).

El Tribunal no registraba anomalías en el proceso y ha recibido 80 denuncias por incidentes menores relacionados a propaganda, rampas de acceso para discapacitados, permisos laborales para salir a votar y la falta de algún crayón de los que se utilizan para emitir el sufragio.

En las calles de San José se apreciaba poco ambiente electoral, lo que se repetía en otras zonas del país, lo que contrastaba con el tumulto de gente que recibió a ambos candidatos en sus centros de votación.

El candidato del evangélico Partido Restauración Nacional, Fabricio Alvarado, emitió su voto en su localidad natal de Desamparados, en el sector sur de San José, en donde hizo un llamado a la gente para que asista a las urnas. "Esta es la democracia, la democracia es poder expresar lo pensamos y sentimos, esta es la fiesta que vivimos, al final esto es lo que hace a ese país tan bello (...).

Salgamos a votar por un país que necesita cambios, vayamos a votar, no respondamos insultos ni ofensas", afirmó.

Fabricio Alvarado es un predicador evangélico, elegido diputado para el período 2014-2018 -cargo que debió abandonar para lanzarse a la Presidencia, y ejerció un tiempo como periodista de televisión.

Por su parte, el candidato del oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC), Carlos Alvarado, de tendencia de centroizquierda, emitió su voto en un centro educativo de la comunidad de Pavas, en el oeste de San José, e hizo un llamado a los costarricenses a que salgan a emitir el sufragio. "Estoy muy orgulloso de ser costarricense, amo a este país y estoy orgulloso de esta fiesta democrática", afirmó.