Delegación israelí de seguridad de alto rango está en Doha para conversaciones sobre Gaza

Una delegación de seguridad israelí de alto nivel llegó el domingo a Qatar para mantener conversaciones sobre un acuerdo de alto el fuego y sobre la liberación de rehenes en Gaza, dijo un portavoz del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en una posible señal de que se acercan acuerdos hasta ahora esquivos.

Qatar y los otros mediadores, Egipto y Estados Unidos, están redoblando sus esfuerzos para alcanzar un acuerdo que ponga fin a los combates en el enclave y libere a los 98 rehenes que permanecen retenidos allí antes de que el presidente electo Donald Trump tome posesión de su cargo el 20 de enero.

La oficina de Netanyahu dijo el sábado que la delegación incluye al jefe del Mossad, David Barnea, al jefe del servicio de seguridad interior Shin Bet, Ronen Bar, y al jefe militar de información sobre rehenes, Nitzan Alon.

El enviado de Trump a Oriente Medio, Steve Witkoff, se reunió el sábado con Netanyahu, después de haberse entrevistado el viernes con el primer ministro qatarí, el jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani.

Funcionarios israelíes y palestinos han dicho desde el jueves que se han hecho algunos progresos en las conversaciones indirectas entre Israel y el grupo militante Hamas, pero no dieron más detalles. Las partes han mantenido un estricto hermetismo sobre los detalles en los que se está trabajando.

No está claro cómo van a salvar una de las mayores diferencias que han persistido en anteriores rondas de conversaciones: Hamas exige el fin de la guerra, mientras que Israel afirma que no pondrá fin a la guerra mientras Hamas gobierne Gaza y suponga una amenaza para los israelíes.

Israel lanzó su asalto a Gaza después de que combatientes de Hamas asaltaron sus fronteras en octubre de 2023, matando a 1.200 personas y tomando más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.

Desde entonces, más de 46.000 personas han muerto en Gaza, según las autoridades sanitarias palestinas, y gran parte del enclave ha quedado arrasado y sumido en una crisis humanitaria, con la mayoría de su población desplazada.