Trump dice que EE.UU. “se está yendo al infierno” y acusa que con su procesamiento se busca interferir en las elecciones de 2024

“El único crimen que he cometido es defender sin temor a nuestra nación de quienes buscan destruirla”, aseguró el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en su discurso desde su propiedad de Mar-A-Lago en Florida, tras ser procesado este martes en un tribunal de Nueva York.

Trump, acompañado de sus familiares y una multitud de seguidores que acudieron hasta su mansión, manifestó que “nunca pensé que algo así podría suceder en Estados Unidos”, al referirse al juicio por 34 cargos penales, entre ellos el presunto pago a la actriz porno Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels, para acallar la divulgación de encuentros íntimos con él antes de las elecciones estadounidenses de 2016.

El exmandatario se abrió paso entre sus partidarios para llegar al escenario y compartir sus primeras declaraciones tras comparecer ante la Fiscalía neoyorquina.

Entre los asistentes se encontraban Donald Trump Jr., Kimberly Guilfoyle, Tiffany Trump y su esposo, y los congresistas Matt Gaetz y Marjorie Taylor Greene.

Trump se mostró desafiante, refiriéndose, entre otras cosas, a sus dos juicios políticos durante su presidencia. Calificó la acusación de la Fiscalía de Nueva York como la última de una “avalancha de investigaciones fraudulentas”.

En otro pasaje de su discurso calificó de “ridícula” la imputación, porque “no hay ningún delito en mi contra”.

Añadió que los fiscales “están haciendo una persecución política”. Al respecto afirmó que ha sido víctima de una interferencia electoral y arremetió contra el fiscal de Nueva York, Alvin Bragg, por presentar cargos penales en su contra.

“Este falso proceso fue presentado sólo para interferir con las próximas elecciones de 2024 y debe ser retirado inmediatamente”, aseveró.

El expresidente Trump también mencionó las elecciones presidenciales de 2020, habló sobre el actual presidente Joe Biden y afirmó que “nuestro país se está yendo al infierno”, ante lo que sus partidarios aplaudieron con gran entusiasmo.

Trump también hizo comentarios sobre el magistrado Juan Merchan -quien preside el caso judicial del exgobernante- y su familia como “un juez que odia a Trump, con la esposa y la familia que odian a Trump y cuya hija trabajaba para Kamala Harris”, la actual vicepresidenta de los Estados Unidos.

Merchan solo unas horas antes le dijo al exmandatario y a los posibles testigos que debían abstenerse de hacer declaraciones que puedan incitar a la violencia.

Asimismo, Trump tuvo también palabras para la situación internacional, mencionando que bajo su mandato, “Rusia invadiendo Ucrania” nunca habría ocurrido.

“Hay una gran nube oscura sobre nuestro país, pero no tengo ninguna duda de que haremos a Estados Unidos grande otra vez”, finalizó el expresidente, en un discurso de 25 minutos, interrumpido numerosas veces por los aplausos y vítores de sus simpatizantes, o los abucheos cada vez que mencionaba a Biden, a los demócratas y, especialmente, a los encargados de llevar su caso judicial.