Embajador de Argentina en Bolivia afirma que salida de Morales no fue un golpe de Estado y marca contraste con presidente electo
La situación en el país andino marcó un nuevo quiebre entre el gobierno saliente de Mauricio Macri y el mandatario electo Alberto Fernández, quien habría solicitado enviar una declaración conjunto el día domingo tras la dimisión del jefe de Estado paceño.
Un nuevo quiebre se vivió entre el oficialismo argentino de Mauricio Macri y el presidente electo Alberto Fernández durante las últimas horas a raíz de la renuncia de Evo Morales (Bolivia) el día domingo.
Una de las discusiones más recientes, fue protagonizada por Normando Álvarez García, el embajador argentino en Bolivia, quien en entrevista con radio La Red de Buenos Aires aseguró que, "no hubo un golpe como estamos acostumbrados". Sino más bien, "fue una interrupción del orden constitucional, pero en base a la gran conmoción social".
Según explicó, Álvarez García, dicho descontento socia se debió a las denuncias de la oposición boliviana sobre las supuestas irregularidades en las elecciones del pasado 20 de octubre, que terminaron que la solicitud de repetir el proceso de parte de organismos internacionales como la OEA.
La postura de diplomático, contrasta con la del presidente electo, Alberto Fernández, quien señala que en Bolivia se consumó un golpe de Estado y compartió en su cuenta de Twitter el mensaje de una parlamentario del oficialismo, Daniel Lipovetzy, quien aseguró que el hecho que las "Fuerzas Armadas 'recomiendan' (léase obligan, exigen) la renuncia de un presidente elegido democráticamente" constituye un golpe de Estado.
En ese sentido, el exjefe de Gabinete de Néstor Kirchner indicó que las palabras del parlamentario lo "tranquilizan" agregando que "hay gente con la dignidad democrática de la que otros carecen".
https://twitter.com/alferdez/status/1193878819058401280
De acuerdo al diario transandino La Nación, el mandatario electo le solicitó a Macri redactar una declaración en conjunto condenando la sucedido en Bolivia. Sin embargo, ello no ocurrió.
Este lunes, tras la reunión de gabinete en la Casa Rosada, el mandatario argentino habló escuetamente sobre la sucedido: "Todos estamos preocupados por Bolivia", indicó.
Por su parte, el canciller transandino Jorge Faurie, aseguró que La Paz vive un "impasse" y añadió que no están los elementos para describir esto como un golpe de Estado".
Además, agregó que Morales no solicitó asilo político a Argentina como se había especulado anteriormente.
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