Gobierno boliviano anuncia que el primer juicio oral contra expresidenta Áñez será la “próxima semana”

El ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, ha anunciado este miércoles que el primer juicio oral contra Jeanine Áñez por su autoproclamación como presidenta, en el marco del caso conocido como ‘Golpe de Estado II’, se celebrará la “próxima semana”.

“En base a las investigaciones realizadas, y también por el pedido de justicia del pueblo boliviano, (...) informamos a la opinión pública de que la señora Jeanine Añez”, así como antiguos alto mandos militares y de la Policía, “ingresarán a la etapa de juicio oral dentro del caso ‘Caso Golpe II’ (...) por haber actuado en contra de la Constitución” en noviembre de 2019, ha señalado Del Castillo en su perfil de Facebook.

“En términos simples, lo que hizo la exsenadora fue autoproclamarse en presencia de medios de comunicación y representantes diplomáticos, sin cumplir con las formalidades establecidas en la Constitución y la ley”, ha recordado Del Castillo, quien ha explicado que las prueba presentadas por Áñez han sido rechazadas pues “no corresponden en el presente proceso”.

“Es importante mencionar que la señora Añez ha ofrecido como pruebas (...) documentación que corresponde a otros procesos judiciales, como el de fraude electoral (caso hoy cerrado con autoridades sobreseídas) o el caso por terrorismo, sedición y conspiración (conocido como Golpe I)”, ha acotado.

Además de Áñez hay otras diez personas, entre ellos antiguos comandantes y miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía de Bolivia, acusados de incumplimiento de deberes y de vulnerar la Constitución. Se trata de un epígrafe del caso ‘Golpe de Estado I’, que investiga la implicación de estos y otros sospechosos en delitos de sedición, conspiración y terrorismo, durante la crisis política de noviembre de 2019 que provocó la salida del expresidente Evo Morales del país.

Áñez permanece en prisión preventiva desde el 15 de marzo de 2021, a medida que avanza la investigación en su contra. Desde su entrada en el penal de Miraflores, en La Paz, tanto ella como su familia han denunciado su precario estado de salud, llegando incluso a alertar sobre un supuesto intento de suicidio.

En octubre de 2021, la defensa de Áñez sufrió un nuevo revés cuando la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) rechazó una solicitud una solicitud de medidas cautelares después de determinar que el Estado boliviano ha velado en todo momento por la salud de la detenida.