De acuerdo al diario La Nación, los monarcas españoles llegaron cerca de las 21.00 horas al aeroparque Jorge Newbery en la capital argentina, pero recién a las 22.00 horas fue posible que bajaran de la aeronave tras conseguir una escalera con el tamaño apropiado.

Incluso, según consignó El País, se consideró que el avión volviera a volar y se dirigiera al aeropuerto internacional del Ezeiza. Como segunda opción se barajó solicitar la escalera del avión que utiliza el presidente Mauricio Macri, pero para acceder a ella es necesario usar la huella dactilar de una persona en especifico y no fue posible contactarla.

Finalmente, fue autorizada el uso de gradas presidenciales y con ello fue posible comenzar el descenso.

En tanto, la comitiva que debía recibir a los representantes de la corona esperaban parados en el recinto con dudas. Tras este tropiezo, el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Jorge Faurie, y los embajadores Ramón Puerta y Javier Santodomingo recibieron a los monarcas.

Felipe VI y Letizia se reunirán en la Casa Rosada y también tienen programadas actividades en Córdoba.