Presidente de Perú elogia a jóvenes prodemocracia en acto por bicentenario de la independencia

El nuevo presidente peruano, Francisco Sagasti, elogió este viernes a los jóvenes que defendieron la democracia durante la reciente crisis política que acabó llevándolo al poder, en el marco de una ceremonia por el bicentenario de la primera proclama de la independencia del dominio español.

“Es la primera vez que salgo de Lima en mi calidad de presidente y lo hago en un contexto de patriotismo activo en el que millones de peruanos, entre los que destacan los jóvenes, han demostrado que están dispuestos a defender la patria”, dijo Sagasti, evocando el primer grito libertario del general argentino José de San Martín.

Sagasti habló en un acto en Huaura, 160 kms al norte de Lima, desde donde San Martín lanzó un 27 de noviembre de 1820 la primera proclama por la independencia peruana al mando de la expedición libertadora.

“Los jóvenes están dispuestos a independizarse del autoritarismo, la corrupción y la mala política”, agregó al remitirse a las protestas masivas que forzaron la renuncia del efímero presidente Manuel Merino el 15 de noviembre.

Sagasti, un centrista de 76 años, enfatizó que la juventud ganó las calles “protestando contra lo que fue un ataque a nuestra democracia”.

El presidente accedió al poder el 17 de noviembre tras la crisis política que causó el 9 de noviembre la destitución por el Congreso de Martín Vizcarra.

Manuel Merino, entonces jefe del Congreso, reemplazó a Vizcarra, pero una multitudinaria protesta popular forzó su renuncia y sustitución por Sagasti.

Las protestas dejaron dos muertos y más de un centenar de heridos por la represión policial, según las autoridades.

El gobernante -nieto de un héroe de la guerra con Chile en 1879- recordó que Perú atraviesa “uno de los momentos más críticos y aciagos” de su historia por la pandemia y la profunda recesión, la peor crisis económica en más de un siglo.

Con 33 millones de habitantes, Perú registra más de 956.000 casos del virus, la quinta cifra más alta de América Latina, mientras que sus 35.780 decesos representan la segunda mayor tasa de mortalidad del mundo en proporción a su población.