A los hechos que se registraron el pasado sábado al interior del Instituto Nacional y la jornada del martes en el frontis del Liceo de Aplicación, hoy se suman nuevas denuncias que involucran, supuestamente, a alumnos del Liceo Barros Borgoño.

De acuerdo a la versión entregada por apoderados del mencionado recinto, ubicado en calle San Diego, un grupo de encapuchados vestidos con overoles rociaron bencina a algunos funcionarios, amenazándolos con quemarlos. Lo que encendió las alarmas.

Primero fueron las tomas y ahora, erradicar la violencia en los establecimientos educacionales es su consigna. Se trata de un grupo de apoderados de siete liceos emblemáticos de la Región Metropolitana, que se han organizado para hacer frente al movimiento de los overoles blancos. Son, "No Más Tomas".

Raquel Guerra, apoderada del Internado Nacional Barros Arana y participante de la agrupación, cuenta que la violencia se "ha ido incrementando desde el año pasado. Allí esto comenzó a hacerse más fuerte y a denotar un grado de organización mayor. Nosotros como apoderados creemos que hay adultos detrás de esto, porque es insólito que estudiantes tengan tal poder adquisitivo como para comprar overoles, bencina y máscaras especiales para evitar las bombas lacrimógenas".

Como agrupación ya han tenido reuniones con autoridades, e incluso han impulsado un proyecto de ley en contra de las tomas y la violencia. Sin embargo, también han tomado otras determinaciones. "Cuando sabemos que van a haber disturbios -porque esto se avisa días previos por redes sociales- nosotros hemos venido con nuestro lienzo de 'no más violencia' a manifestarnos también", explicó.

Pero doblegar a la violencia no ha sido fácil, dice. Guerra, cuenta que incluso ha recibido amenazas por redes sociales. "Nos han amenazado directamente con quemarnos a través de redes sociales", afirmó.

Como apoderados piden medidas inmediatas para resguardar la seguridad de sus hijos. A su juicio, aumentar el control policial al ingreso y promover la expulsión inmediata de los alumnos que sean sorprendidos en este tipo de actos, es la única solución.

"Sentimos incertidumbre, pero es un riesgo que estamos dispuestos a correr, porque nuestros hijos quieren aprovechar todas las herramientas educativas que les puede entregar un liceo emblemático", puntualizó.

Durante la mañana, también, efectivos policiales llegaron hasta el Liceo de Aplicación, donde, según la información policial entregada, 50 individuos se dispusieron en la calzada interrumpiendo el tránsito vehicular.

En ese lugar, además, cinco jóvenes fueron detenidos por lanzar objetos contundentes y elementos incendiarios tipo molotov.

Más tarde, tras otro llamado de emergencia, carabineros concurrió hasta Avenida España con calle Claudio Gay, donde se ubica el Liceo Darío Salas. Ahí, un grupo de 20 alumnos interrumpió el tránsito. Entre los manifestantes, como se indicó, se detectaron siete encapuchados que portaban artefactos incendiarios y habrían lanzado objetos contundentes.

Los hechos, cabe recordar, se dan luego de que el gobierno confirmara que enviará al Congreso un Proyecto de Ley que permita a los directores de establecimientos de educación contar con herramientas más eficaces al momento de enfrentar hechos de violencia grave.