Expertos reaccionan a nuevas medidas por aforos: Afirman que era necesario un cambio y coinciden que hay que relacionarlo con la vacunación

La ministra de Salud, María Begoña Yarza, confirmó este viernes los cambios en las restricciones de aforos que sufrirá el Plan Paso a Paso, los que se implementarán a partir del próximo jueves 25 de agosto.

“No quiere decir que se acabó la pandemia, hay que ser enfáticos, la pandemia sigue, pero hoy tenemos condiciones que nos permiten ir adquiriendo más libertades como sociedad”, afirmó Yarza.

Acompañada de las ministras de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Julieta Brodsky, y de Deportes, Alexandra Benado, y durante el habitual punto de prensa para informar sobre la situación de la pandemia a nivel nacional, Yarza explicó que cada aforo se determinará en proporcionalidad a la capacidad de cada recinto. Este nuevo criterio, no obstante, sólo regirá para los comunas que se encuentren en la fase de medio impacto sanitario.

Así, en recintos abiertos el aforo podrá llegar hasta el 85% de su capacidad normal, mientras que en lugares cerrados hasta el 75%.

El resto de los escenarios sigue igual. En la etapa de bajo impacto sanitario se podrán realizar reuniones en espacios sin restricciones de aforo ni distancia física, pero todas las personas deberán mostrar su Pase de Movilidad. Mientras que en la fase de alto impacto sanitario se permitirá realizar eventos masivos con un aforo máximo de hasta 200 personas, supeditado al uso de mascarilla y a la exigencia del pase. Eso sí, los aforos específicos quedan sujetos al metraje del lugar.

Jaime Labarca, jefe de infectología de la Red de Salud UC Christus afirma que ya era hora de revisar esta medida: “Los aforos son muy importantes para regular la asistencia de público a lugares donde podía haber un contagio importante entre las personas. A veces, para un mismo lugar, se fueron tomando distinto aforos dependiendo las actividades. Entonces, lo que ha pasado es que el último tiempo nos hemos encontrado con algunas políticas que no son concordantes con otras. Por ejemplo, la política de fútbol no conversa con la de espectáculo en el mismo estadio, pues para el evento deportivo había un aforo y para un concierto había otro, aunque fuera el mismo lugar, entonces era necesario reformar esta política”.

Actualmente, el 70% de la población objetivo se ha vacunado con el segundo refuerzo (cuarta dosis). Según los datos del Ministerio de Salud, actualmente hay 1.618.321 personas que están atrasadas con su tercera dosis, y 1.899.468 con la cuarta. Es decir, hay casi 3,5 millones de dosis rezagadas y, por consiguiente, más de un millón y medio de personas con el Pase de Movilidad bloqueado.

En ese contexto, Luis Castillo, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la U. Autónoma y exsubsecretario de Redes Asistenciales, destaca que es una buena medida supeditar los aforos a la vacunación: “Para espacios cerrados y dada la alta cantidad de personas que todavía falta por vacunar con la cuarta dosis, es más de un millón de personas, es fundamental contar con las medidas para cortar la transmisión viral y protegernos. Es una medida razonable relacionar el aforo con los pases”.

Si bien está de acuerdo con la medida adoptada por el Minsal, Gabriel Cavada, epidemiólogo y académico de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile, sostiene que lo más relevante es que la decisión debe ir amarrada con el aumento de la vacunación.

“En ese sentido, me pareció más relevante la declaración que hizo el presidente de Colo Colo, que dijo que iba a incentivar al pueblo colocolino y que si querían ir al estadio tenían que estar vacunados. Esa declaración fue más clara que lo anunciada por la ministra”, manifiesta Cavada.

En Norteamérica y Europa, la gran mayoría de los países no presenta restricciones. En América del Sur, Asia y Oceanía, existe la obligación de uso de mascarilla en este tipo de eventos con limitaciones al aforo, como por ejemplo sucede en Perú, Colombia, Nueva Zelanda y Singapur. Sin embargo, el resto no cuenta con restricciones.

Así, Chile es de los pocos países que aún es muy estricto respecto a medida de asistencia de público. Este punto preocupa tanto al mundo de las artes como al del deporte, pues la limitación a los eventos les ha ocasionado múltiples dolores de cabeza. De hecho, desde hace meses que se están realizando gestiones para flexibilizar los aforos.

La próxima semana parte una intensa temporada de conciertos, con shows en el Movistar Arena, el Bicentenario de La Florida y el Estadio Nacional, con casi la totalidad de sus boletos vendidos. Hasta antes del anuncio, el aforo para eventos masivos en la fase de Medio Impacto Sanitario se había fijado en 10 mil personas sin importar la capacidad del recinto, lo que hacía peligrar la realización de algunos de esos espectáculos.