Índice Paz Ciudadana: victimización sigue al alza y miedo a sufrir un delito registra nivel histórico
Un 30,5% de los consultados manifestó sentir temor a ser víctima de un delito. Es la cifra más alta desde que se inició el registro, hace 23 años.
La victimización continúa al alza y el temor a sufrir algún delito creció a su mayor nivel en 23 años. Así lo refleja el Índice Paz Ciudadana 2023, medición que da cuenta de la situación delictual en el país.
La encuesta, que tiene como objetivo “obtener información sobre la victimización, la reacción frente al delito y la percepción de temor de la población”, se realizó entre el 14 de agosto y 12 de septiembre de 2023. Mediante entrevistas, tanto telefónicas como presenciales, se consultó a hombres y mujeres mayores de 18 años. En total, se consideró un universo muestral de 1.863 casos totales.
En cuanto a los resultados, en el ítem “victimización”, en el 36,6% de los hogares chilenos algún miembro fue víctima de robo o intento de robo en los últimos seis meses. Esto, representa un aumento de 3,9 puntos porcentuales respecto de la medición del 2022 y “refuerza la tendencia al alza que se ha registrado postpandemia”, se informó. De hecho, desde 2020 que la curva ha ido subiendo en esta pregunta.
En ese sentido un 69% señaló que el delito fue consumado y un 31% que se trató de un intento de robo. Un 73% señaló que los robos habían sido violentos y un 27% no violento. La mayoría de los delitos ocurrieron fuera del hogar (90%).
En el detalle, en Santiago, la victimización creció a 39,3%. En cuanto a la diferenciación por nivel socioeconómico, fue mayor en el segmento bajo, donde aumentó 8,2 puntos porcentuales alcanzando un 37,8%.
Por otro lado, en cuanto al nivel de personas con temor alto al delito, la cifra llegó a 30,5% a nivel nacional, la cifra más alta desde que se inició el registro hace 23 años. El año pasado la cifra llegó al 28%, lo que representa un crecimiento de 2,5 puntos porcentuales. Esta consulta considera aspectos de percepción pública y también en una dimensión “afectiva o emocional”.
En el detalle, se registran leves bajas ante algunas consultas. Por ejemplo, un 65,3% señaló percibir una variación de la delincuencia en su comuna. En esa pregunta, el año pasado la cifra fue de 68,4%. En otra pregunta, un 72% dijo percibir una variación en la violencia de la delincuencia en su comuna, mientras que en 2022 fue un 72,6%. Finalmente, un 57,5% prevé que aumentarán los delitos en su comuna en los próximos 12 meses. El año pasado fue un 60,8%.
La mayor cantidad de temor se registró en las mujeres con un 35,6%, mientras que los hombres fue un 25,1%. En cuanto a la diferencia por nivel socioeconómico, es el estrato más bajo el que se siente más atemorizado (34,6%).
En otro ítem, la encuesta aborda las denuncias tras los delitos. En ese apartado se señala que un 52,8% de las personas que fueron víctimas hicieron la denuncia. “Este es el cuarto nivel más bajo de la serie de 12 años que estamos presentando, por lo tanto es un valor relativamente bajo en el instrumento y es una situación deseable de mejorar. Esto deja con menos información al sistema para hacer una persecución e incluso una prevención más efectiva”. Asimismo, el 54% dijo haber quedado “insatisfecho” con el actuar de Carabineros tras hacer la denuncia. El año pasado fue un 50% el que manifestó esa insatisfacción.
Finalmente se hizo una consulta en cuanto a la evaluación ciudadana de ciertos organismos públicos. Allí se pidió calificar de 1 a 7. Ninguna de las instituciones superó la nota 5. La Policía de Investigaciones obtuvo un 4,7, Carabineros un 4,4, Gendarmería un 4,0, los alcaldes un 3,7, el gobierno un 3,2, los tribunales un 3,0, la Defensoría un 2,8, el Ministerio Público un 2,7 y finalmente, el peor evaluado, el Congreso con un 2,2.
El director ejecutivo de la Fundación Paz Ciudadana, Daniel Johnson, señaló: “Chile está viviendo tiempos complejos. Hay un incremento del delito y las familias con un nivel de temor alto a ser víctimas de un delito vuelven a aumentar, alcanzando el mayor nivel desde que tenemos registros. Esto es preocupante porque la inseguridad afecta el comportamiento de las familias, impidiéndoles disfrutar de beneficios que la ciudad ofrece”.
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