Vocera de la Corte Suprema y aprobación del pleno de la Convención de reducir edad de jubilación de los jueces: “Cambios de esta especie es importante que sean graduales”

Esta mañana, la vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, abordó el trabajo de la Convención Constitucional y se refirió a los cuestionamientos que hizo la semana pasada la ministra del Interior, Izkia Siches, al sistema judicial.

Respecto a la propuesta de eliminar la figura de fiscal nacional, reemplazándolo por un Consejo Superior, medida que aprobó el lunes la comisión de Sistemas de Justicia del órgano constitucional, Vivanco reiteró que el Ministerio Público “es un órgano autónomo”.

“En consecuencia no es dependiente del Poder Judicial, tiene una función distinta de acuerdo al procedimiento penal actual en relación a los jueces. Pero sí a nosotros -sea que este organismo esté presidido por una persona o por un consejo- nos parece lo más importante de todo que se mantengan las condiciones de responsabilidad”, destacó la ministra en radio Concierto.

En cuanto a la aprobación por parte del Pleno de la Convención al cambio en la edad de jubilación de los jueces de 75 a 70 años, la ministra Vivanco indicó que “cambios de esta especie es importante que sean graduales”, porque si se aplicara de manera inmediata esa regla, más de 400 jueces quedarían inmediatamente afuera, y otros 60 en un lapso de 5 años.

“O sea, son más de 450 jueces los que se tendrían que ir. El punto es que esto es un impacto muy grande, porque la capacidad del sistema, de cualquier sistema, no solo de este, para reemplazar esa cantidad de jueces es de palabras mayores. Nombrar un juez es un tema complejo, es un tema que tiene pasos y no es un asunto de sacar y reemplazar en dos minutos”, sostuvo.

“Eso va a afectar sin duda la actividad de la administración de Justicia, y por su puesto es decir que estas personas no se aprecia su experiencia, sino que más bien lo que se trata es tener jueces más jóvenes en momentos en que el país estamos privilegiando lo contrario, en que las personas de más edad puedan seguir trabajando, puedan seguir aportando”, añadió.

Por otra parte, en cuanto a los dichos de la ministra Siches, quien la semana pasada manifestó “ustedes han visto la mirada que hay hacia el sistema judicial chileno. Si yo pillo a una persona al lado de un evento, de un crimen y es en Las Condes, es rubio y tiene un apellido, no pasa nada”, Vivanco aseguró que lo que a la administración de justicia respecta, han hecho “exactamente lo contrario”.

“Tenemos un trabajo muy intenso desde hace ya tiempo justamente en el sentido de que no haya dos justicias, de que no haya ningún tipo de clasismo ni de sesgo de esta especie. Nosotros no compartimos que la sociedad chilena ni ninguna otra se divida entre rubios, morenos, ricos y pobres”, sostuvo.

“Yo creo que esos conceptos han sido superados por la sociedad chilena desde hace ya tiempo, y desde ese punto de vista, la administración de justicia en lo que a ella corresponde, hace muchos esfuerzos por superar desigualdades y sobre todo prejuicios, que son los más difíciles de superar, porque tienen que ver con bases culturales”, destacó.

“Si ha habido sesgos de esta naturaleza en detenciones o en otro tipo de situaciones, siempre se procura en los tribunales corregir esas desigualdades y justamente por eso ha sido nuestra insistencia en que contemos con un Poder Judicial independiente, justo para que se corrijan estas desigualdades y para que haya una justicia para todos, que es lo que cada chileno y cada persona merece, es parte de sus derechos”, añadió.

En cuanto al proyecto de amnistía para los denominados “presos del estallido” que se tramita en el Congreso, destacó que si es éste prospera, “es muy importante que se den los argumentos, porque la amnistía hace desaparecer no solamente la pena sino que el delito”.

“En consecuencia, es importante que los fundamentos sean fundamentos, que para todo el país sea una buena explicación de por qué sería una amnistía. Sobre todo, que vayan de la mano con la mantención del orden público, de la seguridad y por supuesto de los derechos fundamentales”, añadió.