"No queremos olvidar que ese dolor pudo ser evitado": Las reflexiones a un mes de la muerte de Ámbar
En conversación con La Tercera, el pediatra que la asistió en el Hospital San Camilo, Álvaro Retamal, anunció las medidas que han adoptado a fin de que no vuelvan a ocurrir sucesos como este.
Ayer se cumplió un mes de la muerte de la pequeña Ámbar, menor que con apenas 1 año y 7 meses falleció tras ser violentada sexualmente, presuntamente por la pareja de su tía en la comuna de Los Andes.
Tras lo ocurrido y luego de que el terrible caso hiciera reflotar la idea de restablecer la pena de muerte, el pediatra que la asistió en el Hospital San Camilo, Álvaro Retamal, anunció las medidas que han adoptado a fin de que no vuelvan a ocurrir sucesos como este, ya que "es buen momento para decir que no podemos ni queremos olvidar que ese dolor pudo ser evitado".
"Cuando hace un mes atrás dijimos que pedir pena de muerte para el asesino de Ámbar, era sólo un desahogo, pues la tarea era más grande y consistía en proteger a los niños. Así iniciamos un camino sin retorno, un camino que nos condujo a crear una organización que surja desde la comunidad, esta tarea ya está en curso, y se llamará Fundación A Cuidar", comentó el especialista a La Tercera.
Como explicó Retamal, dicha iniciativa tiene por objetivo "mantenernos cercanos a los niños en todos los espacios en los que sus derechos puedan ser vulnerados", pues como detalló, "importa no sólo que las leyes sean justas, sino muy especialmente que quienes tienen la obligación de cumplirlas y hacerlas cumplir lo hagan con compromiso y diligencia".
La fundación pretende cumplir el rol de observatorio ciudadano local con objetivos de capacitar monitores comunitarios, difundir la situación de los NNA en Aconcagua y contribuir a construir una nueva cultura frente a la infancia.
Además, buscan monitorear el correcto funcionamiento de los juzgados de familia y policías, apoyar y analizar el correcto funcionamiento de las organizaciones vinculadas al Sename en el Valle de Aconcagua, formar redes comunitarias para la detección e intervención precoz de situaciones de abuso, monitorear el correcto funcionamiento de los equipos de convivencia escolar, la operación efectiva de los protocolos de bullying, y el seguimiento y apoyo a víctimas y agresores, entre otras.
"Esperamos que nuestra organización que ya tiene nombre: A Cuidar, sea una organización abierta, en la que todos los que quieren colaborar puedan hacerlo. Necesitamos esa colaboración y compromiso", manifestó el pediatra.
De la misma forma, insistió en que "pese a todos los obstáculos, no estamos dispuestos nunca más a esperar con los brazos cruzados que otros se preocupen por los niños. No será el Estado separado de la comunidad el que podrá proteger la infancia, serán las leyes, serán las instituciones pero la comunidad debe mantenerse alerta".
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