Mascarillas, traslado en buses y solo: los movimientos del supuesto "ecoterrorista"

El 12 de enero de 2017 en Santiago se registró una máxima de calor de 38 °C. El clima era fuerte, casi imposible, dijeron los expertos esa vez. Ese mismo día, a las 11.34 de la mañana, ingresó a la oficina de Chilexpress, en San Joaquín, un hombre con mascarilla, pantalones largos, una polera, una camisa y un gorro. El atuendo era extraño por las altas temperaturas, pero no llamó la atención de nadie, salvo de dos mujeres que ese día compartieron un bus del transporte público con el principal sospechoso de seis atentados explosivos en la Región Metropolitana.

El hombre de la mascarilla, ese día habría enviado un artefacto explosivo al entonces presidente de Codelco, Óscar Landerretche, el cual detonó en la casa del ejecutivo el 13 de enero de 2017. El supuesto autor de este ataque, para la Fiscalía Sur y el OS-9 de Carabineros, es Camilo Gajardo Escalona (28), a quien este viernes se le formalizó por este y otros cinco hechos, entre ellos el atentado en un paradero del Transantiago en Vicuña Mackenna (enero) y el envío de una encomienda explosiva al presidente de Metro, Louis de Grange (mayo).

El atuendo que vestía Gajardo el día en que habría enviado la bomba a Landerretche era una especie de uniforme, según dicen fuentes del caso. Ello, pues en todos los ataques se desplazó con mascarilla para evitar que su rostro fuera registrado por cámaras de la vía pública y a la vez para no llamar la atención, pues así podía hacerse pasar por una persona enferma.

Así lo creyeron al menos cuatro testigos que lo identificaron. Según leyó el fiscal Claudio Orellana en la audiencia, una de las mujeres que compartió micro con él, el mismo día que envió el artefacto al expresidente de Codelco, dijo que "me llamó la atención porque usaba una mascarilla que le tapaba la mitad de su cara. Yo pensé que estaba enfermo, por el calor que hacía en ese momento".

Según expuso el fiscal Orellana en la audiencia, de acuerdo a los peritajes del equipo antibombas del OS-9 de Carabineros, una vez que el sospechoso envió el artefacto por Chilexpress abordó una micro, se cambió ropa dentro y antes de bajar, según señaló una pasajera, se sacó la mascarilla, el gorro y bajó en Av. Matta con Santa Rosa.

Esto se repitió en los seis casos: siempre en transporte público. Por ejemplo, en el caso de Vicuña Mackenna, las cámaras lo detectaron al subir en el Transantiago 203 en dirección al sur, lo que se repetía en los anteriores atentados.

Su última parada siempre era el sector sur, precisamente la Avenida Santa Rosa. Esto motivó a que los investigadores decretaran la zona de Bajos de Mena, en Puente Alto, como "zona roja y de interés". De esta manera, el OS-9 comenzó a cercar al sospechoso y sellar su caída (ver secundaria), la que se concretó con entrevistas a testigos, vecinos y con la comparación de restos de ADN.

Cada uno de estos antecedentes eran escuchados por Gajardo, quien solo respondió ante el magistrado "sí", cuando se le preguntó si entendía las imputaciones. Ante los fiscales guardó silencio.

La defensora del imputado, Alejandra Rubio, reclamó la ilegalidad de la detención. Señaló que se hicieron diligencias con él, sin presencia de un abogado.

En tanto, Orellana sostuvo que "todos estos antecedentes dan por establecida la existencia de todos y cada uno de los ilícitos por los que se ha formalizado, y la participación del imputado está justificada, más que suficiente la medida cautelar que se está solicitando, la prisión preventiva".

Según lo expuesto por la Fiscalía Sur, todos los delitos que se le imputan son de carácter terrorista, además de las de lesiones graves y daños. La imputación más grave es por homicidio calificado frustrado de carácter terrorista por Landerretche, De Grange, en el paradero de Vicuña Mackenna y en la U. de Chile. En total, el Ministerio Público le imputó nueve delitos de carácter terrorista.

Finalmente, el tribunal aceptó la solicitud de la fiscalía y decretó prisión preventiva para Gajardo, afirmando que resulta "necesaria y proporcional". La investigación fue fijada en 150 días.