18 Nuevas experiencias para este 18
Pastorear llamas con los atacameños, saborear recetas que ya no se preparan, bailar cueca porteña en una quinta de recreo, seguir las huellas de un puma, volar por las dunas en un todoterreno y más... A un mes de que comience el feriado más largo del año, algunas opciones para hacer algo diferente.
1. Viva como un atacameño
O parecido a uno. El verdadero San Pedro de Atacama se vive con los Lickarantay. Una comunidad con la que se puede salir a pastorear vicuñas, limpiar el maíz con la técnica del barro, conocer a Sandra y su vida junto a las llamas, observar estrellas en uno de los cielos más puros del mundo y visitar casas de lugareños conociendo sus cultivos y probando productos típicos, como el arrope de chañar. Una experiencia cercana y activa con comunidades ancestrales que se establecieron aquí mucho antes que San Pedro fuera un polo turístico del norte y que hoy sorprenden con su proyecto de ecoturismo comunitario.
El tour dura cuatro días y tres noches, comenzando el 15 de septiembre. Los grupos son pequeños, no más de 12 personas y hechos a la medida, asegurando así el contacto cercano con cada lugareño y el entorno, como si fueran sus primeros exploradores.
Los días transcurren de postal en postal: un asado de llama, juegos típicos y un paso de cueca improvisado en el ayllú de Coyo, un trekking junto a una caravana de llamas, una degustación de comida atacameña, una mañana en Socaire maravillados con los colores de la quínoa y, claro, panoramas más tradicionales como los géiseres del Tatio.
Absolutamente único.
2. Inaugure un hotel
No cortará la cinta, pero casi. Una copa de vino frente a la chimenea, relajarse en las tinas de agua caliente al aire libre y una partida de minigolf son algunos de los panoramas del recientemente inaugurado Mítico Puelo Lodge, a 165 km de Puerto Montt. Pero hay más: una cabalgata a la Viña Puelo, el segundo viñedo más austral del mundo, un recorrido por Llanada Grande, conociendo a los herederos de los primeros colonizadores y su estilo de vida, una relajante travesía en kayak por el Lago Tagua Tagua y un entretenido día de pesca con mosca en el río Puelo Alto son algunas de las actividades que se ofrecen.
El lodge se ubica en el Parque Tagua Tagua, un proyecto ideal para los amantes de la naturaleza, inaugurado a fines de 2012 y que cuenta con tres mil hectáreas de montañas, bosques milenarios de alerces, lagunas cristalinas y una red de humedales. El parque tiene un impresionante nivel de endemismo y en sus terrenos se encuentran pumas, cóndores, ranitas de Darwin, pudúes, monitos del monte y gran variedad de aves (http://parquetaguatagua.cl/).
El servicio de Mítico Puelo es full board e incluye un asado patagónico. Los precios van desde $ 160.000 por dos noches, con niños de hasta cuatro años gratis y con 70% off hasta los 10. Esto incluye el traslado desde el aeropuerto El Tepual. Reservas a info@miticopuelo.com y en www.miticopuelo.com.
3. Baile en una quinta de recreo
Aunque no lo crea, las quintas de recreo siguen vivas. Y en Valparaíso hay una que le permitirá vivir la experiencia de nuestros abuelos. Será un "tiquitiquití" a la vieja usanza, para olvidarse del ocho y la medialuna, con la cueca porteña que es más pausada y sensual o, como dicen los músicos, "más tir'á p'atrás" con cuatro estrofas y un remate. El lugar se llama la Quinta de Los Núñez. Un sitio para rescatar esta vieja tradición del puerto, que abrió sus puertas en septiembre de 2011 por iniciativa de la familia Núñez. Un lugar donde la bandera chilena ondea todo el año.
En esta verdadera "picá" estarán tocando los Viejos Crá de la Cueca junto al anfitrión Cristián "Catano" Núñez. El piso es de tierra, las gallinas casi salen a la pista de baile y las mesas, sillas, vasos y platos hablan de lo casero y familiar. La música, el ambiente relajado y los buenos "terremotos" son de antología. En un descanso puede asomarse y tener una perfecta vista sobre la bahía de Valparaíso.
Quinta de Los Núñez, calle Camila 119. Cerro La Loma, Valparaíso. Valor entrada $5.000. Reservas: Tel. (32) 2237029. Atiende: Mamá Lucinda. Facebook: Quinta de Los Núñez.
¿Cómo llegar? Ya sea desde Plazuela San Luis en Cerro Alegre o Plaza Bismarck con Subida Ecuador, a calle Camila se accede por Avenida Alemania. Bajando, a 100 m a la derecha entrar por pequeño callejón (no hay otro); abrir puerta de madera a la izquierda y bajar.
4. Tarde de quesos y calugas
Las calugas enloquecerán a los niños y los quesos a usted. La Lechería Los Maitenes de Marchigüe tiene preparada una Fonda Familiar para el viernes 20, donde el ambiente familiar está garantizado, atendidos por sus propios dueños. El día comienza a las 12.00 con un tour, donde se aprende a ordeñar una vaca y el proceso de fabricación de los quesos, el manjar y sus famosas calugas de leche, consideradas unas de las mejores del país. En la granja, los niños interactúan con conejos, patos, pavos, gallinas, alpacas y hasta avestruces. La segunda "patita" del día llega con la música, empanadas, pebre y buen vino. El almuerzo abre con un cordero lechón al palo y un asado al horno de barro; cierra con un despliegue de postres chilenos como leche asada, mote con huesillos y torta de milhojas. Cuando empieza la fiesta, no es sorpresa que surjan improvisados guitarristas y cuequeros, y para los niños siempre quedará el volantín que, si hay suerte, se encumbrará con un cielo azulísimo de fondo.
¿Cómo llegar? Por Panamericana Sur, pasa San Fernando y toma Ruta del Vino de Colchagua. Pasa de largo entrada a Santa Cruz y sigue en dirección a Pichilemu. Hasta Marchigüe son 37,7 km. Llegando a Marchigüe, toma el camino en dirección al norte y en 15 minutos está en Los Maitenes. Si prefiere, puede llegar desde Melipilla, por la Autopista del Sol, Ruta 78.
Lechería Fundo Los Maitenes, Ruta H-76, Marchigüe. Horario: de 12 a 18. Valor adultos: $ 30.000; niños: $ 15.000. Reservas al mail: granja@lechemaitenes.cl, cel. 963208121.
5. ¿No le gusta el 18? Aíslese
Y, claro, tiene razón. Eso de las cuecas, la cumbia, el olor a asado en el ambiente, la multitud en modo "celebración" no es para todos. Imagine despertar en la mañana con el canto de las aves y el sonido del viento agitando las hojas al lado suyo. Tomar desayuno en una terraza, junto a los sonidos y olores del bosque, mientras contempla sin prisa el azul intenso del mar. Suena placentero, ¿no?
El eco-lodge Tree House ofrece esta oportunidad para descansar, conectarse con la naturaleza y meditar, tal y como si fuera el 18 de septiembre... pero en el Tíbet. Como su nombre lo dice, el Tree House simula un nido colgante y gracias a esta curiosa forma arquitectónica la intervención del espacio natural es mínima, permitiendo una relación mucho más íntima con el bosque. Cada nido cuenta con tres niveles (living, dormitorio y terraza mirador), están totalmente equipados y se abastecen de energía con paneles fotovoltaicos.
En las cercanías se encuentra la fotogénica playa Las Docas, considerada uno de los últimos espacios vírgenes de la zona central de Chile, y el cerro Curauma, una de las principales alturas de la costa central, que conserva en sus entrañas toneladas de cuarzo. Por eso los dueños del lodge eligieron este lugar para instalarse.
Por $ 50.000 diarios por persona incluye alojamiento, pensión completa (para este 18 con platos criollos), excursiones de trekking y bicicleta y un masaje.
Lo mejor es que no hay que desplazarse demasiado para encontrar este novedoso sitio. Se encuentra ubicado en la playa Las Docas, en el sector de Curaumilla a unos 20 km al sur de Valparaíso.
www.refugiodesilencio.cl
6. Sea un arriero con estilo
Porque no es lo mismo andar a caballo que ser un arriero o, en este caso... ser un arriero con servicios top.
En el Puma Lodge de la cadena NOI, ubicado junto a la Reserva Nacional Río Los Cipreses en la Región de O'Higgins, compartirá las labores diarias de los arrieros que desde siglos han utilizado estos cerros para trasladar sus animales. Olvide todo lo que sabe del mundo, porque este mundo es otro y entre fogatas, asados y huellas de animales pasará las horas (aunque sea sólo por tres días). También se introducirá en la particular relación entre el arriero y su caballo y podrá aprender a ensillarlos a la usanza local.
Pero no se aflija ante tanta vida silvestre porque, al final del día, la cosa cambia. Puma Lodge es un exclusivo hospedaje de 24 habitaciones que cuenta con restaurante gourmet, sala de degustación (con una cava donde están presentes los mejores vinos del país) y spa.
Para estas Fiestas Patrias contará con un programa especial de cuatro noches, donde las excursiones de trekking, escalada y mountain bike, se combinarán con asados, comida criolla, juegos típicos y clases de cueca, más actividades enfocadas netamente en aprender la cultura huasa y arriera.
Los programas por persona van desde los $ 378.823 + IVA para las cuatro noches. Reservas al teléfono 24326800, www.pumalodge.cl/
7. Para comer lo que ya no se come
Vuelva a sentir esos aromas de las viejas preparaciones. Pruebe esos platos de los que tal vez oyó hablar a su abuela. Saboree las más ricas recetas del valle de Aconcagua, muy cerca de Santiago. Como el charqui arriero (charqui, aceite, cebolla, aceitunas), la cazuela nogada, hecha con las mejores nueces de la zona, o el arrollado a la chilena, con el picor perfecto.
A minutos de la Plaza Central de San Esteban de Los Andes se encuentra La Bodeguita de Muñoz. Este lugar seleccionado como una de las mejores picadas del país en la reciente versión de Guía100 de la CAV (Carlos Reyes y Rodrigo Martínez), que reúne los mejores restaurantes del país.
Una casa colonial de adobe que como picada tiene una tradición centenaria, siempre en manos de la familia Muñoz. Comida casera a buenos precios es el lema por acá. Para empezar, el propio Juan Muñoz recomienda una empanada de pino hecha en horno de barro (y que pesa cerca de medio kilo) a sólo $1.600. En platos de fondo, a los ya nombrados, obviamente se sumará una gran parrilla con costillas y carne a las brasas durante todo el día.
No es todo. A un costado de la casa hay una pequeña viña que elabora con las uvas cabernet sauvignon que la misma familia cosecha, vinos a la antigua, es decir, fermentado con levaduras naturales en vasijas de barro y una estupenda chicha artesanal, ideal para acompañar los enormes platos.
Ya lo sabe, reserve con tiempo al teléfono 34- 2488 119 y celular: 93444786.
8. Doña Albertina lo espera en Chiloé
Ok, vamos por parte. Antes de presentarle a Albertina Chodil, sepa que hará ejercicio y verá paisajes alucinantes en la Isla Grande de Chiloé. Tampoco se asuste, nada que no aguante alguien que tiene un estado físico medianamente normal. Son 38 km en bicicleta desde Chonchi al Parque Nacional Chiloé, por un camino pavimentado y con poco tránsito, que recorre gran parte de las riberas de los lagos Huillinco y Cucao.
En el sector de la comunidad indígena de Quilque tendrá la ocasión de conocer a doña Albertina, quien los espera en su casa con empanadas de corvina, queso de campo, milcaos, sabrosas verduras de su invernadero y el más rico jugo y pastel de ruibarbo. Sus preparaciones y una entretenida conversación con ella dan las energías necesarias para seguir rumbo.
Se continúan los últimos 8 km hasta llegar a Cucao, donde dejará la bicicleta para ingresar al Parque Nacional Chiloé, a su centro de visitantes y al sendero El Tepual, que describe un círculo dentro del bosque por pequeñas pasarelas y puentes. Al terminar, regresan a Castro en vehículo.
A la hora de cenar, en Castro salen caminando al Hostal Omera, pequeño café y restaurante con mucha onda. Ubicado en pleno centro (Latorre 120) y atendido por su dueño, ofrece un ambiente bohemio y cultural, es la elección diaria de muchos castreños y también predilecto para turistas que buscan alternativas más locales. Nada mejor que su cazuela de pava con chuchoca o sus pastas con salsa mar y tierra. Valor tour: $ 52.000 p.p. con guía todo el tramo, entradas, equipos, traslados y comidas incluidas. Otro autoguiado, $ 28.000 con equipos y traslado a Chonchi. La cena no está incluida, pero tiene un valor promedio de $ 5.000 p.p.
Programas en Chiloétnico: celular 9-91353448, www.chiloetnico.cl.
9. ¿Y qué tal un pie de cueca en Isla Mocha?
Será la excusa perfecta para ponerse en movimiento y quemar algo de calorías, porque lo que lo espera en esta isla de la Octava Región es un festín de comidas. Cordero, vacuno, sierras, róbalos, lenguados, corvinas y mariscos, son sólo parte de lo que ofrecerán en esta fiesta de cinco días en el extremo norte de la Isla Mocha.
Privilegio exclusivo para los pasajeros del Lodge Punta Norte. Aquí el anfitrión es Hernán Neira, su dueño, nieto de colonos mochanos y poseedor de esas personalidades encantadoras que hacen sentir de inmediato parte de la familia.
¿La encargada de la cocina? La "Chanita", una mochana de tomo y lomo, que tiene una mano única para hacer empanadas en todas sus versiones y reponedores caldillos para continuar las celebraciones.
Claro, el viaje no es corto, pero vale la pena. Primero hay que llegar hasta el límite sur de la Región del Bíobío, exactamente al aeródromo de Tirúa, para volar en avioneta 15 minutos hasta la isla y después desplazarse por polvorientas calles, donde escasean los autos y abundan las carretas.
El programa completo de cuatro noches cuesta $ 250.000 por persona, pero incluye traslado aéreo, excursiones por la isla, tour astronómico para ver las estrellas con telescopios y uso de hot tubs.
No deje de caminar por sus paradisíacas playas, la mayoría de ellas desiertas, o de recorrer los senderos de caminata que pertenecen a la Reserva Nacional.
Reservas en www.islamocha.cl o al celular (09) 88605405.
10. Duerma tres días en una ruka
Y con vista al lago. También tendrá su propio fogón, telar y no se preocupe: tiene camas. Las rukas se encuentran en la comunidad lafquenche de Llaguepulli, frente al lago Budi, el único lago salado de Chile. Pero no sólo eso. Si usted quiere, puede sacarse los zapatos, ponerse el poncho y tomar la chueca, ya que aquí pueden organizarle un partido de palín (y sí, también con vista al lago), recibir clases de manejo del telar o aprender a teñir lana al estilo mapuche (¿quiere aprender cómo teñir el color café?: hierva cáscara de cebolla). También podrá -literalmente- zambullirse en la cultura local (lafquenche significa "gente de mar") con paseos en kayaks y botes por las aguas del lago Budi, con la posibilidad de visitar la isla Cueva del Zorro, donde escuchará leyendas y tradiciones de este pueblo pesquero.
¿Ganas de probar con la comida local? La comunidad cuenta con su propio restaurante, Kom Che ni Ruka, que ofrece platos lafquenches como el huaiquil, un pez endémico del lago, acompañado por multrún (una masa hecha de trigo mote), papas, pebre y pan amasado. También tomar algo de mudai y, claro, llevarse estas recetas ancestrales para practicarlas en la casa.
Alojamiento desde $ 12.000 por persona. Celular: 9-86475058; e-mail: contacto@lagobudi.cl.
www.lagobudi.cl
11. Como los corsarios en Coquimbo
Según relata la historia, los piratas y corsarios eran buenos para dos cosas: hundir barcos de la corona... y celebrar. Así que nada mejor que pasar estas Fiestas Patrias como uno de ellos y en la "ciudad pirata" por excelencia en Chile: Coquimbo.
Desde la caleta de pescadores estará zarpando el galeón La Valeska, que es una réplica exacta de los barcos piratas que asolaban las costas de esta región en los siglos XVI y XVII, y su tripulación (vestida al más puro estilo de Barbarroja y sus secuaces) lo harán cómplice a usted y su familia del robo de un suculento botín.
Por $ 2.500 por pasajero, podrá navegar durante aproximadamente una hora, hasta la Isla de Lobos y volver por la costa de La Serena y Coquimbo, mirando la Avenida del Mar, mientras aprende cómo disparar cañones o hacer un asalto a cualquier barco que ostente la bandera de la Corona española.
Una experiencia muy divertida para niños y adultos. Puede realizar reservas al celular: 88475782.
http://galeonpiratacoquimbo.blogspot.com/
Y ya que está en la zona, no se olvide del Desierto Florido. Porque desde septiembre, el campo semiárido de la Cuarta Región comienza a cubrirse de colores por única vez en el año. Es cierto que su esplendor se muestra en octubre, pero para el 18 ya podrá observar especies como las patas de guanaco, añuñucas o suspiros del campo. Este fenómeno se encuentra sólo a dos horas de La Serena y los paquetes turísticos incluyen servicio de traslado, almuerzo, guía y, por supuesto, agua. Reservas al teléfono: (51) 2223624,www.turismodelfines.com
12. Siéntase un huaso en Casablanca
De 11:00 a 17:00 podrá vivir un concentrado de chilenidad en Estancia El Cuadro. A 45 minutos de Santiago, en el valle de Casablanca, está el viñedo, los vinos de producción propia, el tour por el jardín de cepas, el museo del vino y la degustación. Están los paseos en carreta, que parten apenas llegue por la mañana; el aire puro y esos juegos típicos que todos conocen pero pocos practican, como la rayuela, el taca-taca, las argollas y la rana. Y está la medialuna donde, a mediodía, los huasos muestran sus habilidades, mientras músicos y bailarines cierran la mañana con tonadas típicas y pies de cueca. Viene el aperitivo en la terraza y luego el almuerzo, que promete vinos de la casa y buenos cortes de carne. Para los que quieren seguir probando habilidades, la tarde cierra con un taller de fabricación de volantines.
Camino La Vinilla, km. 14, Casablanca. Valor adultos: $ 32.000; niños menores de 12 años: $ 10.000. Reservas: (32) 215 6817, info@elcuadro.cl, www.elcuadro.cl
¿Cómo llegar? Desde Santiago: tome Ruta 68 en dirección a Valparaíso. Tras pasar por el peaje del túnel Zapata, ingrese al paso sobre nivel y siga la señalización de acercamiento a Estancia El Cuadro.
Desde Valparaíso: tome Ruta 68 en dirección a Santiago. Luego, la salida indicada como Casablanca-Tapihue, ingrese al paso sobre nivel en dirección a Tapihue, siga la señalización de acercamiento a Estancia El Cuadro.
13. ...Y un hacendado en Pelluhue
¿Siempre soñó con alejarse de la ciudad y tener una casa en el campo que más encima esté a pasos de la playa? ¿No, nunca? No importa, porque después de vivir esta experiencia dieciochera no querrá volver a su ajetreada vida de ciudad.
En la Hacienda Ecuestre La Esperanza todo marcha a ritmo campesino y casi todo se hace sobre cuatro patas. Se anda a caballo por la tarde, por la noche y hasta se desayuna a caballo: el famoso "desayuno campero" es el gran fuerte del lugar y consiste en una cabalgata matutina a través de un sendero hasta lo alto de un cerro, donde lo estará esperando una mesa servida con huevos de campo, pan amasado y mermelada, una gran vista de Pelluhue, Región del Maule, localidad costera donde está ubicada la hacienda. Gracias a su cercanía con la playa, también está la posibilidad de recorrer las dunas a caballo y disfrutar de un aperitivo frente al mar o una cabalgata nocturna que culmina con una fogata acompañada de vinos, té y el infaltable guitarreo.
Cuenta con habitaciones incluso para familias de seis o más personas, equipadas con televisión, frigobar, baño privado y vista al mar.
Para Fiestas Patrias, la estadía mínima es de cuatro días y cinco noches.
El valor es de $ 65.000 el día por persona, todo incluido. Niños menores de 9 años, $ 49.000. Teléfono: 9-1583467, e-mail: info@haciendaecuestre.cl.
www.haciendaecuestre.cl
14. Siga las huellas de un puma, un zorro, un conejo...
¿Aventurero por naturaleza? O mejor aún: ¿tiene niños inquietos y no sabe qué hacer para entretenerlos (y hacerlos gastar energía)? Pues bien, el programa "Huelleros" del Ñanku Lodge es la respuesta a todas las anteriores.
En plena cordillera de la Región de la Araucanía, las salidas se internan en los bosques más tupidos de araucarias que existen en el país (y en el mundo) para sentirse como un verdadero rastreador del Animal Planet, buscando huellas frescas de pumas, zorros y conejos, ver a lo lejos el vuelo de los cóndores y escuchar el picotear de los pájaros carpinteros en los troncos de los milenarios árboles.
Y todo con raquetas de nieve.
Además, este centro turístico ofrece actividades con comunidades pehuenches, donde se podrá acercar a sus tradiciones y escuchar los relatos sobre las historias de los ngen-mawida, espíritus que protegen el bosque nativo, haciéndolo una experiencia inolvidable, sobre todo para los más chicos.
Este lodge es un hotel boutique ubicado en la Reserva Biosfera Araucarias (en las cercanías al centro de esquí Corralco) y entre sus instalaciones cuenta con habitaciones de alto nivel, sala de juegos, restaurante tradicional y jacuzzi al aire libre.
El hospedaje en la suite familiar para seis personas tiene un costo de US$ 490 + IVA por noche.
Reservas al celular: (9) 82891833, www.namkulodge.com
15. Vuele por las dunas de Putú
Despéinese. Llénese de adrenalina y saque el Chaleco López que lleva adentro. Viva la emoción extrema de sentirse como en el Dakar. Sólo a 23 km de Constitución, las dunas de Putú son el lugar perfecto para adentrarse en una aventura 4x4, con "paseos" que son verdaderos rally por este patrimonio natural de la Región del Maule. Por supuesto, la intensidad del recorrido varía según qué se escoja: un camión Unimog militar para 10 pasajeros, un buggie 6x6 para ocho o un 4x4 UTV de competición para cuatro personas, como los que se utilizan en el Dakar. Aunque ninguno deja de ser entretenido, el verdadero estilo rally es el 4x4, sólo para valientes.
Todos los vehículos son conducidos por choferes especializados y están equipados con cascos de seguridad y radios de comunicación. El paseo, que puede durar entre una y tres horas, incluye un relato sobre la formación de las dunas y humedales. O, en silencio, observar las colonias de cisnes de cuello negro y las amplias playas vírgenes que se recorren a toda velocidad.
Para sumarle atractivos a este panorama, su creador, Eduardo Correa, ofrece almuerzos preparados en las mismas dunas: desde asados típicos a preparaciones gourmet, como tártaro de róbalo y corvina agridulce. La idea es aprovechar las dunas en todo su esplendor. Los precios van desde los $ 20.000 p/persona, www.maulesorprendente.cl
16. Cambie el cabernet por una copa de pajarete
El brindis es igual, pero el sabor distinto y sorprendente para los paladares vírgenes. Es el pajarete, un vino dulce de color canela pálido que tiene denominación de origen en las regiones de Atacama y de Coquimbo, y que los jesuitas españoles llevaron a Huasco en el siglo XVII. En el Valle del Tránsito, comuna de Alto del Carmen, está uno de sus exponentes más famosos: Armidita, que consiguió 97 puntos en la Guía Palacio 2013 de vinos iberoamericanos.
Sus dueñas, Sandra, Cecilia y Lady Ramírez, realizan tours por esta viña familiar, relatando el proceso de elaboración del pajarete y mostrando los tanques de fermentación. Para estas Fiestas Patrias ofrecen un cóctel de degustación con sus vinos (el que se debe cotizar de manera personalizada en armidita@armidita.cl), donde también se pueden comprar sus productos. En la zona también se puede visitar la fábrica de aceite de oliva Payan Tume, donde se produce aceite extra virgen de los tipos monovarietal sevillana y manzanilla. Esta marca está calificada entre las 10 mejores del mundo y en 2009 recibió el Gran Prestigio de Oro en el congreso internacional Olivinus. Su dueño, Robinson González, también ofrece tours y degustaciones gratuitas por sus instalaciones en Huasco (contacto en payantume@gmail.com).
Otros atractivos de la región son el museo de Pinte, con fósiles milenarios y túmulos funerarios de la cultura molle, y sitios para ver petroglifos. Se recomienda arrendar un vehículo desde el aeropuerto de Copiapó.
17. Regrese a los tiempos de la Colonia
Si en algo son expertos en la Hacienda Las Juntas de Monte Patria es en tradiciones. Se construyó hace más de 200 años y llegó a ser una de las más importantes de la Región de Coquimbo, albergando a presidentes y artistas. Y acá puede sentirse como en aquella época.
La casa patronal, hoy convertida en un hotel de 18 habitaciones, está inserta en un parque de dos hectáreas de prados, árboles y estanques. Hay también 90 hectáreas de viñedos, cultivos, potreros y bosques centenarios, que se extienden a lo largo de toda la ribera del río Limarí y que se pueden conocer en diferentes excursiones. Ya afuera de la hacienda, el Valle de Limarí tiene un sinfín de atractivos imperdibles, como visitar viñas y pisqueras, recorrer el mítico Valle del Encanto con llamativos petroglifos o sorprenderse con el cielo estrellado en el observatorio turístico Cruz del Sur.
En medio de este paisaje campestre y atractivos para todos los gustos, la semana dieciochera se celebrará en grande en Las Juntas, con juegos populares como rayuela, paseos a caballo, campeonato de volantín o pillar el chancho encebado, además de esquinazos y lucirse con su gastronomía típicamente chilena, donde siempre se agrega un ingrediente secreto de estas tierras, como el queso de cabra o el pisco.
Valores desde $ 79.000 la habitación doble, y almuerzo campestre $25.000 por persona.
www.haciendajuntas.cl/
18. Cuatro días de yate y de fiordos
No necesita ser Simbad para tener una aventura marina. Es bastante más simple de lo que piensa. La propuesta consiste en cuatro días y tres noches recorriendo canales, fiordos e islas de la Región de Los Lagos en un yate junto a su familia o amigos. Son tres los veleros disponibles: para cuatro, seis y ocho personas, en todos tiene incluido desde el desayuno a la comida en la noche, además de empanadas y vino.
El zarpe es desde Puerto Montt, desde ahí al seno de Reloncaví, sintiendo el suave arrullo del mar. Se navega el canal Calbuco, estero Puluqui, el archipiélago de Calbuco y sus 14 pintorescas islas, en muchas de las cuales puede desembarcar y disfrutar de un curanto junto a sus habitantes, caminatas por bosques de arrayán o tardes de relajo en playas desiertas. ¿Le gusta pescar? Hay róbalos y salmones por montones y el equipo de pesca viene incluido, como también dos kayaks.
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