200 niños más al año podrían adoptarse por cambios en la ley

En la casa de Carolina (49 años, profesora, soltera) una muñeca hecha por su hermana, un peluche y muchos cuentos esperan la llegada de su hija. Aún no sabe su nombre, pero la que será su habitación está casi lista y esperando desde enero de este año, cuando el Servicio Nacional de Menores (Sename) -tras un año y medio- la calificó como idónea para adoptar. "Es una espera real, con harto cariño e incertidumbre. Me tiene con mucha ilusión", dice.

Como Carolina, otros 17 solteros están en la lista de espera para recibir un niño, de un total de 582, donde el 96% son matrimonios. Un panorama que promete cambiar con las modificaciones a la actual ley de adopción (19.968), vigente por 14 años y que en agosto ingresará al Congreso.

Los solteros ya no estarán en tercer lugar, tras los matrimonios chilenos y extranjeros, sino en el segundo. El proceso será mucho más rápido: propone un máximo de seis meses para que un niño pueda ser declarado sujeto de adopción. Carolina esperaría por su hija menos de un año y no hasta tres, como ocurre actualmente.

Estimaciones del Ministerio de Justicia señalan que en el primer año de aplicación de la ley, se produciría un aumento de 15% en las adopciones, pasando de las actuales 632 a 727. Para el segundo año la cifra estimada es de 822 (15%). "En dos años de vigencia de la ley se podrían aumentar en un 30% las adopciones y mantenerse estables, para luego disminuir levemente por la tasa de natalidad", sostiene Patricia Pérez, ministra de Justicia. Esto es unos 200 niños más adoptados cada año.

Posibilidades para todos

El aumento, dicen en el Ministerio, se debería a que el acortamiento de los plazos permitirá que más niños estén en condiciones de ser adoptados, lo que da más oportunidades a los solteros.

Carolina Von Schakmann, abogada del Departamento de Adopción de Sename, explica que actualmente hay un orden estricto de postulantes y en el caso de los solteros, que estaban en tercer lugar, les impide optar a niños más pequeños que son la opción de matrimonios en Chile o en el extranjero. "La actual propuesta que sólo establece dos órdenes, les dará más posibilidades. Se ha difundido bastante que para los solteros es un proceso complicado, con bastantes impedimentos y ahora con estos cambios deberían acercarse más", dice.

¿Abuela o mamá?

Bernardita Avendaño (54) cuida a su nieta desde los cinco años. Su hija y su yerno la abandonaron y su abuelo paterno abusó de ella. Para protegerla inició los trámites para tener su tuición. La niña tiene ahora 11 años y vive con ella, pero el padre de la niña cada cierto tiempo la amenaza con demandarla. Como ella, María Rebeca Carvajal (65), también ha cuidado a su nieto (de 5 años) desde hace tres años, porque su madre es drogadicta y su padre está preso. Ahora está a punto de tener legalmente su cuidado personal. "Hace muchos años que hago trámites. Se han demorado mucho", se queja.

Adoptar a sus nietos podría ser para ambas una figura más segura, especialmente para Bernardita que quiere dejarle sus bienes a su nieta y alejar la amenaza del padre. Pero, según explica el abogado Raúl Paillaleve, jefe del Centro de Atenciones Ciudadanas de la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ),el proceso requiere dos juicios y al hacerlo perdería su calidad de abuela. Su nieta sería legalmente su hija.

La nueva ley cambia ese escenario y permite que abuelos adopten bajo la figura de "protección intrafamiliar", que no altera su filiación. El abuelo adopta y legalmente se mantiene como tal.

La figura de protección intrafamiliar también permitirá adoptar a personas de entre 18 y 24 años. "Se trata de niños que habían vivido por años con personas con las que tenían algún parentesco, pero que no podían adoptar (porque la adopción de mayores de edad no estaba permitida). Ahora podrán", dijo la ministra.

Máximo seis meses

"Con la actual ley, los casos se demoraban muchísimo. Los niños se iban ya más grandecitos. Últimamente los plazos se han acortado un poco y eso ha sido tremendamente beneficioso, porque los niños necesitan tener un apego constante, seguro y mientras más chicos mejor. Ojalá se fueran antes de los seis meses. La institucionalización no les hace bien", dice María Cristina Rojas, directora de la Casa Nacional del Niño.

Los largos tiempos se deben, en especial, a los plazos que se establecen para que un niño sea declarado susceptible de adopción. La ley dice que se debe citar a todos los parientes del menor. Si ninguno se opone es posible iniciar el proceso. "Eso hace que el trámite sea muy largo, por lo que la modificación busca restringir la citación sólo a padres y abuelos, y excepcionalmente a otros parientes", indica la ministra.

De esa forma, cuando hayan pasado seis meses sin que la familia tenga contacto con ese niño y lo abandone, ya estaría en causal de adoptabilidad. "Actualmente ese tiempo se extiende indefinidamente y si la familia va esporádicamente pueden pasar años tratando de vincularlo a esa familia biológica", dice Pérez. Así, un niño que podría ser adoptado antes del año, es adoptado hasta cinco años después.

Paula Arroyave, directora del Programa de Adopción de Fundación San José, dice que "la nueva ley tiene la visión de dar a la familia de origen la posibilidad de estar presente, pero acorta los plazos para responder a la necesidad del niño y que no quede esperando eternamente en una institución".